||𝐊𝐢𝐥𝐥 𝐟𝐨𝐫 𝐲𝐨𝐮||

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"T̷e̷ a̷m̷o̷ q̷u̷e̷ e̷s̷t̷a̷r̷i̷a̷ d̷i̷s̷p̷u̷e̷s̷t̷o̷ a̷ m̷a̷t̷a̷r̷ p̷o̷r̷ T̷i̷".

Existen varios tipos de relaciones y todas pueden ser perfectas del todo, siempre van a ver defectos por parte de las dos personas, somos ciegos que no sabemos los límites de nuestras acciones, todo por una persona o una cosa hasta conseguirla, Amarla tanto de tener pensamientos asesinos de que se queden para siempre contigo. Takemichi lo vio así con su pareja, Manjiro Sano. No fue muy sorprendente para todos porque ellos ya parecian gustarse de mucho tiempo sólo que no lo querian aceptar uno al otro, pero...

"No todas las relaciones son sanas"

Al iniciar su relación fue tranquilo, hasta que Takemichi se enteró de algo por parte de Mikey y era que tenía problemas con el alcohol, antes de oficializar su relación a Mikey lo invitaban mucho a tomar junto a la pandilla pero hubo una vez que el rubio no se supo controlar y terminó golpeando a dos chicos en el bar, desde entonces han tenido miedo en meter a Mikey a esos lugares o darle algo de alcohol pero igual tiene una causa esos problemas. Al momento en que Takemichi se había enterado se quedó sorprendido al saber lo que hizo el rubio cegado por el alcohol.

Ahora Takemichi sabía de los problemas de Manjiro, incluyendo su problema con el alcohol, aunque él durante su relación nunca vio tomar a Manjiro, era cómo si él mismo habia acabado con su adicción, que con estar con él lo olvidaba de sus adicciones. Takemichi le había dicho muchas veces que tomar no era bueno para su salud. El problema del alcoholismo de Manjiro se generó en su infancia, Veía tomar a su padre en muchas ocasiones; era violento y sus hermanos y él aveces tenían miedo de acercarse a él en su estado, para Mikey fue muy traumatico en una ocasión que en su estado, su padre golpeó a su madre; sus hermanos les suplicaba que se deteniera pero terminó mal.

En ese entonces Manjiro tiene miedo de seguir los pasos de su padre con Takemichi, quería dejar el alcohol pero le era difícil; solo porque el menor se lo impedia aveces, pero sabia que tendría que haber momentos dónde él no estaría y no podrá impedir eso, tenia miedo de solo imaginar a Mikey en ese estado, de estar embrio y que pueda lastimar a alguien, igual sus amigos lo apoyaban para que se controlará o mejor que lo dejará.

—Mikey, te e dicho que no es bueno tomar—Decia el rubio quitandole la botella de alcohol a su novio para remplazarlo con agua.

—Lo sé Takemichi, Pero no puedo evitarlo— Recalcó recibiendo gustosamente el vaso de agua

—Mi amor, Ya lo habiamos hablado, siempre voy a estar contigo para lo que sea— Expresó el rubio besando sus labios, provocando que Manjiro lo tomará de la cintura para sentarlo en sus piernas disfrutando de los besos y mimos de su lindo novio. Mikey amaba ese apoyo y atención que Takemichi le daba, era una de sus tantas parejas que lo apoyaba con el tema de su alcoholismo, al momento que se los decia a sus parejas lo dejaban y se iba sin decir nada, era algo que Mikey le daba y una de las razones que no le dijo de ese tema a Takemichi.

Al principio sabía que era malo tratándose de su novio, pero tampoco queria perderlo o que se alejará de él por sólo su problema, aún recuerda la primera vez que probó un trago y fue como si se hubiera desconectado de la realidad, dónde se sentia suficiente; dónde no se sentia culpable; dónde se sentia feliz.

Takemichi pensó que sería fácil, eso fue lo peor que pudo pensar, cada vez parecia alejarse de Manjiro con decirlo asi,sentia miedo constante de Mikey y que lo llegará a lastimar,igual estaba ocupado con cosas de la escuela y casi no tenia tiempo para quedarse en la casa de Mikey, casi Takemichi no dormia en la misma cama que él o ya ni llegaba al departamento de Mikey a visitarlo.

