Steven X Spinel "Un Futuro Negro"

Capitulo 45: quedate en la luz

Dentro del cuarto pequeño y escaso en cualquier detalle que aparente avaricia, spinel convive de maneras en las que su corazón le permite solo donde considera su propio hogar lleno de confianza y amor. El tiempo y las vivencias ocurridas se encargaron de hacerla sentir de esa manera a lo largo de las semanas. Con la monotonia de sus dias junto a las ocasiones especiales, dicho cuarto estaba lleno de amor. 

— Si giras este aqui, el hilo entra y le das vuelta para que cubra un poco — mencionó la pelo rosa en un tono tranquilo — así poco a poco vas cubriendo los hoyos en la ropa

Pero su mayor logro y muestra de avance estaba en esa plática, amena y serena, justo como dos seres que desde nacimiento estuvieron juntos y la vida los convirtio en compañeros eternos. Su relación con la niña se volvió su mas grande pilar que ponia sus pies en la tierra, volviendo más digeribles para ambas los problemas que trajo su acercamiento.

— ¿ahora si me diras como te hiciste este hoyo? — cuestionó sin molestia en sus palabras si no, una curiosidad casi invisible 

— hmnnn...

— sabes... puede que mi cumpleaños está cerca, ese podría ser mi regalo — dijo la mayor tomándola de sorpresa — decirme la verdad

Era curioso que los detalles monotonos entre ellas, resaltaban como la mayor rareza de la vida. Spinel no es exactamente amante de celebrar sus cumpleaños, implicando las muy pocas personas que realmente sabian su fecha de celebracion. Con lucy, solo pedia tener un dia mas, acompañada de esa dulce monotonia que spinel amaba llevar a su lado. 

— es cierto... ¿Qué quieres? — cuestiono con una curiosa seriedad

— ¿Qué crees que me gustaría? — respondió con otra pregunta — ahi estara tu respuesta

En esa tranquilidad incluso los momentos duros se encontraban. A pesar de siempre tener ese deseo por el bien y desarrollo con su compañera de cuarto, ahora entendía también que su forma de llevarlas las cosas no era la mejor. En la guerra uno debía ser fuerte para sobrevivir, atacar cualquier peligro, ahora sus defensas estaban bajas, comprendió que en realidad, su agresividad no la llevaría a nada aqui en la tierra. En el diálogo había encontrado una mejor solución a sus problemas humanos.

A pesar de lo ocurrido hace tiempo, Lucy en ocasiones seguía escapando en las noches aunque las secuelas psicológicas del evento seguían en ella, por eso mismo aun buscaba una cura rápida con quienes alguna vez consideró sus unicos amigos. Noches en las que su búsqueda por paz no le permitía dormir a spinel, sin embargo, prefería fingir estar dormida ante sus llegadas. Ahora temía aceptar, que ama mucho más de lo que es amada.

— sabes que no le diré a nadie — aclaró la pelo rosa con tranquilidad — por eso estoy cosiendo esto

— está bien...

En su tranquilidad, la menor encontró un refugio en donde guardar sus penas, confesar las acciones de las que por alguna razón, empezaba a avergonzarse. Pues aun buscaba algo fuera, lugares con la adrenalina que la hagan sentir viva, y la familia que la haga sentir amada. Spinel buscaba soluciones, pero el crear un plan de guerra no era exactamente lo mismo, su cabeza estaba vacía.

Incluso en las siguientes noches donde su mente seguía despierta y sola en la habitación, en busca de algo, una salida para la niña que la abandonaba en las noches, y aun así se aferraba tanto. Llegó un punto en el que al despertar después de una siesta decadente, su cuerpo sufrió las consecuencias, pues durante el día no mostraba las mismas energías de siempre. No tenía los ánimos para platicar con nadie ni las fuerzas para jugar con los niños.

Llegó la noche y estaba decidida a quedarse dormida, incluso si su compañera de nuevo la dejaba para buscar alguna aventura. Se acostó en el suelo esperando el rechinar de la ventana, pero nunca llegó, en cambio, sintió un calor en su cuerpo al sentir el un bulto acostarse a su lado. Lucy en su preocupación decidió quedarse con ella esa noche, y al fin spinel pudo descansar, como nunca antes.