𝐦𝐞 𝐠𝐮stas | warren x layla

O4 ! no tenemos la edad para pensar en eso.

infancia — edad — 8 años :

aunque los años habían pasado y layla tuvo miedo de que ellos dejaran de ser sus amigos una vez que salieran del jardín de niños, y los chicos le hicieron saber que su amistad no quedaría ahí. iban a la misma primaria aunque en diferentes salones, como al inicio de todo, pero no era algo que se interpusiera entre ellos.

seguían siendo los mismos, buscando jugar y criticando los gustos de layla por las caricaturas, porque según zack : « ¿cómo vas a preferir amigazazo teniendo tremenda obra de arte como los backyardigans? simplemente tonto. » o ethan que : « peztronauta los destierra a todos ustedes porque no solamente es un pez, sino también un astronauta que tiene de amigos a una niña y un mono con los cuales ayudan a salvar el mundo. » y luego warren con su : « sus caricaturas son tan tontas como ustedes, porque la mejor caricatura que existe es wow wow wubbzy, y no pienso discutirlo porque lo mío es una realidad, no una opinión. »

y luego miraría a layla esperando no ver una mueca de disgusto en su cara, porque no sabía que tan tonto sonaba al decir eso, y no quería quedar mal con ella. no quería decirlo en voz alta, pero a veces tenía miedo de hacerle daño con su opinión. no sabía que tan fuerte podía ser y, prefería evitar cualquier tipo de daño que pudiera hacerle a la niña de sonrisa brillante.

otra cosa que había notado, es que cuidaba más de lo usual a la niña. y es que, si le preguntas el por qué, es que tiene miedo de hacer alguna estupidez que pudiera hacerle daño. aunque sabe que a veces hay cosas que no pueden evitarse, y si algo va suceder lo va hacer.

— warren, — los deditos de layla se aferraron a su mano, ella y él se habían adelantado para comprar lo que iban a comer, aunque a decir verdad ella solamente estaba haciéndole compañía porque a ella seguían dándole lonche. la miró, haciéndole saber que podía decirle. — esa chica te está mirando, quizás le gustes.

y hubo algo en su sonrisa que le gustó. quizás fue porque ya no tenía sus dos dientes delanteros de leche y ahora estos estaban torcidos, o quizás porque tenía ese brillo labial transparente con olor a fresa esparcido erróneamente en sus labios.

bueno, quizás no era nada y solamente la encontraba bonita.

miró hacia donde ella señaló y la notó, la niña era linda, pero si le preguntas, no era más bonita que layla.

la miró de regreso, la pelirroja lo esperaba con una respuesta, pero él solo se encogió de hombros.

— no digo que seas su novio o algo.

— tampoco quiero eso. no tengo edad para pensar en ese tipo de cosas. y tú tampoco, así que, — de nuevo, ese encogimiento de hombros que era tan característico de él. — y jamás pensaría en ella como mi novia, lay. aunque, si me preguntas, — ella lo miró ansiosa, mientras una sonrisa se posaba en los labios del pequeño. — me gustas más tú que ella.