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Gaara despertó con un enorme peso en las piernas -Mmm..fuera- Dijo tratando de mover las piernas -Pesas mucho

-Se llama Lucas- Escuchó la voz del moreno -Le agradan mucho las personas desconocidas...no ayudaría para proteger algo- Tomó al enorme perro en brazos y se lo quitó de encima -Es un Doberman que come mucho, disculpa el peso

Gaara se enderezó hasta quedar sentado mientras veía como el enorme perro quería volver a la cama con él -No importa, me agradan los perros grandes...son protectores con sus dueños

-Si, mucho- Salía de la cama con una sonrisa ligera.

-Tienes que volver con tu familia

-Lo sé- El pelirrojo tomaba la ropa con dirección al baño, entró a este bajo las miradas de Lee y Lucas -Supongo que será la primera y última vez que te veré- Decía Gaara saliendo del baño.

-Por qué lo dices?

-Me castigarán por el resto de mi vida porque me escapé- El azabache rió por el comentario dicho.

-Traes tu celular?- Gaara asentía sacándolo de su bolsillo derecho delantero para entregárselo -Este es mi número por si quieres hablar- Escribió unos segundos y después le devolvió el móvil.

-Seguro..si es que no me lo quitan- Los dos rieron y el animal ladró llamando su atención -Bien, hora de ir a casa- El pelirrojo se levantaba buscando sus zapatos sin éxito alguno.

-Seguramente Lucas te los escondió, voy a buscarlos- Lee bajó las escaleras persiguiendo al perro -Tiene que irse Lucas, debes devolverle los zapatos- El animal salía corriendo con dirección a un auto viejo -Oye, devuelve los zapatos- Lucas tomaba las cosas dichas de debajo del auto y salía corriendo siendo perseguido por el moreno.

-Parece que le gustan mucho mis zapatos- El pelirrojo sonreía viendo como Lee iba de allá para acá persiguiendo al animal. Se hallaba en el último escalón y tenía la intención de bajarlo, sin embargo el moreno lo detuvo.

-Espera, no he limpiado el piso

-No importa- Lee se acercó tomándolo de la cintura y alzándolo fue directo a sentarlo en un mueble de metal cercano -No era necesario, pude caminar descalzo

-No, el piso está sucio y Lucas aún no devuelve tus zapatos- Miró mal al nombrado -Si a tí- El moreno tardó varios minutos en quitarle los zapatos ajenos al perro, pero al final lo logró -Lamento la tardanza, se aferró a tus zapatos como si fueran suyos- Gaara rió por su comentario.

-Gracias- Se ponía los zapatos mirando como Lee reprendía a Lucas por su mala conducta -Igual, me tengo que ir- Gaara se aproximaba a la entrada y Lee lo seguía con cierta cautela -Gracias por dejar que me quedara a dormir- Agradecía de nuevo.

-No tienes que agradecerlo y si necesitas quedarte a escondidas de tus padres otra vez..no dudes en pedirlo- El menor asentía con una sonrisa ligera, antes de irse Gaara un beso en la mejilla derecha del mayor. Se fue preparándose mentalmente para el castigo que le iban a dar.

-Por lo menos tendré lindos recuerdos para pensar mientras me muero castigado- Se dijo a sí mismo, al llegar a casa y tocar la puerta abrió Kankuro quién lo abrazó con fuerza, luego aparecieron sus padres y al último Temari.

La última lo abrazó después de su hermano -Suéltame- Temari obedeció casi en llanto. Su madre trató de abrazarlo, sin embargo Gaara se negó rotundamente -No

-Deja que tu madre te abrace mocoso mal educado- Hablaba su padre molesto por su comportamiento -Y estás castigado por un mes, irte así y aparecer al día siguiente no es correcto

-Como si supieras lo que es o no correcto- Respondía enojado mientras salía de la casa con dirección al auto y subiendo a el esperó a sus hermanos para ir al hotel donde se quedaban. Luego de unos minutos Kankuro apareció en el asiento del copiloto.

-Temari no vendrá?- Le cuestionó al mayor y este negó en silencio -Por qué?..Fue por lo que respondí a papá?

-No, mamá y ella tienen que salir a buscar la pintura para los cuartos y me preguntaron qué color querías para el tuyo- Arrancaba el auto manteniendo la mirada en la calle.

-Beige

-Bien, se los diré- A los diez minutos llegaron al hotel, estaba a dos calles a la derecha y era bastante pequeño, de tres pisos y un color menta oscuro ya gastado por el tiempo y el polvo -Y papá dijo que no te quitará el celular por cuestiones de seguridad, pero tienes prohibido salir de tu cuarto de hotel a menos que sea una emergencia o él te lo permita- Detenía el auto en la entrada del hotel.

-Dile que se vaya a la mierda- Con eso el chico bajó entrando al edificio bajo la mirada del mayor.

-A veces ese mocoso me saca de quicio...cómo lo soportan mamá y papá?- Arrancaba con intención de volver dónde sus padres y hermana para ayudar en algo.

Por otro lado el pelirrojo iba llegando a su cuarto, lo malo es que duraría encerrado un mes, tiempo suficiente para odiar ese lugar de cuatro paredes, lo bueno era que su celular se hallaba con él...y también el número del azabache.

-No moriré de aburrimiento hablando con él- Gaara se adentraba al cuarto cerrando la puerta, el cuarto era solo de él así que podía dormir un rato sin que lo molestaran -Tal vez le mande mensajes luego de dormir un poco- Un bostezo salió de sus labios -Una pequeña siesta- Se acomodaba en la cama que se encontraba a unos metros al lado izquierdo de la puerta y sólo cerró los ojos pensando en el azabache.

Era de mañana, sí, pero él dormía mucho desde ese día. Simplemente los días ya le parecían muy agobiantes y sin sentido alguno.

Y a veces deseaba dormir y ya no despertar por el simple hecho de lidiar con sus padres todos los días, su madre que casi lo obliga a ser abrazado y su padre diciéndole que es un inútil y que se comporte como un joven normal.

-Es...agotador

Recuerdos Dolorosos (LeeGaa) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora