Estaba a punto de contestarme cuando se escuchó que alguien venía hacia nosotros, quizá era algún ama de llaves o encargado de la seguridad, debido a esto tomó mi brazo y me jaló hacia adentro.
—Tú ganas esta vez. Y bien, ¿A qué se debe el honor? —Decía mientras se ataba una banda al brazo; ahora que lo analizo siempre la trae puesta, incluso al salir de la ducha.
—Mi amiga está "durmiendo" con un chico y me dejó a mi suerte.
—Pero si sus padres son los dueños de esto, ¿no pudo ir a otro lugar?
—Es por eso que decidió estar en donde no la buscarían, una habitación no VIP. —Me quedé pensando un segundo—, ¿Cómo sabes quién es mi amiga?
—Todo mundo conoce a Nami y su familia; tienen buena posición así que son muy distinguibles. —Le di la razón.
—Y bien... ¿cómo nos acomodaremos?
—Pagué por dormir bien. Si quieres venir adelante, si no, ahí está ese sofá aunque es muy incómodo —expuso, despreocupado.
— Eres... ¿Qué más da? Dormir en el sofá me traerá dolores musculares. —Me apresuré y recosté al lado suyo.
Me sentía muy tensa.
—No te preocupes, no soy un pervertido, puedes descansar tranquila.
Plasmé mis ojos en su espalda un momento para después también girarme y cerrar los míos.
«Sí Nami supiera que "otra vez" dormí con un chico...»
🔥...
Me desperté al sentir la brisa cálida y los rayos tenues del sol, estiré mi cuerpo como si nunca lo hubiera hecho y giré mi cabeza, me percaté de que "él" ya no estaba; al parecer sólo dejo una pequeña nota:
"Puedes irte cuando gustes"
Era el segundo día que dormíamos juntos y ni siquiera sabíamos nuestros nombres, desde que lo conocí ha sido un poco extraño todo esto. Jamás creí que dormiría con alguien que no conozco ni que me vería semidesnuda y yo a él.
Después de tomar un baño en mi habitación, me puse un vestido rosa floreado de largo a las rodillas y unas zapatillas sin tacón para más comodidad. Supuse que Nami estaría con ese chico Sanji por lo que decía otra de sus notas; así que fui a desayunar a uno de los restaurantes del crucero.
Sostuve una charla con un grupo de personas mayores, que me contaban todas sus anécdotas y me daban consejos acerca de trivialidades. Fue algo agradable.
El sol se ponía cada vez más y yo me encontraba recargada en un barandal fuera de un restaurante asimilando ese bello atardecer con un naranja tan hermoso y unas nubes tan esponjosas que se podía ver en el reflejo del agua, te daba una sensación de tranquilidad y reflexión al mismo tiempo, cosa que sólo un evento como este puede ocasionar.
En un instante se me vino al pensamiento "ese sujeto":
«¿Qué estará haciendo en estos momentos?»
Bajé la mirada al piso de abajo y me percaté de que allá estaba, tenía las manos cruzadas sobre el barandal, llevaba puesto un sombrero muy particular color naranja con un lazo que colgaba hasta su pecho.
«Lo invoqué»
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Ardiente Cómplice +18
Fanfiction(Los personajes no son de mi propiedad, los tomé de One piece) *T/n*= Tú nombre. Nunca imaginé que esa noche en crucero sería el inicio de un sinfín de emociones. Lo mejor de todo fue aquel chico; tan caballeroso y atractivo que no puedo dejar de pe...
