Depresión

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Franco

La preocupación que siento por Sara es algo que trato de controlar y que ella no lo note, ya ha pasado dos meses desde que ese hombre la atacó y cada día la veo más deprimida, lleva todo ese tiempo encerrada en la habitación, come muy poco y se la pasa durmiendo, he intentado que vea la terapeuta pero es un monólogo, ya que solo la terapeuta le habla.

F: Bajas a desayunar con nosotros mi amor?!- digo entrenado a la habitación.
S: No tengo hambre, solo quiero dormir.-dice sin voltear a verme
F: Dormiste toda la noche, ven a desayunar y luego vuelves a la cama.
S: Acaso no escucharte lo que te acabo de decir Franco, no quiero el maldito desayuno, solo quiero que me dejes en paz.- me grita enojada
F: Esta bien, disculpa.- digo dándome la vuelta para salir.

No se que hacer, no quiere ayuda, ni siquiera con sus hermanas quiere hablar, cada día esta mas pálida, más delgada, y temo que se enferme,  dejo pasar un rato y subo a dejarle el desayuno, no la veo en la cama, la llamo pero no responde así que me dirijo al baño, cuando entro la veo desmayada corro a cargarla y la dejo en la cama, la llamo pero no reacciono, voy a buscar alcohol y se lo pongo a oler, meo que poco a poco va reaccionando.

F:Que susto me diste, estás bien?!
S: Qué pasó?
F: Estabas tirada en el baño, te desmayaste.
S: Me sentía y aún me siento muy mareada.
F: Sara, se que todo esto es difícil, pero debes de intentar comer al menos, te vas a enfermar, mira cómo te desmayaste.
S: Perdón, no quise preocuparte.
F: Solo come por favor.- ella asiente y yo le ayudo a que coma.
S: Franco perdón, por favor perdóname, es que todo esto me rebasa, nunca he sido una mujer que vive de miedos, pero te juro que ese día fue mi peor pesadilla, y ese miedo constante no se me va.- dice con la voz quebrada.-las pesadillas se sienten tan reales, el dolor que siento al no poder estar contigo porque las imágenes de ese día no salen de mi cabeza, te juro que es un infierno, pero quiero que sepas que yo te amo, eso no los dudes por favor.- dice llorando y yo me acerco y la abrazo.
F: Eso lo sé mi amor y yo te amo mas, estoy aquí para ti, sabes que te apoyo en todo lo que quieras, pero no puedes seguir así Sara, me duele ver cómo te estás destruyendo de a poco, por favor, déjame ayudarte.
S: Es que no se como, siento que no podré salir de esto.
F: No me digas eso, no quiero pensar que vuelvas a intentar hacer algo contra ti, por favor, júrame que no has pensado en eso.
S: No te puedo mentir, si ha pasado por mi mente.- dice sentándose en la cama y yo la sigo.- pero te juro que no lo trataré de hacer.
F: Tu vida es lo más sagrado Sara, por favor, acepta ver a la terapeuta, ella quiere ayudarte.
S: Solo si me prometes que estarás conmigo.
F: Claro que si, si es lo que quieres ahí estaré.
S: Te amo mi amor.- dice para luego darme un beso, me quedo sorprendido pero la abrazo.
F: Yo más a ti, eres mi vida entera.

Sara

Estos meses han  sido de los peores de mi vida, la angustia y el miedo que siento es algo que no se va, solo quiero estar en mi cama sola, hice que Franco se cambiara de habitación, cosa que sé que no tolero, odio dormir sola y mas ahora que constantemente tengo pesadillas, pero tengo que intentar salir de esto, se lo prometí a Franco, se lo debo, ha tenido mucha paciencia conmigo que solo lo he rechazado y lo he tratado como si él fuera el culpable de lo qué pasó, así que me paro y me doy un baño para cambiarme y bajar al estudio a esperar a Laura.

Entro al estudio y ahí está Franco con unos papeles, este tiempo se ha tenido que encargar de todo.

