Suelen decir que los polos opuestos se atraen, en ésta historia lo averiguaremos!
Jorge Anzaldo, un chico de 18 años, nunca ha sido de tener muchos amigos, principalmente porque la gente a su al rededor dice que es "desagradable" aunque el piensa que esto es debido a que no agarra confianza con nadie.
Diego Cárdenas, también de 18 años, a diferencia de Jorge, tenía un gran grupo de amigos, pero la más cercana a él, era Danna. Dicen que la gente más sonriente es la que peor la está pasando, la que mas tristezas esconde, en el caso de Diego, esto era muy cierto, ya que aunque era querido por mucha gente, había sido internado por bulimia y depresión a pesar de su corta edad.
Jorge, llegaba una tarde a su casa, después de un estresante día de clases, dejó su mochila en el sofá y encendió su celular, pero su madre lo detuvo para tener una seria conversación con él.
- Hijo, sabes sobre la otra vez... Sigo muy preocupada por ti.
-No es un gran problema mamá~
-Claro que lo es, de verdad te veo mal hijo, y tengo que hablarte sobre eso...
-Que necesitas decirme?
- He pensado en llevarte con un psicólogo. - Jorge finalmente despegó su mirada del celular para ver a su madre directamente a los ojos
-Cómo podrias hacer eso? Soy un jóven normal con bajones y ya!
-Cariño lo del otro día fué grave, y lo que me dijiste... Tienes que hablar de todo eso que sientes con un especialista! Sería lo mejor.
-Deja de intentarlo, no lo haré, no estoy loco, estoy bien, te lo prometo. - Por desgracia para Jorge, su madre lo conocía bien, y sabía que esto no era cierto.
- Bueno hijo, no sigas negandote, ya es muy tarde y ya te conseguí una psicóloga para mañana a las 11 de la mañana, te parece?
-No, no me parece, estás arruinando todo haciendome esto. - Jorge corrió a su habitación y cerró la puerta con fuerza, no quería hablar con un psicólogo, pensaba que estos no servían para nada, pensaba que sus problemas no tendrían solución.Al día siguiente, Jorge despertó a las 10 AM, estaba un poco alegre de haber faltado a la escuela, pero al mismo tiempo le desagradaba la razón, le parecía una pérdida de tiempo y un desperdicio de dinero ir con un psicólogo.
Jorge entró a una habitación con su ahora nueva psicóloga, mientras su madre esperaba fuera.
-Tu nombre es Jorge, cierto?
-Sí, lo és. - No la estaría mirando a los ojos, estaba inspeccionando la habitación y lo que había a su al rededor. - Bien, como te sientes? -
Jorge la miró con una expresión de desagrado. -Cómo piensas que estoy como para venir aquí? - Él solía ser así de arrogante y por suerte la psicóloga había tenido suficientes pacientes y mucha experiencia cómo para no irritarse de inmediato con la personalidad del menor.Tuvieron una larga conversación, aunque al ser la primera sesión, no habían hablado de temas muy fuertes o personales, prácticamente la única razón por la que Jorge debía ir ahí.
En el auto, camino a su casa.
-Cómo te fué cariño? - Preguntó su madre con una voz dulce mientras conducía.
- Normal, no hablamos de nada relevante... Sabes que no necesito volver, está bien? - Jorge estaba casi que suplicandole a su madre.
- No, no estoy de acuerdo, llevas recién una sesión, Jorge, la próxima semana, el lunes, volverás a ir, y no quiero más quejas, no voy a cambiar de opinión.Jorge dió vuelta su mirada hacía la ventana del auto, estaba muy enojado, aunque entendía que su madre lo hacía por su bien, el sentía que no lo necesitaba, en realidad, el no quería ayuda, prácticamente había "aceptado" su estado y tristezas constantes.
Al día siguiente.
Empezó un día Jueves, Jorge debía ir a la escuela, se levantó, se duchó, cuidando mucho su lindo y destacable pelo rizado, se vistió y tomó el desayuno que con mucho cariño le había hecho su madre, para finalmente él poder irse a la escuela.
Solía irse caminando, algo agotador aunque lo difrutaba, le gustaba caminar mientras veía a su al rededor, lo más importante eran sus auriculares, sentía que no podía vivir sin ellos, ese es un detalle importante en él, Jorge ama la música, y sobre todo, ama bailarla, lo cuál no hace nada mal.
En todas las clases se quedaba dormido, se sentaba en una esquina al fondo sin nadie a su lado, pues no tenía amigos ni nada por el estilo, por decirlo de alguna forma, los maestros tampoco solían notar su presencia, así que nada le interrumpía tomar una "corta" siesta en cada clase que le aburría, o sea, todas.
En los recreos, las cosas eran iguales, nadie parecía notarlo, ni para ser su amigo, ni para burlarse de él, no, realmente nadie lo notaba para nada, pocas veces hablaba con sus compañeros, habría cruzado unas cuantas pocas palabras con Kim Shantal, algo amable, nada fuera de lo común, pero aparte de eso, con nadie más. Aunque nadie lo molestaba ni lo insultaba a él directamente, se rumoreaban cosas de él, se decían muchas cosas con malas intenciones, y obviamente Jorge ésto lo sabía, pero no podía hacer nada al respecto, era un simple "rarito" excluido en la escuela.
Jorge se regresaba a su casa de la misma manera en la que iba, caminando, con sus auriculares puestos, música a todo volúmen y unas lindas vistas de las calles por las que andaba. Cuando llegaba a su casa, una de las cosas que más disfrutaba, era encerrarse en su cuarto por horas y bailar cuantas canciones y coreografías era capaz, ésta actividad lo distraía de la aburrida y triste vida que tenía que soportar todos los días, lo hacía olvidarse de los malos rumores que se hacían sobre él, lo hacía olvidarse de todo lo que tuvo que pasar en su niñez, y lo que éstas experiencias le dejaron incluso en la adolescencia.
Aparte del hermoso arte que era bailar, le gustaba dibujar, aunque odiaba pintar, por eso usualmente sus dibujos se veían "simples", solía dejarlos en blanco y negro.
Ya cansado de tanto moverse, se sentaba en su escritorio y dibujaba, quizas alguna persona que ni siquiera existía, quizás algún paisaje que recordaba haber visto y que le haya llamado la atención, cualquier cosa que lo distraiga, lo disfrutaba.
Q emoción empezar una nueva historia! Tengo muchas ideas preparadas para ésta! :3
Recuerden votar y dejarme su opinión en comentarios!! Intentaré subir capítulos mas seguido, espero lo disfruten, los kiero! 💗
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Era El Destino | DIORGE
RomansDos jóvenes de 18 años se conocen en un hospital psiquiátrico, uno muy simpático y el otro muy frío, polos opuestos se atraen, no?