Mis colores favoritos negro y rojo

Capítulo 18

Enzo

Ayer no fui a la oficina y me levanté como todas las mañanas, pero tengo una sensación extraña, mi cuerpo se siente un poco pesado. Bajé al comedor y ya estaban todos ahí así que me senté y empezamos a desayunar, David llevaba su uniforme y recordé que no hemos hablado mucho

–Olvidé preguntártelo, pero ¿cómo te fue en la competencia de natación?–lo miré

–No estuvo mal, soy uno de los que representará a mi clase–se ve satisfecho

–¿Y cuándo será esa competición?–mi madre se ve curiosa

–En once días empieza, el lunes para ser exactos–indico

Al parecer es justo después de su cumpleaños, también recordé que en esa semana hay que donar algo para subastar y estuve pensando en dar un collar de diamantes. Llevé a David y al llegar vi a Sasha hablando con el tipo del otro día

Parecen muy cercanos y eso me molesta, no entiendo como si apenas lo conoce puede ser así de confiada quién sabe qué clase de persona podría ser. Nos acercamos y David fue directo a abrazarla y ella correspondió sin demora 'ojalá pudiera alejar a ese hombre'

–Buenos días, Sasha–dije amable–buen día–saludé al chico más serio

–Buenos días–respondieron al mismo tiempo

–Señor Enzo buenos días–la maestra apareció

–Buen día–respondí

No entiendo cómo hace para verse tan provocativa en frente de los niños eso es antiprofesional, normalmente lo hace, pero hoy está rompiendo sus límites, su escote es más amplio y esa ropa no es de su talla y su cabello suelto

Aún con todo eso no me interesa, así que sigo mirándola a los ojos y no me dejo llevar por la ropa provocativa. Esto me recuerda a cuando Mariana intentaba provocarme y se ponía ropa provocativa pero jamás pudo llamar mi atención sexualmente

Está bien que se vistan así, pero lo que las hace ver mal es querer provocar a propósito, eso las hace quedar como unas cualquieras y se pierde el interés, pero cuando solo se visten así para ellas y no van provocando se ven más atrayentes y sexis

–Señor ¿podemos hablar un momento?–se mueve un poco

–¿De qué se trata?–hable con frialdad

–Acompáñeme–empezó a caminar

Miré a Sasha un momento y luego seguí a la maestra, quién se detuvo un poco más adelante, me miraba con deseo y eso no me agrada, me detuve a una distancia considerable y la seguí mirándola los ojos

–Señor no había tenido la oportunidad de felicitarlo por la gran participación de David en la competencia de natación–me sonríe

–¿Me llamo solo para eso?–la miré serio

–No, también quería que considerara en darle algunas lecciones al niño para que mejore en sus calificaciones, y como dije yo puedo ayudarlo–seguía moviéndose

–No será necesario, él ya está recibiendo lecciones así que no se preocupe, ahora sí me disculpa tengo asuntos que atender–me di la vuelta

Al girar vi como Sasha se despedía del hombre con un beso en la mejilla y eso me molestó ya que estaban demasiado cerca, el subió a su motocicleta y se marchó. Me acerque y la pelirroja estaba abriendo la puerta de su auto. Pero la detuve y me miro con frialdad a lo que entendí que no le gusto mi acción, no se me ocurría ninguna excusa, pero recordé lo que dijo mi abuelo