O7 ♡

2.5K 199 30
                                    

Taehyung movía nerviosamente su pierna en un tic ansioso. Todo el asunto lo había tenido con los pelos de punta desde que habían hablado sobre conocer a los padres de Jungkook y que éste conociera a sus suegros después de diez meses de relación. El doncel se había mudado con ellos a los dos meses de haber empezado el noviazgo porque prácticamente vivía más en el apartamento que ellos compartían que en el suyo, el cual era bastante pequeño. Desde entonces, los gastos de la renta y los servicios se repartían entre los tres, haciéndolo más llevadero.

La cuestión era que los señores Park y Kim exigieron hacer una reunión porque llevaban un tiempo sin verse, y recordaron que ellos todavía no sabían absolutamente nada sobre que una tercera persona se les había sumado, así que decidieron que lo mejor era resolver ese asunto aprovechando la ocasión. Jungkook había llamado a sus padres y en cuanto dijo que quería presentarles a alguien, los señores Jeon no pusieron ninguna pega, completamente emocionados de que su único hijo doncel hubiera conseguido una pareja.

La verdad es que los señores Jeon eran unas personas llenas de amor y comprensión que siempre amaron a Jungkook con todo su corazón. El pelinegro siempre tuvo padres que lo escuchaban y lo apoyaban, aunque estaba nervioso por cómo reaccionarían, estaba seguro de que al final lo iban a entender (o eso esperaba).

—Taehyungie, cielo.. ya verás que todo va a salir bien —le dijo Jungkook con voz dulce a la vez que sostenía delicadamente su rostro. Le dio un beso suave y lleno de amor que buscaba transmitir esa calma que necesitaba. Taehyung suspiró de gusto y sostuvo la cintura del menor, al final Jungkook terminó sentado en las piernas de uno de sus novios.

Amaba cuando Jungkook lo mimaba.

—Como antojan y no invitan —escucharon a Jimin hablar, saliendo del cuarto ya completamente arreglado para la ocasión, ni muy elegante ni muy casual. Jungkook se separó de Taehyung dejando un último beso en sus labios antes de finalmente mirar a Jimin con una sonrisa coqueta al verlo peinado con el cabello hacia atrás. Se veía tan sexy con la frente descubierta—, veo que te gusta cómo me veo —dijo, coqueto, inclinándose sobre la espalda del sofá para alcanzar los labios de Jungkook, que lo recibieron con gusto.

El beso fue un poco más profundo y sensual que el que compartió con Tae, logrando hacerlo gemir ahogado contra sus labios mientras llevaba sus manos hacia su nuca e inconscientemente comenzó a balancearse de adelante hacia atrás sobre el regazo del castaño. Taehyung siseó, tomando las caderas de Jungkook con fuerza para que se detuviera.

—Gukie, si sigues así vamos a terminar en la cama y ahora no es un buen momento para eso teniendo en cuenta que en dos horas llegarán nuestros padres —explica, esforzándose para mantener la lógica en su puesto.

Jungkook se quejó, separándose del candente beso que estaba compartiendo con Jimin. El rubio le guiñó un ojo que lo hizo sonreír antes de agachar la cabeza para encontrar los labios de Taehyung y darle un beso igual de caliente, aunque el que estuvieran al revés lo hacía un poco más difícil.

Después de eso se levantaron y terminaron de hacer los últimos detalles a la mesa del comedor. Los tres habían cocinado juntos y hecho fetuccini en salsa Alfredo acompañado con un poco de vino. Era claro que se habían esforzado en que todo se viera bien.

Los señores Park y Kim llegaron media hora antes de lo acordado, como siempre. Todos se saludaron con emoción hasta que Jungkook salió de la cocina hecho un manojo de nervios, y entonces la sala se sumió en un silencio que le puso los pelos de punta.

—B-buenas noches, señores Kim y Park. Soy Jeon Jungkook —saludó con una reverencia, y aunque era claro que los mayores estaban bastante confundidos de ver a un doncel vestido para la ocasión en el apartamento de sus hijos cuando se suponía que era una reunión familiar, ellos le correspondieron el saludo con una sonrisa a pesar de todo, y Jungkook se sintió un poco más tranquilo.

¿Sale trío? ✧ MINVKOOK.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora