Volumen 2 - parte 1

261 30 10
                                    

Repentinos problemas
Parte 1

Me encontraba recluido en el refugio de mi habitación después de otro monótono día en la escuela. Habíamos recibido la noticia de que la Clase D había ascendido de un lamentable 0 puntos a un aún lamentable pero no tanto, 87 puntos. Un rayo de esperanza, supongo. Además, Sudou fue convocado a la dirección por razones desconocidas.

Hice mi rutina nocturna: cambiarme, cepillar mis dientes, apagar las luces, y acurrucarme en mi cama para huir de la realidad unos momentos. Justo cuando estaba listo para descender al olvido, dos notificaciones irrumpieron en mi tranquila soledad. Una luego de la otra.

El primer mensaje provenía de Horikita, que me escribió sobre el tema de Sudou.

Horikita: "No me gusta la idea de Sudou-kun siendo citado a la dirección."

Ayanokouji: "No sería la primera vez, ¿no?"

Sudou no es el mejor estudiante que digamos. Su comportamiento conllevaba a llamadas de atención.

Horikita: "Lo se. Pero esto es diferente." "Tengo un mal presentimiento y estaré pendiente, pero ¿podrías apoyarme si las cosas se complican?"

Ayanokouji: "¿Realmente tengo que hacerlo?"

Horikita: "Naturalmente."

Cerré la conversación sin más preámbulos; no tenía el ánimo de discutir. Es un problema ser su peon.
De todas maneras, si la rechazaba, tendría que prepararme para una pelea a muerte contra un compás.

El segundo mensaje fue de Chisato. Habíamos intercambiado números una semana después de que me bautizara como "Kiyo".

Chisato: "¡Kiyo!" "¿Quieres venir a mi cuarto este fin de semana? Tendré habitación vacía, solo tú y yo"

Mi corazón saltó por un momento. ¿Podría ser que...? No, debo estar alucinando.

Chisato: "Podemos jugar videojuegos en mi consola" "Oye, ¿y si traes un nuevo juego? Ya terminé todos los que tengo".

Así que no era lo que imaginaba...

Parece que Chisato solo quiere un nuevo videojuego, y está intentando usarme para que le compre uno.

Por mera curiosidad, revisé mis puntos. La pantalla mostraba 8,320 puntos en mi cuenta. Podría comprarle ese videojuego, si realmente quisiera hacerlo.

Ayanokouji: "Lo siento, pero me quedé sin puntos."

Una mentira piadosa. No planeo convertirme en tu saco de mandados, Chisato. Ya tengo suficiente con las cadenas de Horikita.

Chisato: "Oh..."

Su decepción al ver qué sus planes fracasaron era obvia hasta por mensaje.

Por un momento, creí que la charla había concluido, pero en eso, recibí otro mensaje.

Chisato: "Bueno, puedes venir de todas maneras".

Así que, después de todo, no solo quería utilizarme.

Ayanokouji: "Ya veo"

Hmmm...

Ayanokouji: "Lo consideraré."

Y lo haría. Aunque los videojuegos no son lo mío, sentía una extraña satisfacción al ser invitado a algo que no estaba relacionado con la escuela.

Apagué mi teléfono y lo dejé a un lado. Era hora de dormir. Pero entonces, mi puerta se abrió de golpe, con un portazo.

Sudou: Ayanokouji, te amo.

... ¿Qué demonios?

Sudou: Eres el mejor. Creo que eres increíble y capaz de cualquier cosa. ¡Por eso, por favor, sálvame, Ayanokouji!

Chisato y Takina en Classroom of the EliteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora