𝐦𝐞 𝐠𝐮stas | warren x layla

O2 ! no sé lo que estoy haciendo pero no me desagrada

en los planes del mocoso con cara de señor no estaba seguir conversando con la niña pelirroja; si bien, su plan inicial era disculparse e irse de ahí porque no tenía nada que hacer con ella, cuando vio su carita de felicidad no le pareció correcto dejarla de nuevo sola. y si le preguntas, no se fue cuando la maestra llegó porque aún así, no era lo mismo.

él entendía el sentimiento de ser dejado de lado, así que, en su cabeza se hizo la promesa de que ella no pasaría por lo mismo que él.

veía a la niña que saltaba mientras iban de camino al jardín, no entendía ese gusto de ella por las flores o los insectos, en su opinión, todos esos animalitos daban asco, pero no sabía que tan bien estaría que él comentara eso frente de ella.

sabía que había límites y no podía meterse con los gustos ajenos solamente porque a él no le gustase algo.

layla tomaba la mano de warren con confianza, lo sujetaba con fuerza y lo llevaba de arriba abajo a la primera oportunidad. sentía que se estaba aferrando a eso sin siquiera quererlo, pero no podía evitarlo, era su primer amigo y ella quería mostrarle a los demás que por fin alguien la tomaba en cuenta.

no sabía que tanto fuese a durar eso, no sabía que tan especial sería ella para él, y solo quería demostrarle como era ella realmente, porque su hermana le había dicho que no podía fingir nada, que eso no la llevaría a ningún lado.

y ella estaba feliz de mostrarle a warren cómo era ella.

se dejó caer de un jalón en el pasto, había tenido cuidado de no dañar a las hermosas flores que adornaban alrededor, y warren siguió su ejemplo, sentándose a su lado, aún sin decir nada. pues desde que se había presentado afuera de su salón de clases con su lonchera de superhéroes no había dicho nada.

— no entiendo. — dijo ella bajito, comenzando a juntar las suficientes flores para una corona.

— ¿qué cosa?

— el por que estás aquí.

— ¿hay algo malo en eso? — el niño parecía estar enojado. su ceño se frunció con gran velocidad y ella comenzó a pucherear.

— no. me gusta que estés aquí. — sus mejillas se sonrojaron. — es solo... ¿no te preocupa que dirán los demás? ellos... ellos podrían dejarte de lado para futuros juegos...

warren relajó su entrecejo y se encogió de hombros mientras se disponía a sacar su sándwich. — papá dice que los niños a nuestra edad suelen ser tontos y le hacen daño a los otros de forma inconsciente porque no saben el poder de sus palabras, pero que aún así no debería de importarme si ellos me aceptan o no. — la miró, notando la atención en sus ojos verdes esmeralda. arrugó su nariz ante eso. — me agradas, layla, aunque a veces hables mucho.

ella le sonrió, regresando su vista hacia la pequeña corona que aún no tenía forma.

el silencio gobernó, claro que si con 'silencio' nos referimos a los tarareos de la canción introductoria al programa 'amigazazo' del cual layla le había contado el día de ayer mientras coloreaban a la jirafa rosa de nombre 'nessa' que tanto le gustaba a ella.

ni siquiera supo en qué momento ella había terminado de hacer lo que estaba haciendo con las flores, ni el por qué había dejado que ella le colocara esa cosa en la cabeza.

pero cuando vio sus ojitos brillar de nuevo con esa intensidad, supo que no debía dialogar sobre eso. y cuando vio que la pelirroja cargaba una tiara similar a la suya en sus cabellos, solo se resignó ante la idea de cargar con ella.

poco sabe layla sobre cómo warren cuidó de la tiara. poco sabe de las burlas de sus compañeros ante eso. poco sabe de lo raro que se sentía por cargar con ella entre sus cabellos. poco sabe de que no se la quitó en ningún momento.

pero aún con todo eso, a él no le importó más que hacer feliz a la niña pelirroja.

y al salir, él le sonrió cuando ella se acercó a abrazarlo, deseándole una linda tarde y que lo vería mañana sin falta.

y esa sonrisa gigante de la niña lo hizo sentir importante el resto de su día.