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Pov leah
Días después

yo sonrío mientras veía todas las fotos que habían subido mis amigos, familia en la fiesta de ayer por la inauguración de mi primer álbum, Enchanted

todo estaba siendo de maravilla que hasta parecía un sueño hecho realidad, estaba en el puesto número uno en muchos de los países y las mayorías de mis canciones utilizaban casi todo el top 10

recibía felicitaciones y halagos en cada mensaje por mis redes sociales, mentiría si digo que no esperaba el suyo, que no llego ¿lo habrá escuchado por lo menos?

no pienses en el leah, me repito una y otra vez antes de tomar mi maleta y bajar por las escaleras de la casa

—avisa mujer —me dice Darío acercándose a mi para ayudar a bajar mi maleta que estaba bastante pesada, para que mentir

Me saluda con un beso en la cabeza y yo le sonrío en respuesta

la casa estaba repleta de mis sobrinos y mis hermanos, ya debíamos de ir hacia donde estaban nuestros aviones privados para ir hacia Sevilla, la casa de los padres de gavi y luego conducir hasta la playa donde estaba la casa

—me mola tu oufit tía leah, es hermoso! muy Pinky —me dice mi sobrina al ver mi atuendo yo rio ante su comentario

Era una mini yo, andaba vestida princesa siempre y con los labios pintados de un color rojo fuerte apesar de tener 7 años. Llevaba puesto unos pantalones cargo de color negro junto con un top de color rosado en v que dejaba al descubierto mi espalda, uno que otro accesorio dorado y mis zapatillas Nike de color blanco que combinaban con la pinzas que tenia en el cabello sujeta en un rodete extraño pero cómodo para ir de viaje

ya empezaba el otoño, pero no hacía frío hoy, incluso había un poco de sol y eso me gustaba así que aproveché para no abrigarme tanto

—leah echaste tus pastillas? —me pregunta mi padre y yo asiento

seguía tomando las pastillas para la arritmia, pero ahora tenía que sumarle la pastilla para mi ansiedad, que siendo sincera a veces se me olvidaba tomar

emprendimos el viaje hacia donde guardábamos nuestros aviones para emprender el viaje hacia Sevilla

no me sentía ni un poquito de lista para verlo, para nada de hecho, pero debía hacerlo

tanta mala suerte tengo para que nos toque justo el mismo avión que utilizamos para viajar a Italia, genial, muchos recuerdos se me pasan por la cabeza y no me hace para nada bien

—estas bien hermana? —me pregunto leo, mi hermano menor colocando su pequeña mano en la mía al ver que comenzaba a temblar

yo asiento para que se tranquilice antes de tomar de mi bolso las pastillas para la ansiedad y tomármela de una

durante todo el viaje, me fui leyendo o durmiendo, no era tanto el transcurso del viaje, solo era una hora y media qué pasó volando

al llegar al aeropuerto, nos montamos en los autos que habíamos arrendado por estos días y conducimos hasta la casa de los Gavira

Aurora me saluda emocionada y yo la recibo de la misma manera, agradecía que no me miraran con pena, aunque de vez en cuando lo notaba. No se hablaba del tema, o al menos no cuando yo estaba presente, nunca se nombró y espero que nunca se haga

no quería revivir todo lo que sufrí al perder a mi bebe, más que el hecho de enterarme, el dolor que se siente cuando te hacen la limpieza para sacar el feto, primero me dieron una pastilla, tenía dos semanas para ver si lo botaba solo, pero yo no lo hice y eso significaba que me lo debían de sacar, lo hicieron y fue lo más doloroso que he pasado, que usaban unos instrumentos extraños y todo era sin anestesia

recordar mis gritos ese día hace que se me erice la piel

—como estáis? preparados para el viaje? —nos pregunta pablo, el padre de Gavi con una sonrisa mientras saludaba a cada uno

no lo veía a él por ningún lado cosa que me hizo suspirar por un momento pero al verlo salir de la casa con su pelo castaño despeinado y ese ceño tan característico de el me quedo helada, su mirada se dirige a mi y no logro distinguir lo que me transmite con ella

nuestro mini momento se ve interrumpido cuando veo como sale Ana detrás de él

si creía que mi corazón no se podía romper más aún, estaba equivocada, muy equivocada

verla con su barriga tan redonda, tan formada hace que me rompa más aún y lo único que hago es adentrarme en el auto

sentía que no podía respirar y que me asfixiaba, mis manos y mi labio temblaba y no podía controlar las lágrimas

no sé en qué momento la puerta del auto se abrió y Aurora se acerco a mi para envolverme en sus brazos

—tranquila respira vale? —me dice quitando mis peles rebeldes de mi cara y yo asiento antes de intentarlo

cuando me consigo calmar, ella habla

—lo siento, nadie sabía, llego hace una semana y no se ha mod ido de acá, pero tranquila que no irá con nosotros, se va a su casa

—c-cuanto tiene? —le preguntó limpiando las lágrimas

No lloraba desde aquella noche que espere a gavi afuera de su departamento, sabía que esto iba a pasar al verlo

—8 meses —susurra apenada y yo me rompo a llorar otra vez

Sabía que fue mucho antes de lo nuestro pero me dolía, me ardía porque ahora ella iba a cumplir todo lo que yo quise e iba a tener de no ser por todo lo qué pasó

yo iba a ser la madre su hijo, yo iba a a ser con la que compartiría su día a día, yo iba a ser la que iba a llegar vestida de blanco a su lado, conmigo iba a tener una casa, un hogar y una familia

pero todo eso era en tiempo pasado, ahora ella estaba en mi lugar, o talvez siempre lo estuvo

—me duele mucho—le digo entre sollozos y ella me acaricia sin soltarme— yo no soy rencorosa, le podría llegar a perdonar el no cumplir sus promesas, le perdonaría el hecho de no hacer nada para no perderme, le perdonaría el no haber estado ahí para mi cuando lo necesitaba más que a nadie, le perdonaría cada una de esas cosas, pero esto? joder como duele

—eres mucho para este mundo cariño —me dice abrazándome y yo me separo limpiando mis lágrimas

Ya no quería llorar más, no podía por más que quisiera hacerlo. Cada cosa que le dije a aurora, era verdad, yo podría llegar a perdonarle todo, pero que haya vuelto con ella? Joder como dolía, el sabe todo lo que sufrí luego del accidente con el piano, todos los meses que estuve sin tocar lo más preciado para mi solo por ella, es ahora cuando todo me hace click

todas las palabras que me dijo ese día, de que le había arruinado la vida y que no sabía que hacer, que ahora se quedarían solos los dos, ella hablaba de su bebé, estaba embarazada y se quedó callada todo este tiempo

—ya debes ir al auto —le digo con una sonrisa a medias mientras veía como ya estaban ingresando cada uno a su auto, mis papás ya venían hacia acá

—me escribes por mensaje cualquier cosa, vale? —yo asiento y ella deja un beso en mi cabeza antes de irse

me hago la dormida para que ni mis padres y Diego me hagan preguntas, no quería escuchar a nadie

eclipse -Pablo gavi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora