3 - Reunión.

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SELENE

Estoy a punto de irme a dormir cuando llaman a la puerta, me volteo y me dirijo hacia la puerta. En cuanto la abro está un chico alto, de pelo castaño y ojos grandes, se ve muy joven.

—Disculpe, su majestad —hace una reverencia —, el rey me ordenó que la llamara, quiere verla.

Entrecierro los ojos hacia él.

—¿Y ahora este qué quiere? —miro hacia abajo y vuelvo a subirla al recordar el niño que está frente a mí —¿Quién eres?

—Soy el asistente personal del rey.

—Ya veo, ¿No eres demasiado joven para eso?

—Soy capaz para este trabajo, y el rey confía en mí.

—Claro.

—Sígame, por favor.

Lo sigo y me guía escaleras abajo, llegamos a un lugar donde hay una enorme puerta, el chico toca y sin abrir Haldor habla.

—Que solo pase la reina.

Miro al chico y asiente para mí antes de marcharse.

Entro silenciosamente y cierro la puerta detrás de mí. Tiene las luces apagadas pero puedo verlo por la luz de la luna que entra por la ventana. Haldor está con una camisa de botones blanca y un pantalón negro, algunos botones están desabotonados lo cual hace que se le vea el pecho, tiene las piernas encima de su escritorio, un lápiz en sus manos y el cabello despeinado.

—¿Me necesitaba?

—¿Estás enojada? —voltea a verme.

—No tengo por qué.

—Ya. Entonces, ¿Por qué me tratas de usted?

Alzo las cejas.

—¿Mm, lo hice?

Me mira con ojos afilados.

—Quiero dormir, ¿Puedes decirme por qué me querías?

—Quería pasar tiempo con mi esposa, ¿No puedo?

—Podemos pasar tiempo en el día.

—Mañana tenemos una reunión.

—¿Ah, sí?

Asiente.

—¿Con quién?

—Con un embajador de marca. Quiere conocerte.

Frunzo el ceño.

—¿Para qué?

—Mm, bueno, es una sorpresa de mi parte.

—Ah.

Se para y deja el lápiz en su escritorio. Abro los ojos cuando veo que viene directo a mí. Cuando se para frente a mí me empuja y quedó contra la pared, y sus manos sosteniendo mi rostro.

—Luces bien hoy.

Su respiración me golpea en los labios.

—¿Ya no estás enojado?

—Nunca lo estuve.

—¿Ah, no?

—Es una simple piedra, mi amor.

—Es una poderosa piedra. La más importante.

—La única cosa importante para mí eres tú.

—Yo... lo siento.

Frunce el ceño.

—¿Por qué?

—Porque tú... trabajaste por años para traerme de vuelta y yo ni siquiera puedo recordar... ya sabes.

La Reina De Vuelta (The Lost Stone 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora