La Reina De Vuelta (The Lost Stone 1)

9 - El encuentro

Mini maratón 2/2

Estamos en el lugar en donde hace ese tipo de cosas. Por todo lo que me dijeron creí que sería una cueva tenebrosa y que ella sería una bruja horrenda. Pero claramente eran solo rumores. Ella es realmente hermosa y este lugar igual.

Después de que me haya asustado me guió a un lugar lleno de plantas y justo había un arcoiris.

—¿Qué hacemos acá?

—Acá traigo a las personas que piden mi ayuda. Este lugar trae una buena energía y puedo concentrarme más, además estamos al aire libre, ¿qué mejor que eso?

Su voz es demasiado tranquila y relajante, no noto ningún acento cerca. Asiento porque tiene razón. Nunca creí que para hacer estas cosas el ambiente tenía influencia, pero es cierto.

Estoy detrás de ella cuando noto que mira hacia los lados, hasta que pone su vista en un punto y se dirige hacia allá. La sigo. Se sienta con las piernas cruzadas y hago lo mismo.

Cuando estamos sentadas la una frente a la otra me doy cuenta de que no trajo nada. Estamos solo nosotras y el lugar.

—¿No…?—hago una pausa para raspar la garganta —¿No necesitas algo para hacer esto?

—¿Qué más necesitaré, más que mi cuerpo y alma, cerebro y corazón? —dice en voz baja con los ojos cerrados. Realmente podría escuchar su voz por horas.

Asiento aunque ella no lo ve.

Abre los ojos y me mira fijamente, aparto la mirada nerviosa.

—Dime, ¿Qué te trajo hacia mí?

—Antes, ¿Puedo hacer una pregunta?

Asiente.

—¿Sabrías que vendría, o por qué dijiste que me esperabas?

—Recuerda que puedo sentir cosas que otros no.

Asiento.

—Bien, vine aquí porque… no sé qué pasará en el futuro, y necesito saberlo. Estoy enamorándome de alguien de quién no debería. Pero hay alguien esperando por mí.

Bajo la cabeza, tengo un nudo doloroso en la garganta, y no puedo aguantarlo.

—Entiendo. Sientes desesperación y no puedes tomar una decisión. Dame tu mano.

Coge mi mano derecha con sus dos manos y las mira fijamente.

—Necesito que cierres los ojos y escuches a tu alma, ¿Qué te dice?

Intentó hacerlo y cierro los ojos, ¿Qué quiero? Quiero ser feliz. Es todo. No puedo saber nada más. Intentó pero no puedo, no escucho nada, estoy apunto de llorar cuando me doy cuenta de que tengo los ojos apretados y el ceño fruncido.

—Esto no es para presionarte, está bien si aún no sientes nada. Inténtalo de nuevo.

Sigo intentando pero no puedo.

—No puedo.

—Está bien, solo piensa en qué te trajo aquí, ¿Cuál es el problema y por qué no puedes solucionarlo?

Pienso, pienso hasta que lo logro.

Abro los ojos cuando escucho un gesto de sorpresa venir de ella. Cuando la veo tiene la boca entreabierta y los ojos muy abiertos. Está mirándome fijamente.

—Tú…

La miro, preocupada, ¿Lo vio todo?

Suspira mirando hacia abajo.