Call me maybe. (Harry Styles)

Capitulo 18 ¡Cuidado!

Harry

-Bec, voy a dejarte con Lou -me mira desconcertada -Nuestra estilista, la mia y la de los chicos -aclaro.

-Ah, vale -dice segura - Pero, ¿por qué?

-Porque en casa pueden haber paparazzis. Quiero comprobar que todo esta bien y luego vendras conmigo -le sonrio.

-¿Me vas a contar lo que sucede? -me dice seria y yo respiro hondo.

-Bec, ya te lo diré. No te impacientes. ¿Si? -pongo carita de perro abandonado y ella sonríe y me da un tierno beso y yo acaricio su suave mejilla.

-Te quiero -me dice ella.

-Yo te quiero más -sonrío -Bien, vamos.

Bajamos del helicoptero y nos dirigimos hacia el ascensor agarrados de la mano con mi guardaespaldas detrás. No es que siempre ande con él pero se están preocupando demasiado por mi seguridad. Al llegar abajo mi coche nos espera y me subo a el, mi audi R8 Negro. El guardaespaldas se va. Me acerco a la puerta de copiloto y le abro la puerta a Bec.

-Pase, señorita -digo sonriente y ella se queda embobada.

-Menudo cochazo -dice mientras entra. Por cierto, gracias -sonrie.

-De nada -le devuelvo la sonrisa -Y sí, es uno de los mejores coches -digo con arrogancia y ella me blanquea los ojos y yo me río por su exprecion.

-Bien, explica me bien lo que harás conmigo -me mira seria y me dice en cuanto subo al cohe -Puedo irme a casa y así te facilito las cosas -¿Qué?

-Yo no te estoy pidiendo que te vayas -la miro serio.

-Pero te soy un problema -dice con angustia.

-No eres un problema. El problema es de ellos que no me dejan estar contigo y no hay razon alguna para que yo no pueda estar contigo y no tienen porque decirme con quien salir o no -digo alterado y ella me mira sorprendida.

-Así que es eso -me dice. Bien, ya le acabo de decir lo que pasa.

-Sí, es eso -arranco el coche y me dirijo a casa de Lou - ¿Puedes poner el manos libres y buscar el numero de Lou? Pone su nombre -Bec asiente con la cabeza y se pone en ello. Empieza a sonar el telefono y pronto Lou me contesta.

-Harry, ¿estas bien? -me dice mi estilista y gran amiga.

-Si, todo bien. Necesito que por favor me hagas un favor -digo casi rogando.

-Bien, dime qué puedo hacer -me conesta ella.

-¿Puedo llevar a mi novia a tu casa? Es que quiero comprobar que en la mia no hay parazzis y esas cosas -digo olvidandome que Lou no sabe de la existencia de Bec y pega un grito.

-¡Qué fuerte! ¿Tienes novia? ¿Cómo se llama? ¿De dónde es? ¿Es rubia o morena? -me ataca con miles de preguntas y Bec no evita reirse. -Espera, esa risa es de una mujer. ¿Estás ahora mismo con ella? -dice sorprendida.

-Sí -contesto ahogando mi risa,

-Hola, Lou. Soy Bec -dice mi novia alegre.

-Hola Bec -contesta mi amiga. -Encantada -se rie. -Bien, os espero en casa.

-Vale, y gracias. Adiós -cuelga y de inmediato Bec se pone a reír. Se ve hermosa. Su risa es preciosa.

-Pobre, Lou -dice y se calma. -Bien, ¿estaré mucho tiempo con ella? -me pregunta,

-No sé. Tengo que ir a hablar con los jefes -me encojo de hombros. -Pero en la noche ya estarás conmigo -le miro un segundo para sonreirle y dirijo mi mirada nuevamente a la carretera.