Emily llegó ansiosa a su casa. Tener a Alison de vuelta era una sensación maravillosa.
Es como ir al dentista; luego de que te torturen, debes pasar una hora sin comer, y cuando la hora pasa, tu madre te compra un helado.
Alison era su helado. 'Wow. Profunda, Fields.'
Estacionó el vehículo en el garage, el cual se encontraba vacío, e ingresó a su casa.
Minutos después, el timbre sonó, y Emily supo que era Ali.
Abrió la puerta y ahí estaba. Hermosa, como siempre, pero algo parecía desencajar.
"Hola, Em." Definitivamente, algo andaba mal.
"Ali, nena, qué pasa?"
Dejó pasar a la rubia y cerró la puerta. Subieron a la habitación de Emily y ambas se sentaron en el asiento ubicado al lado de la ventana.
"Hay cosas que no te he dicho todavía, Em. Quiero decírtelas, pero..."
"Tiempo al tiempo, Ali. No me iré a ningún lado, si? Cuando estés lista, yo también lo estaré."
Alison se limitó a sonreir, antes de recostar su cabeza en el cuello de Emily.
"Te amo. Gracias."
Emily la abrazó, y plantó un suave beso en la frente de Alison.
"Pero... debo contarte esto. Es necesario."
La morena frunció el seño, pero no dijo nada, invitando a Alison a continuar.
"Mi padre... él... Él nos maltrata a mí y a mi madre. Nunca me ha golpeado, siempre abusa de mí verbalmente. Mi madre es otra historia..."
Emily sintió el impulso de querer golpear al maldito. Jessica y Alison eran personas importantes en su vida, y el hecho de que en vez de seguir su obligación y cuidarlas, el hombre las lastimaba.
"Ella tiene una ilusión... Piensa que él volverá a ser el mismo de antes, pero yo sé que ya no hay vuelta atrás. Hoy, mi padre casi me golpea, y creo que por eso mi madre decidió que lo dejará."
Emily suspiró, aliviada, "me alegra que lo dejen, Ali. No será fácil, pero estaré aquí, sí? No dejaré que tu padre las lastime más de lo que ya lo hizo."
"Gracias. Te amo."
"Yo también te amo, Ali. Necesitan un lugar donde quedarse?"
"Mi madre, no. Yo, sí. Me preguntaba s-"
"Dormirás conmigo."
Ali le dedicó una sonrisa cálida, de esas que solo reservaba para Emily.
Se acercaron lentamente, hasta el punto en el que Emily podía sentir el aliento a menta de Alison chocar con el suyo.
La morena acarició la espalsa baja de Ali, causando que esta soltara un pequeño suspiro.
Sus labios se acariciaron lenta y sensualmente. Era un beso lento, pero lleno de pasión.
Sin romper el beso, la rubia recostó a Emily en el asiento, y lentamente descendió hasta llegar a su cuello.
"A-lison," gimió Emily, "Mi-mi madre..."
"No está aquí. No la ví al entrar."
Siguió jugando con el cuello de la más alta, mientras sus manos acariciaban la cintura de esta.
"Se fue de compras... Pero, y si llega?" Cuestionó la morena con la respiración agitada.
"Escucharemos el auto y la puerta."
Justo cuando Emily parecía dispuesta a continuar la sesión de besos, se escuchó una voz proveniente de la puerta de la habitación.
"No. No lo escucharán."
La cara de Alison perdió color, y Emily casi cae al suelo gracias al salto que pegó.
"Mami! Hola!"
"Buenas noches, señora Fields."
Pam soltó una gran carcajada, sacudiendo la cabeza.
"Emmy, cuando te dije que buscaras algo que hacer mientras me iba de compras, no pensé en esto."
"L-lo sienti, mamá. Fue culpa de Ali."
Los ojos azules de Alison se abrieron como platos, y miró con furia a su sirena.
"Fue ella, Pam! Lo juro!"
Pam solo levantó los hombros y sonrió, "lo sé, Alison. Mi hija está pasando por una revolución hormonal. Si intenta algo que tú no deseas otra vez, me avisas, si?"
"Qué mierdas dices, mamá?"
Alison sonrió triunfante, y asintió. Emily resopló, y permaneció callada.
"Te quedas, Alison?"
"Si no te molesta..."
"Claro que no! Pero prohibido fornicar mientras duermo, entendido?"
Con las mejillas rojas y las miradas abajo, ambas chicas asintieron.
Pam dejó la habitación, dirigiéndose a la cocina para preparar la cena.
"Puta madre, hablame de incómodo," murmuró Emily, agradeciéndole al cielo la buena reacción de parte de su madre.
"Tu madre es genial, Em. La mía nos habría castrado si nos hubiese encontrado así."
La morena le lanzó una mirada severa a la rubia, "traicionera."
"Qué?! Qué hizo la pobre DiLaurentis ahora?"
"Me tiraste bajo el autobus! Si mal no recuerdo, tú iniciaste todo."
"Em, eres su hija, a tí no te puede matar. Conmigo, es otra historia..."
El poco enojo que había poseído a Emily la abandonó en el instante en que Alison sonrió. Si obtuviese como recompensa una sonrisa de parte de Alison, Emily estaría dispuesta a meterse en problemas todo el tiempo.
Sus miradas se cruzaron, y ambas se sientieron contentas. Alison sentía que sus problemas se desvanecían al estar con Emily, y la morena sentía lo mismo por la rubia.
"A comer, señoritas!"
se bajaron un chori con matecito de postre okno
La cena consistió de Emily comiendo como un animal hambriento, Pam reprendiéndola, y Ali riéndose de la morena.
Antes de volver a subir, Pam habló.
"Señoritas, las paredes de esta morada son bastante frágiles. Puedo escuchar todo. Ciidadito con lo que hacen, bien?"
"Si, mamá."
"Si, señora Fields."
La mujer sonrió, "me encanta cuando me dices señora Fields, Alison. Me hace sentir que al menos una persona en este mundo me respeta." Habló con sarcasmo.
"Buenas noches, ma."
Subieron a la habitación de la más alta. No quisieron abusar de la confianza que Pam les había brindado, así que se fueron a dormir con solo un dulce beso de despedida.
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FELIZ CUMPLE A LA GRONCHA IMPRESENTABLE MissPhin AMEHA ESTO SE ACTUALIZÓ COMO UNA SEMANA DESPUÉS DE TU CUMPLE PERO GÜENO TE AMO EH