Fue que hasta una noche Mikey queria ver a Takemichi; miraba la pantalla principal de su teléfono, sin ningún mensaje, sin ninguna señal de su novio. Veia su chat y no estaba en línea; creyó que hablaba con algunos de sus amigos o algo. No pudo más y se vistió para ir al departamento de su novio, quería verlo, sentirlo, abrazarlo, que le de mimos. Ya listo se dirigia rumbo al edificio dónde vivia el rubio, subió unas escaleras hasta llegar departamento.

Trato de llamarlo para decirle que estaba en camino para verlo pero su celular estaba apagado, se quedó algo confundido pero era mejor, le daria una sorpresa a su amado novio yendolo a ver.

Sacó un juego de llaves de su bolsillo con un llavero de una foto de él y Takemichi, los dos tenian las llaves del otro que aveces se quedaban a dormir; al entrar Manjiro vio todo oscuro, levantó la ceja algo fueea de lo común, pensaba que Takemichi no se encontraba. Iba a dar un paso hacia adelante cuándo del piso miro algo alado de su pie. Era una camisa, se agachó y la levantó, se percató que no era de Takemichi; pues era un poco más grande que las de él.

Se escuchaban leves ruidos de algo, a estar oscuras no sabía que podía ser, con aún la camisa en manos se dirigia a la habitación perteneciente a Takemichi.

"L̷a̷ c̷u̷r̷i̷o̷s̷i̷d̷a̷d̷ m̷a̷t̷ó̷ a̷l̷ G̷a̷t̷o̷".

La puerta estaba entreabierta, al divisar de que se trataba podia sentir cómo su corazón se quebraba en mil pedazos; Takemichi, su Takemichi. Estaba en la cama teniendo sexo con alguien más, no entendia nada, solo escuchaba los gemidos y jadeos del Rubio mientras que su amante estaba encima suyo mientras lo tocaba.

Manjiro sentia varias emociones; Tristeza, enojo, asco, decepción. Le hervia la sangre ver a su novio con otro, con otro cogiendo en la misma cama que lo habian echo muchas veces, no lo entendia, ¿Porqué?

Poco a poco se iba separando de la puerta para dirigirse a la salida para irse, pero derepente su cuerpo paró, como si entrará en un tipo de transe; Manjiro posó su mirada en la cocina, viendo en una manera los diferentes cuchillos que el rubio usaba para cocinar. Manjiro los veia, y con pasos lentos se dirigia a ellos, tomó uno en su mano y lo veia antes que posara su mirada en la puerta de la habitación del rubio.

"Te amo tanto que mataría por ti..."

Manjiro se encontraba durmiendo en la cama a lado del rubio, solo habia un detalle con eso, la cama llena de sangre,sus ropas acompañadas de ese color rojo vivo manchando las blancas sábanas de la cama, pero lo más principal. Dos cadáveres en esa habitación sin vida. Manjiro se sentó en la cama y alado tenia a Takemichi llenó de sangre.

—Buenos días, mi amor— Acarició la mejilla a su 'novio', pero la verdad es que Takemichi estaba muerto, juntó a su amante solo que a diferencia esta se encontraba en el suelo poca abajo y con diferentes heridas en su cuerpo de apuñaladas.

Después de todo era lo que Manjiro quería, desahogo su tristeza y Rabia en ellos por la infidelidad de su novio, era conciencia de lo había hecho pero no por eso tendría que ponerse mal; después de todo lo terminó traicionando con ese chico.

—Perdón que te manchaste mucho, espero y me perdones—Expresó el rubio mientras cubria la desnudez del menor besando su frente pálida, solo sonrió viendo el cadáver sin vida del chico.

Manjiro se levantó para limpiar la sangre de su cuerpo, no antes de patear el cadáver del chico para que se quitará de su camino, si no lo pudo quitar del camino cuándo antes lo habia echo ahora.

"L̷a̷ s̷a̷n̷g̷r̷e̷ s̷i̷g̷u̷e̷ a̷h̷i̷ c̷u̷a̷n̷d̷o̷ s̷e̷ l̷a̷v̷a̷n̷ l̷a̷s̷ s̷á̷b̷s̷n̷a̷s̷"

||օղҽ-sհօɾԵs ოíԵαkҽ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora