veinte: intervención

216 29 8
                                    

Yeosang se había desmayado después de hablar. Seonghwa sabía que estaría dormido por lo menos un par de días, su desgaste energético había sido más de lo que un humano normal podía soportar, afortunadamente por alguna extraña razón, Yeosang había sido capaz de resistir.

Seonghwa, junto a Mingi y Hongjoong se limitaron a reunirse en el estudio del mayor mientras evaluaban qué iban a hacer a partir de ese momento. Wooyoung y San no habían vuelto desde que discutieron en la sala de estar hace unas horas, pero Mingi les había asegurado a los demás que iban a estar bien. Yunho seguía encerrado en su habitación y no parecía haber fuerza posible que lo saque de ahí en un buen tiempo. Por otro lado, Lia se encontraba cuidando a Yeosang, después de llegar a un acuerdo sobre el asunto de Jongho se lo comunicarían.

De hecho, ese era el dilema que se les presentaba ahora. Hongjoong no estaba seguro si valía la pena arriesgarse, entrando al bosque. El problema era que muchas veces las realidades que mostraba el otro mundo no eran certeras. Para un sólo suceso podían abrirse miles de posibilidades. Si Yeosang había encontrado a Jongho en el bosque, las probabilidades de encontrarlo vivo eran tantas como las de encontrarlo muerto, o que simplemente ya no esté ahí. Lo cierto era que Yeosang era parte importante de aquella encrucijada; sin embargo, Seonghwa dudaba que después de lo vivido aquel día fuera a aceptar ayudarlos otra vez.

—Es imposible que le pase algo malo— comentó Hongjoong— Es imposible, ustedes lo saben.

—Eso es justamente lo que me preocupa— respondió Seonghwa con una expresión indescifrable

—Mientras más tiempo pase, va a ser peor— añadió Mingi— Yo creo que debemos ir a buscarlo

—¿Quiénes? ¿Sólo ustedes dos?— Preguntó Hongjoong, evaluando las posibilidades que se le abrían

—No hay nadie más que pueda hacerlo— resolvió finalmente Seonghwa

—De todas formas, deberíamos prepararnos un par de semanas. No entro al bosque hace años, no sé qué tanto hayan cambiado las cosas por ahí— dijo Mingi.

—Están mal— Seonghwa contestó la pregunta implícita— y con su llegada, todo debe estar peor. Dawon dejó de responder hace semanas.

—¡¿Qué?!— Exclamó Hongjoong

—No se los dije porque así es ella, a veces desaparece. La última vez dijo que los árboles estaban comenzando a consumirse, el fuego no terminaba nunca...

—¡Seonghwa eso es gravísimo! ¡Debiste decirnos!— Dijo Mingi igual de alterado que el otro chico.

—Pensé que podía hacer algo... Los libros dicen que estamos en el tiempo final de todo esto

—Si se consume lo que estoy buscando— susurró Hongjoong— no quedan esperanzas ¿verdad?

—Así es— concluyó Seonghwa.

—Debemos entrar lo más pronto posible entonces, no tenemos de otra— Mingi resolvió finalmente.

—Iré con ustedes— Hongjoong dijo

—Alguien debe quedarse aquí— Seonghwa razonó— Mingi y yo estaremos bien

—No puedo quedarme aquí pensando en que puedo perderte ahí dentro— Hongjoong susurró tomando el rostro de Seonghwa entre sus manos.

—Dios mío, mejor me voy— dijo Mingi rodando los ojos.


Cuando Yeosang despertó ya había amanecido el día siguiente. Era lunes por el medio día y estaba seguro de que su ausencia en la Academia ya había levantado sospechas sin importar si Wooyoung lo había excusado con sus profesores o algo así.

we're fever » jongsangDonde viven las historias. Descúbrelo ahora