— Te ves demacrado - Marcus pronunció con gracia, sus ojos astutos recorrieron con abides el cuerpo desnudo expuesto frente a él en toda su gloria. Daniel soltó un resoplido molesto.
— Agradezco el cumplido.
— ¿Aro te exprimió mucho ayer? - Marcus volvió a hablar, su sonrisita divertida provocando furia en el cuerpo de Daniel, el agua en la bañera estaba haciendo poco para enfriar su enojo.
— Puedes decirlo, todavía me duelen las piernas y las caderas, el muy desgraciado no me soltó hasta entrada la mañana. Doy gracias a Dios porque mis padres no se hayan quedado a dormir en casa.
— ¿Eso significa que no estás dispuesto a pasar tiempo conmigo?
— No he dicho eso...
— Entonces sal de ahí y date la vuelta para mí.
Eso no era una pregunta, era una orden. Una parte de Daniel quería decir que no, para ver hasta donde llevaba eso al Marcus que se presentaba en frente suyo, pero una parte de Daniel sintió que lo recorría un escalofrío al hacer algo tan travieso, aquí, en el baño de su habitación.
El hecho de que no conociera a Marcus demasiado bien como lo demostraba esta imagen dominante muy contraria a la calmada y tranquila a la que estaba acostumbrado, y que Marcus tuviera un aire de peligro a su alrededor, no hacía que Daniel lo quisiera menos tampoco. Sus sueños habían jugado con su mente durante demasiado tiempo y una parte de sí mismo estaba extrañamente convencida de que esto también debía ser un sueño.
A pesar de que experimentó que era real con Caius y Aro anteriormente.
Daniel se dio la vuelta, con la frente pegada a la pared y las manos colgando inútilmente a los costados. Se retorció cuando todo el cuerpo de Marcus se balanceó contra el suyo: la polla de Marcus estaba dura y presionaba contra la parte baja de la espalda de Daniel.
— He visto tu corazón, y es mío - susurró Marcus. Algo dentro de esa declaración disparó a Daniel y asintió mientras los dedos de Marcus se deslizaban sobre sus caderas — Y cualquier sueño travieso que hayas tenido se desvanecerá en comparación con lo que voy a hacerte.
El rubor en el rostro de Daniel nunca desaparecería. De esto, Daniel estaba seguro.
La mano de Marcus se arrastró sobre su trasero, sintiendo su curva, y Daniel gritó cuando su mano se conectó con fuerza contra su piel.
Marcus se rió entre dientes.
Daniel se mordió el labio con fuerza cuando Marcus le golpeó el trasero de nuevo, el sonido fue tan agudo como el pinchazo que siguió. — Buen chico... Muy bien...
La polla de Daniel estaba presionada contra su vientre cuando giró la cabeza para mirar a Marcus, y Marcus se detuvo brevemente, antes de besar a Daniel con avidez. El ángulo lo hizo incómodo, así que Daniel giró un poco, gimiendo en el beso y levantando una mano para pasar por el cabello de Marcus.
La lengua de Marcus se deslizó dentro de la boca de Daniel con una práctica facilitada que hizo que las rodillas de Daniel se debilitaran y respiró hondo por la nariz cuando la mano libre de Marcus se deslizó entre sus mejillas, frotando su codicioso agujerito.
— Tú, chico sucio - Marcus dijo y Daniel se estremeció — Realmente has estado deseando esto, ¿no es así?
Marcus retiró su mano del trasero de Daniel y lo escupió, y luego empujó un dedo dentro de Daniel sin previo aviso. Daniel ahogó un grito ahogado y dejó que su frente cayera contra la pared, su pene temblando.
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Fairy Tales •|Volturi Kings|
Fiksi Penggemar•"¡Pasad, pasad! No seais tímidos... Sentaos y disfrutad de la historia. Hoy les contaré el cuento de La Bella Durmiente y las Tres Bestias. Escuchad..." Una princesa maldecida y tres reyes bestias tratando de romper su hechizo. ¿Pero qué pasa cuand...