Until I found Her... | Daerin

Capitulo 22

Danielle pov:

Se había ido así sin más, no alcancé a desearle un "buenas noches, descansa". Nuestro momento había sido demasiado efímero a mi parecer ¿cuál era el punto de coincidir si duraría tan poco? ¿Debí decir algo más? ¿Debí explicarle lo mucho que lo sentía? No tenía las fuerzas suficientes para enfrentarme a ella y que se dispusiera a escucharme, de seguro para ella ninguna explicación sería lo suficiente para borrar el daño que hice. Soy consciente de ello, pero al menos quería remediarlo, quería estar a su lado y mi motivo principal era protegerla, aún así si mi vida se viera perjudicada, moriría por Kang Haerin.

Me acerqué al closet, debía descansar al menos esta noche. Pero el pensar que Haerin se encontraba a unos pasos de mí ponían mis pelos de punta, su perfume se sentía por cada habitación y lugar de la casa, ella estaba en todas partes. Quité mi ropa dirigiéndome al baño, una vez dentro dejé correr el agua de la ducha, sabía que aquello me ayudaría a relajarme un poco más para lograr dormir. Comprobé que el agua estuviese lo suficientemente caliente para entrar sintiendo al instante mi cuerpo y músculos relajarse, necesitaba esto después de todo lo de hoy. Por un instante creí que las cosas serían más simples, estaba acostumbrada a ello, sin embargo me doy cuenta que no todo es cómo me gustaría que fuese, no soy la dueña de la vida de los demás y claramente no actúan de acuerdo a mi criterio. Honestamente Haerin tiene razones suficientes para odiarme, en especial cuándo sepa esta verdad que de seguro le lastimará mucho.

Solté un breve sollozo, me percaté que por la ventana del baño podía observar el perfecto cielo azul iluminado por una preciosa y redonda luna acompañada de una infinidad de estrellas, los enamorados de seguro estaban fascinados ante semejante arte. Me gustaba pensar que la luna de vez en cuándo escuchaba los lamentos de quiénes amamos con todo nuestro ser y es qué el amor es un sentimiento que envuelve un sin fin de componentes y reacciones ya sean químicas o no en nuestro cuerpo, algunos cambian radicalmente ante su presencia y otros cómo yo hacen lo posible por darle el mundo a su amada.

-¿Será que puedes escuchar mi lamento?- abrí un poco más la ventana admirando su radiante iluminación. -¿Qué se supone que debo hacer? Suponiendo qué esto esté destinado a conectarnos, ¿crees que ella sea capaz de separar las cosas, es decir, los crímenes de tanto mi padre cómo el suyo y estar conmigo?  Necesito que me des respuestas, no puedo con tanta incertidumbre y para ser sincera no tengo ni la menor idea de lo que estoy haciendo, sólo estoy siguiendo a mi corazón. Estoy dejando que me guíe hacía dónde se supone deba estar mi destino y mírame, terminé aquí a unos metros de quién estoy profundamente enamorada, pero me rechaza... me lo merezco de todas formas.-reí sintiendo lastima de mi misma- A quién engaño, tú no escuchas a nadie. Es inútil hablarte.

Haerin Pov:

-¿Por qué debió llegar aquí? De tantos países, de tantas casas, justo tuvo que mudarse aquí. -daba vueltas en la habitación, los grandes ventanales traseros me daban la oportunidad y tranquilidad de abrir las cortinas sin ser vista y contemplar a la luna en todo su esplendor. -Debo centrarme en lo que en verdad importa. No me gusta ni estoy enamorada de Danielle Marsh, es sólo un viejo amor. Tal vez un cruel amor de verano o de adolescencia, lo que importa ahora es mi carrera, lograr mis objetivos, desarrollarme de una manera impecable como idol. Hay un millón de chicas cómo ella, nada la hace especial ¿verdad? -me senté frente al ventanal abrazando mis piernas-Tal vez mis canciones nunca debieron tratar de un corazón roto... esperaba algo más de ella ¿sabes?-me rendí y bajé mi guardia por un momento-Me asusta que mis pensamientos sean basados en ella, es algo inconsciente, no puedo controlarlo por más que quiera. Necesito reprimir esto que estoy sintiendo por ella otra vez, no puedo enamorarme de Danielle , pero no sé cómo hacerlo-tomé mi cuaderno de canciones escribiendo versos al azar que venían a mi mente.-Lamentablemente lo nuestro no es posible ni real, iba a desplomarse en algún momento y lamento tanto quererla de esta forma. Me siento idiota porqué estoy segura que ella no siente ni una sola pizca de remordimiento o arrepentimiento ante sus acciones. -seguía escribiendo, algunas veces borraba de forma efusiva y otras simplemente arrojaba las hojas hecha una bola por la habitación. Las horas habían pasado bastante rápido para mí, no me había dado cuenta del hermoso amanecer que se estaba avecinando, los colores del cielo eran simplemente hermosos, una mezcla de tanta belleza en una sola imagen. Abrí el ventanal dándome la oportunidad de asomarme al balcón, la mañana estaba algo fría pero no importaba, aquello me brindaba sensaciones únicas. Paz era todo lo que necesitaba en mi vida y en momentos cómo estos, por muy pequeños que sean me mantenían cuerda. Mi salud mental no era la mejor, mucho menos después de los acontecimientos en mi antigua casa, la vida era difícil a estas alturas y eso que aún era bastante joven.