Sin sentimientos (+18)

Capítulo Final.

—Estás aquí por respuestas y son las que te voy a dar. — Su voz rasposa me eriza la piel.

Ruel toma asiento y yo me coloco en el único sitio disponible.

—Papá... — Sentencia Rowan en un hilo.

—Ya no tengo que perder y Rainer no merece la felicidad que tiene.

Por el odio con el que habla es como si tuviera envidia o rencor hacia su hijo o quien solía ser su hijo. Su rostro no muestra un rato de felicidad, por el contrario, luce dispuesto a arrastrar todo a su paso.

—Que difícil es ser yo el que les diga esto. — Se dirige a sus hijos y hace un gesto bastante molesto. — Cuando nació Ruel yo mantenía una relación con una mujer de mi pasado, no daré explicaciones de su nombre pues con decirles que es el amor de mi vida se podrán imaginar...

«Ella, como la estúpida que era, no se cuido y terminó embarazada; instantaneamente eso era algo que no podía permitir, así que luché para deshacerme de esa cosa. Verónica se enteró y como es una imbécil, aceptó hacerse cargo del feto aún estando al otro lado del mundo y sin poder ver a su hijo...

Ruel está al borde del colapso, su rostro está completamente rojo y no lo culpo, yo me sintiera aún peor. Está insultando a su madre y además, dejando en claro que nunca fue bien recibido por ella.

—Mientras Ruel crecía sin su madre, Verónica estaba en una playa al otro lado del mundo disfrutando de su libertad.— Espeta sin darle tantas vueltas, quiere hacernos daño y es lo que está logrando.

—¡Richard! — Chilla Verónica en un intento fallido de no dejarlo proseguir, luce desestabilizada y afectada.

Debí saberlo, alguien tan buena no podría estar con un monstruo a menos que estuvieran hechos de la misma maña, Rainer me lo advirtió en repetidas ocasiones; sin embargo, nuevamente mi idea de que todos podemos ser diferentes y cambiar, me llevó a mi desacierto.

¿Cómo pude no creerle y ver las señales? Él conoce a su familia, ha vivido con ella y lo han tratado como la mierda. Yo solo soy una intrusa creyendo que conociendo mejor las personas puedes llegar a saber quienes son.

Error de novata.

—Dejemos de ser hipócritas. — Sonríe, está disfrutando hacer sufrir a las pocas personas que aún lo apreciaban. — Yo viajé para el nacimiento de Rina...

Mierda.

Mierda.

Mierda.

—Desgraciadamente su madre no sobrevivió, prometo que no tuve nada que ver. — ríe con un claro tono de cinismo. — Verónica y yo regresamos a casa y bueno, creo que lo demás es historia, eso y que Ruel no es mi hijo, no lleva la sangre de los Greenwood.

—¡¿Qué?! — se levanta él de un salto, puedo verlo, está destrozado.

—Verónica es tu madre, pero tú no eres de mi sangre.

El silencio se roba el espectáculo. Los hermanos no pueden decir nada al respecto, lucen idos y tensos.

—¿Quién es mi padre? —las lágrimas se resbalan por las mejillas de Ruel y quién solía ser su padre no puede estar más feliz.

—Maté a tu padre y no me avergüenza decirlo, ese imbécil se burló de mí en mi frente...

Es todo lo que mi chico puede soportar, pues se lanza en contra de quien un día creyó que era su ejemplo a seguir.

No puedo imaginarme todo el tiempo que ese hombre le llevó planear toda está estrategia y tampoco puedo creer que no le importe ni su familia, después de todo, es su sangre.