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446 Palabras

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Pov. Ace

Diría que hace mucho tiempo pensé que no me enamoraría de nadie, pero me es molesto recordar cuando me enamoré del comandante de Barbablanca; justamente de el de la primera división.

Marco el Fénix, la primera vez que le ví fue en un cartel de recompensa; recuerdo bien que me burle del tipo por su cara de amargado y su extraño peinado, aunque por algún motivo guarde su cartel en mi mochila por mucho tiempo. Hasta que una nueva recompensa cayó sobre mi, nuevamente de Marco el Fénix.

Llamas rodeaban su cuerpo y su rostro con un semblante tranquilo y somnoliento, tan misterioso que llamó por completo mi atención, deseé verle y la próxima vez que sea en persona.

No fue hasta que estube peleando con Jimbei en un territorio de Edward Newgate, Shirohige; que finalmente mi deseo se hizo realidad.... Mirándole de frente pude notar una extraña vibra que me brindaba el hombre. Su mirada cansada que me analizaba de pies a cabeza sin pudor, su torso marcado al descubierto, mostrando la marca de su tripulación; su melena rubia con aquella forma tan característica .

No hay duda de ello, este hombre realmente es mi tipo.

Me secuestraron y mantuvieron en su navío, antes de poder acercarme al tipo, él comenzó a entablar conversaciones conmigo sin juzgar mi sangre maldita por Roger. Me sonreía con dulzura estrujando mi corazón con fuerza por su inmensa amabilidad, sin si quiera preguntar entró a mi vida por solo un estúpido abrazo.

Lo recuerdo, observé como el comandante había estado en malos términos con el viejo como si de niños se tratasen; parecía fastidiado y a la vez miraba una mueca triste en sus labios cuando intentaba sonreír frente a Pops, sentí mi corazón hacerse pequeño ante aquellos actuares de Marco.

Entré una noche a su camarote sin tocar, me regañó por eso pero me permitió permanecer dentro, no recuerdo que escusa absurda le dí pero terminé por tomarlo en brazos sintiendo su cuerpo tensarse ante el repentino acto.

Le susurré " No te preocupes Marco, nuestro padre suele ser como un niño cuando se trata de beber, no escuches lo que dice cuando se enoja; sabes que el viejo te quiere" Marco no me respondió, solo correspondió a mi abrazo con un pequeño temblor en su cuerpo.

Lágrimas salían de sus ojos, escuché su leve llanto siendo ahogado por mi camisa, que llevaba puesta en ese entonces, permanecí en silencio escuchando sus pensamientos; preocupaciones, dolores y sus miedos.

Esa noche, fue la primera que pasé con Marco; tan cálido es sentir sus brazos rodeando mi cuerpo al ses unidos por un fuerte abrazo.

Que lindo recuerdo~

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Torpe en el Amor~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora