Mi hermanito se la pasaba muy bien con Jaden jugando en los videojuegos. Sabía que se llevarían muy bien, mamá no paraba de comentar que era muy lindo y que le gustaba la forma en que sus ojos azules me miraban.
Y no lo negaba a mi también me gustaba esa mirada.
Dylan muy curioso le hacía todo tipo de preguntas, él le respondía si parecer incómodo sentados en el suelo sobre los cojines. Ambos se la pasaban muy bien después de la cena, como si se hubieran conocido hace tiempo.
—Yo también quiero jugar —dije
—Pero no sabes —replicó Dylan sin apartar la mirada de la pantalla.
Encogí mis hombros secando mis manos con un paño.
—Puedo aprender si me enseñan —Jaden dejó de jugar para darme una repasada de cuerpo completo
—Yo lo haré —dijo palmeando sus piernas, a las cuales me acerqué y me senté en ellas, no tardo en rodearme con sus brazos apoyando su cabeza en mi hombro izquierdo— Pon tus manos aquí
Me dió el control remoto colocando mis dedos en cada botón correspondiente.
—¿Así?
—Mhm —asintió— ahora intenta moverlo
—Es un poco difícil —reí
—Solo debes practicar —murmuró
—Sin duda soy pésima —dije en el mismo tono viendo cómo perdía el juego— Soy un fracaso
—Solo debes hacerlo con calma y paciencia —deslizo sus dedos por mis caderas, mi estómago se encogió— Es un juego fácil
—No para mí
Un silencio abrazador se formó entre los dos, los sonidos del juego mientras mi hermano jugaba. Miré de reojo en su dirección, sus ojos entrecerrados intentando mantenerse despierto, Jaden se veía cansado.
—Vamos a dormir —dije poniéndome de pie, miré a Dylan— no te duermas tarde
—Esta bien —sonrió
Me incline para besar su mejilla y decirle a mamá que iríamos a dormir. Abrí la puerta de mi habitación dejándolo pasar, antes le había mostrada mi cuarto así que no hizo más que tirarse en la pequeña cama que compartiríamos.
Le di una breve mirada para después ponerme algo cómodo y apagar la luz de la lamparita de la cómoda mientras me metía en la cama.
—Sin sujetador —ordenó apuntándome, con los ojos entrecerrados
Ruedo los ojos y llevo mis manos debajo de la blusa para quitar el broche mientras a él se le forma una sonrisa de suficiencia. Suspiro tirando el mismo aún lado y me acomodo entre los brazos de él, quien hundió su cara en mi cuello he inhaló.
Pensándolo bien, fue un terrible error haberme ido y dejado a Jaden. No podía soportar un día sin él.
—Eres mi debilidad, Jaden... —susurró con la mirada perdida en la pared— Y odio sentirme así. Me prometí a mí misma que no podia suceder de nuevo, pero cuando estoy contigo es como si..
—..te olvidarás del mundo, y no existiera nadie más que nosotros —asentí dándole la razón
—¿Te has sentido así?
—Siempre que estoy contigo —confesó— También eres mi debilidad, Shen
Me di la vuelta y me subí en su abdomen.
—Si digo te amo sería muy poco para los dos...—corro un mechón detrás de oreja avergonzada— apesar de este absurdo problema
—¿Cómo lo llamarías? —se levantó apoyado en sus brazos, inclinando su cuerpo
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Hasta la última Canción [✓]
Ficção AdolescenteTenía una vida normal, básica. Mi propósito era hacerme escritora aunque no creyera en eso del amor pero era mi punto. Bueno, hasta que un guitarrista engreído y presumido con un cuerpo de infarto se atraviesa en mi camino con su motocicleta, provoc...