Capitulo 9

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Dos personas se encuentran viendo la convivencia de dos niñas con unas chicas quiénes se veían muy feliz conversando en el suelo y riendo de las ocurrencias entre ellas.

— Directora, deberíamos decirles que se retiren— declaró la maestra— la hora de recreo se va a terminar y no sería bueno tener a dos alfas aquí y mayores que los niños.

La directora solo asintió estando de acuerdo.

— Sería lo justo, después de mucho tiempo y espera deberían irse — contestó la directora mientras se acercaba a las cuatro personas que se encontraban felices.

Lisa pov

Y así fue como Jisoo se cayó de la resbaladilla — reí al ver la reacción de mi amiga.

Ese momento no lo olvidaré jamás, es tan gracioso.

— ¡Ya Lisayah!, Todo fue tu culpa— pare de reír y la vi fingiendo inocencia.

— ¿Yo?, Yo no hice nada Jichu — conteste indignada, sabia lo que había hecho aquellos años.

— Si claro, sabía que fuiste tú la que me empujó para que me deslizara por la resbaladilla pero nunca tome en cuenta que tuvieras tanta fuerza — resopló sin dejar de mírame pero en ella se mostraba una mirada divertida.

Sabía que no estaba enojada, no estaría enojada conmigo después de todo.

— Lo lamento, ¿Está bien?— le di un abrazo lateral y dejé un beso en su mejilla.

— Ahg te perdonó— rodó los ojos y yo la abracé con más firmeza — siempre ganas en todo... ¿No Manobal?

Dejé salir una sorisa cómplice y asentí.

— Así es — pronuncie siendo segura de mis palabras y ganando pequeñas risas de las niñas que estaban frente a nosotras.

— Hola— una voz femenina se escuchó en medio de la conversación.

Sabía a qué persona le pertenecía, sin duda la mujer que me hizo conocer a él amor de mi vida.

— Hola— respondimos al unísono haciendo que la directora sonriera.

— Chicas, perdón la molestia pero de verdad se tienen que retirar— dejé de la lado mi sonrisa y volví a la realidad.

Era cierto, solo habíamos entrado aquí en esta institución como unas inquilinas y sabía que debíamos irnos.

Pero por dentro me dolía saber que ya no tendría mi omega a mi lado.

¿No sería mala idea venir a visitarla o si?

— Claro, entiendo perfectamente— me levanté del suelo y limpie mi ropa con las manos ya que contenía un poco de tierra y ayudé a levantar a la pequeña castaña de su asiento quién me miró con un destello en sus pupilas.

— Entendemos directora y gracias por dejarnos pasar un rato a su institución— asentí a lo que Jisoo había dicho.

— Es cierto, muchas gracias — deje salir una sonrisa de oreja a oreja.

Vi como un par de ojos de dos niñas me miraban pero en especial a una quién se le veían sus ojos cristalizados.

Se me rompió el corazón de tan solo verla en ese estado, no quería que estuviera triste y sin más me acerqué a ella.

—Linda, ¿Qué sucede?— pregunté con un tono preocupado colocándome de cuclillas para estará la altura de Jennie.

— Solo que me pone triste que te vayas de aquí— sonreí en mis adentros ante la confesión.

𝑴𝒊 𝒐𝒎𝒆𝒈𝒂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora