IV. Qatar

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-Chicos alguno de ustedes deberá de irse en otro auto, a menos que quieran ir como sardinas- habló Luis al ver que estábamos muy apretados.

Estaba por decir algo, cuando veo que la hermana de Ferran se sienta sobre Eric; eso me sorprendió y a la vez causó algo en mí que no sé cómo explicar.

-Al parecer ya lo solucionaron- dijo Luis suspirando mientras cerraba la puerta del carro.

El auto arrancó y en todo el camino no pude evitar sentirme extraño al ver como Lilian y Eric soltaban risitas.

-La mandíbula no se te va a caer si la dejas de apretar, eh- me susurró Pedri. Ni siquiera había notado lo tensa que estaba mi mandíbula hasta que lo mencionó.

Finalmente, llegamos al hotel, una vez que todos nos bajamos del auto, nos registramos y fuimos a nuestras respectivas habitaciones a descansar.

-¡Arriba Pablo!- me gritó Pedri haciendo que despertara de golpe -Mueve ese culo fuera de la cama, báñate y vístete para ir a desayunar- me ordenó cuando vio mis ojos abiertos.

-Joder Pedri, casi me meo del susto- le recrimine mientras le lanzaba una almohada.

-No me importa, arriba, que quiero ir a desayunar- dijo devolviéndome la almohada.

Me levanté, duché y vestí, una vez listo, ambos nos dirigimos a desayunar.

En el comedor ya estaban casi todos desayunando, Pedri y yo nos dirigimos a la barra para escoger nuestro desayuno y nos sentamos con los demás.

LILI:

-¡Liliiii! Arriba, que tengo hambre- me dijo Sira golpeándome el cuerpo con una almohada. Ayer nada más llegar a la habitación, caí rendida.

Tenía planeado dormir en el auto de camino al hotel, pero mis planes cambiaron al tener que sentarme en el regazo de Eric para alcanzar mejor y estuvo molestandome todo el trayecto.

-¡Siraaaa! Yo tengo más sueño que hambre, deja dormir y baja tu- dije cubriendome con las cobijas hasta la cabeza.

-Vamos, arriba, no quiero bajar sola- me quito las cobijas.

-¡Bien! ¡Ya voy!- dije parandome de mala gana de la cama.

Me bañé y me vestí.

-Anda, vamos abajo- dije saliendo del baño.

-¡Yeiii!- celebró Sira agarrando la llave del cuarto y agarrándome del brazo.

Bajamos al comedor del hotel, agarramos nuestro desayuno en la barra y nos dirigimos con los demás.

Iba a sentarme al lado de mi hermano, pero Sira me ganó, así que terminé sentándome entre Eric y Gavi.

-Buen día a todos- dije llegando a la mesa.

-Hola Torres- me sonrió Eric y besó mi mejilla una vez que me senté.

-Y bien...¿cuál es el plan para hoy?- preguntó Ansu.

-No lo sé- dijimos los demás.

-Hoy tenemos día libre- habló Pedri.

-Bien, ¿qué les parece si vamos al centro comercial?- propuso Sira.

Todos estuvimos de acuerdo, después del desayuno, como todos ya nos habíamos duchado y cambiado, nos trasladamos a una agencia de renta de autos para los días que estuviéramos aquí.

Decidimos rentar solamente dos.

En uno irían Sira, Ferran, Pedri y Ansu, mientras que en el otro iríamos Eric, Gavi y yo.

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