•Capítulo 27•

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Unos cuantos días habían pasado y en Inuma algo estaba pasando, Reyna estaba encerrada en una celda anti radiantes como las que tienen en Skaget, frente a ella estaba Chamber cerrando un trato con la versión espejo de Reyna.

– Te dije que la tendría, cumplo con mi palabra – Le dice el monarca a la radiante frente a él.

– No pensé que lo harías, traicionar a los tuyos para darme la venganza que necesito – Responde Reyna Omega estrechando la mano del monarca.

– Maldito perro hijo de puta, me las vas a pagar, juro que me las vas a pagar – Gritaba dentro de la celda Reyna Alfa.

– ¿Cómo? Si te voy a matar con mis propias manos, cariño – La morena Omega se voltea para dedicarle una tétrica sonrisa a la Reyna Alfa.

– Ya ves lo que dicen Reyna, nunca confíes en mi – La mueca de disgusto de la Reyna Alfa cambia a una sonrisa como la de su contraparte, en ese momento, la morena fuera de la celda se da cuenta de lo que estaba pasando, pero no alcanza a reaccionar. Reyna suelta sus ataduras, Chamber abre la puerta y los papeles entre ambas Reynas se invierten, quedando la Omega dentro de la celda y la Alfa fuera de esta.

– Ay corazón, casi te compadezco – Se burla la Reyna Alfa – Al fin el que seas un traidor nos sirvió de algo.

– Casi me siento ofendido – Responde Chamber limpiando sus manos con algún líquido desinfectante.

– ¿Cual es tu plan? ¿Torturarme? No vas a conseguir nada de mi – Pregunta con sarcasmo la morena dentro de la celda.

– Yo no, tengo a una psicópata perfecta para hacerlo – A la habitación entra Viper terminando de ponerse los guantes.

– ¿Crees que será suficiente para que suelte algo? – La morena tras la celda suelta una burlesca risa, aunque se le notaba nerviosa, estaba viendo la versión Alfa de la que era su pareja – Quiero ver que lo intenten.

Viper se prepara metiendo sus toxinas en la cámara de la celda, accionando su veneno, el mismo que había probado con Chamber, no lograban ver bien el interior de la celda, pero no escuchaban nada. El veneno poco a poco se disipa y Reyna estaba de pie con los brazos cruzados, como si nada le había pasado.

– ¿Con quien creen que Viper probaba sus toxinas? Por favor, ya soy inmune.

– Es una pena que ahora esté muerta y tú hayas sido la responsable de la muerte de la única persona que la podía traer de vuelta – La mueca de la morena tras las paredes transparentes cambia, no estaba entendiendo lo que su contraparte le decía – Por tu cara puedo deducir que no tienes puta idea de lo que te digo. Pues ponte cómoda, porque la mujer a la que mataste, no fue a Sage Alfa, fue a tu Sage Omega.

– No mientas, mi Sage murió hace años.

– Que ingenua – Reyna se pasea alrededor de la celda, siendo seguida con la mirada por su contraparte – Como imagino que tu Lucía también está muerta, te contaré un poco sobre los poderes de nuestra hermanita – Se queda de pie mirando fijamente a su versión espejo – Lucía es capaz de transportar objetos a un tiempo espacio diferentes, solo hacia adelante en el tiempo, ya que es lineal, pero bajo ciertas circunstancias, hemos logrado ver como su poder y alcance aumentan, por eso creemos, que en el momento en que mi Sage hizo ese descubrimiento y que fue por la reacción de la radianita al poder de Lucía, en ese momento tu Sage estaba siendo transportada acá, no sabemos exactamente a qué momento del tiempo la envió, pero sí, cariño, tú fuiste quien la mató y te lo agradezco, yo no hubiera podido hacerlo.

– Eso no es posible – La Reyna espejo se veía desconcertada, de verdad no se creía que ella había matado a su Sage.

– Si lo es, yo misma realice su autopsia – Comenta Viper encendiendo nuevamente la máquina, dejando entrar otro gas verde pero más transparente, ahora podían ver como la piel de la Reyna Omega se ponía al rojo vivo y volvía a la normalidad, pero no mostraba rasgos de dolor – Esto está más divertido que torturar a Chamber – Vuelve a cambiar el contenido del recipiente donde vertía sus pociones.

Púrpura y calypso (Reyna x Sage) (ReyGe)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora