Aviso que este capítulo es boypussy, si no les gusta pueden pasarse por los anteriores que no lo son. :)
Cada vez que se giraba a ver a su pareja veía su cara roja del sol y su mano ocupada tomando de una jarra que si no era fernet era vino con pomelo y, sino otro alcohol que le ofrecieran. Decidió ignorarlo, dejar que disfrute los gritos y el aliento de la gente ya que el sabe que costó mucho hacerlos cambiar de opinión. Fue un esfuerzo mayor demostrar que a pesar de no tener experiencia él iba a llevar a lo más alto a la selección y, con mucho trabajo, así lo hizo.
Pero si algo sabía era que su novio era por demás toquetón, le gustaba el contacto físico y, borracho eso se multiplicaba por mil. El tema era que si eso ocurría con el, su pareja y acompañante de vida, no había problema, sin embargo, Lionel Scaloni estaba subido a la parte más alta del micro, cuyo lugar había sido anteriormente reprochado por el de rulos debido al peligro que implica estar en esa parte alta para la celebración agitada de los campeones del mundo, le molestaba lo mucho que lo veía riéndose de un lado con Rodrigo de Paul abrazado a él pasando la mano por su cuello y agarrando el muslo de su derecha que pertenecía ni más ni menos que a Leandro Paredes.
Tomo aire y exhaló. Agarró la jarra de fernet que le ofrecieron y lo pasó como si de agua se tratase. Volvió a verlo, Lionel se paró a alentar sostenido de sus dos jugadores de abajo y casi se cae.
Pablo se acercó completamente harto.
— Bajate de ahí, Lionel, ya estas grande para la boludez —
— Qué bolude' Pablo, somos campeones — exclamó cada vez más rojo por el sol y también por el alcohol. Podía estar lo más en pedo que pudiese pero la cara de orto que su novio le dedicó le bajaba todo el efecto de una patada.
Pablo bajó las escaleras del micro y en seguida Lionel fue tras él. Las miradas entre los jugadores de la selección eran las típicas de cuando se dan cuenta que uno la cagó.
Al bajar vio a su pareja tomar de una botella de agua.
— ¿No me puedo divertir ahora? ¿Así de amargado sos payasito? —
Aimar no dudó un segundo y agitó la botella de agua en su cara empapándole el rostro. Automáticamente Scaloni intentó escurrir su cara con sus manos.
— ¿Te parece divertido toquetear a todos los pendejos que se te ponen enfrente? — por fin escupió su molestia.
— N-no, mi amor, no me dí cuenta — ponía su tono de varón arrepentido intentando agarrar a Pablo de la cintura pero este se resistía gritando fuera de sí.
— ¿Te querés coger a un pendejito que te calienta la chota en el momento?, Anda, hacelo —
— ¿Cómo voy a querer eso Pablo? ¿Vos te estas escuchando? Yo te quiero sólo a vos y lo sabes —
En la mente del de rulos sólo pudo destacar un pensamiento, bastante impulsivo mas era uno de los más cuerdos del momento "lo voy a cabalgar hasta que se quede seco y ahí va a ver que soy el único".
— Anda al fondo — dijo serio.
— ¿Qué? —
— Que vayas y te sientes al fondo — ordenó cerrando la puerta que separaba la cabina del conductor y el interior del micro.
Lionel se dirigió al fondo tambaleando y maquinando lo mucho que la había cagado.
Pablo lo siguió atrás preparado para su performance. Cuando el santafesino se sentó con sus enormes piernas abiertas y lo miró a los ojos preocupado, el cordobés se agachó a la altura de sus rodillas y deslizó sus manos por sus muslos hasta llegar al elástico del short de AFA.
La expresión y temperatura del cuerpo del DT se alteró por completo, su puchero cambió a una boca semiabierta mirando expectante al hombre entre sus piernas.