S: Hola.
F: Hola cariño.
S: Laura te dijo a qué hora viene?
F: Debe estar por llegar, aún quieres que te acompañe?!
S: Si, no quiero estar sola.- le digo sentándome en el sofá. Irene nos indica que Laura ya llegó y Franco le indica que la haga pasar.

L: Buenas tardes, Sara me alegra que me mandaste a llamar.
S: Quiero iniciar la terapia.
L: Perfecto podemos empezar ahora mismo, si el señor Franco nos puede dejar a solas.
S: No él se queda, lo necesito conmigo.
L: Están seguros?! Deberás contarme todo lo qué pasó y cómo pasó, usted está seguro de poder escuchar eso?
F: Si, no pienso dejar a mi mujer sola en esto.- dice tomándome la mano.
L: Pues bien, entonces comencemos, Sara se que es difícil pero como dije anteriormente necesito que me cuentes todo lo qué pasó ese día, desde el secuestro hasta que te encontré, crees que podrás?.- Franco me aprieta la mano y eso me anima a iniciar.

Estuvimos casi toda la tarde en el estudio, conté todo con pelos y señales, Laura me escuchaba atenta mientras yo contaba todo entre lágrimas, Franco esta en silencio, la rabia y la impotencia se le nota en la cara mientras deja salir unas lágrimas.

F: Quiero matar ese hombre.
S: Cálmate por favor.- digo acariciando su mano.
L: Sara, lo primero que tienes que saber es que nada de lo qué pasó fue tu culpa ni tu lo provocaste, ese hombre que te atacó es el único culpable y por eso recibirá su castigo. Debes de aprender a confiar nuevamente en las personas que te rodean, tú familia te ama, y para ellos esto también a sido difícil, pero verás que pronto todo mejorará, te daré pastillas para que puedas conciliar el sueño, y en cuanto ustedes cómo pareja deben de trabajar en restablecer la confianza y la paciencia, se que te costará Sara, pero debes saber que Franco nunca te haría daño, tu esposo por lo que he visto te ama y estoy segura que quiere solo lo mejor para ti.
S: Yo lo sé.- digo recostando me cabeza en el hombro de Franco.
L: Pasen tiempo juntos, y vallan al paso que tú creas conveniente Sara, verás que te irás sintiendo mejor según vayas recuperando tu rutina, y según trabajemos en las terapias. Ya la sección del día de hoy concluyó, nos veremos la semana entrante.- dice recogiendo sus cosas para irse.

Esa noche cené en la mesa, bueno lo poco que me pude comer, últimamente no tengo mucho apetito.

G: Por qué no comer algo más mami, te hará bien.
S: No tengo mucho apetito mi amor.
A: Quieres que te prepare otra cosa?
S: No es necesario.
F: Bueno, lo importante es que nos acompañaste hoy a la mesa.
S: Si, bueno ya me retiro a mi habitación, nos vemos mañana.- digo dándoles un beso a Gaby y Andrés y me dirijo a mi habitación.

Franco

Terminó de cenar y me voy al cuarto de huéspedes ahí es donde duermo desde que inicio esta pesadilla, estoy terminando de bañarme cuando escucho la puerta abrirse y salgo en toalla a ver quien es, y es Sara.

F: Qué pasó mi amor?!.-digo acercándome a ella.
S: No quiero estar sola, puedo quedarme aquí contigo.
F: Claro que si mi amor, sabes que me encanta dormir contigo.- veo cómo se acerca a mi y me abraza y yo también la abrazo fuerte.- sabes que siempre estaré aquí para ti.
S: Yo lo sé mi amor.-me sorprendo por eso, tiene todo este tiempo sin llamarme así, me salgo de mis pensamientos al sentir sus labios contra los míos, yo le sigo el beso, extrañaba sentirla así, el beso va cobrando intensidad, y la pego de la pared, ella sigue besándome y yo acaricio su muslo, siento como me empuja.- No, no puedo, mejor hablamos mañana.
F: No quédate. Ven te prometo que no te toco.
S: No, lo mejor será que duerma con Gaby.-dice saliendo, soy un idiota, porque hice eso.

Sara y Franco-Olvidar el pasado Donde viven las historias. Descúbrelo ahora