Destinados (Suguru Geto)

Capítulo #2

Al llegar al aula me senté en la segunda fila, específicamente en la tercera mesa.  Junto a mi se sentó Shoko, en la mesa de atrás Satoru y Suguru. 

Shoko -El profesor Nanami es demasiado estricto.- se quejó dejando caer su cabeza de frente en la mesa de los chicos.  Aparentemente, física era una de las materias más complicadas, ahora añadiendo que el profesor Kento Nanami era muy estricto.

Satoru -Me la pela en verdad, es buena gente, pero ¡agh, maldita materia! El semestre pasado tuvimos que soportarlo en matemáticas.- se quejó rodeando los ojos con fastidio.  Satoru con su actitud era como un niño pequeño.

Suguru -Satoru, es que eres un vago.- todos reímos excepto el mencionado.

Shoko -Ahora hablando un poco del profe, realmente es atractivo, deja que lo veas Leila.- Satoru y Suguru rodearon los ojos, al parecer Shoko los tenía locos por dicho comentario.

Satoru -Ya sal de esa fantasía Shoko, te dobla la edad.-

Shoko -¿Y eso qué?- rió con malicia.-Ahhh, ese hombre es un sueño, sus ojos café que reflejan cansancio, piel pálida y tersa, esa voz penetrante y su porte tan elegante.- estaba babeando mientras describía lo que le gustaba de él.

-Parece que alguien está obsesionada con su profesor.- reí divertida.

Suguru -Leila, no tienes idea de lo loca que esta Shoko por el profe,  cada vez que lo ve, de sus ojos brotan corazones.- me susurró y reímos bajo.

Satoru -Leila, ¿quieres saber que tan psicópata es Shoko?-

Miré a Shoko que le daba igual lo que los chicos decían.  Satoru tomó el teléfono de Shoko y buscaba algo en él.

Satoru -Mira.- me extendió el teléfono y él discretamente observaba que nadie nos mirara.

-¿Qué es?- cuando vi, eran fotos de quién se supone que es el profesor Kento Nanami y no voy a mentir, era realmente atractivo.  Había todo una carpeta llena de fotos del profesor, de espaldas mientras escribía en el pizarrón, sentado en el escritorio leyendo, sentado en el borde del escritorio, explicando algo a los estudiantes, incluso había una donde él estaba inclinado en una de las mesas explicando algo y se veía muy sexy.

Shoko -Te mostraré mi favorita.- deslizó un par de fotos más y había una del profesor sonriendo.  -Esta es la más preciada que tengo.- ella se sonrojó al verla.-Él nunca sonríe, está foto es el Santo Grial para mí. Cada vez que la veo me preña.- ella suspiró, se veía que estaba muy enamorada de él.

-¡Ayyyy Shoko, estás realmente loca!- negué con la cabeza sosteniendo una sonrisa.

Shoko -¡Siiiii, loca por ese viejo sabroso!- relamió sus labios sumergida en un pensamiento. 

Satoru -Geto, roguemos al Todopoderoso que cuando el profe Kento entre por esa puerta, Leila no se vuelva una Shoko.- se dirigió a su amigo pelinegro.

Suguru -En el nombre de Jesús, reprendemos el espíritu de obsesión y pensamientos lujuriosos por los mayores lejos de Leila.- ambos tenían las manos en forma de rezo con sus ojos cerrados.

Satoru -Amén.-

Suguru -Lo creemos hecho, amén.-

No pude evitar reír a carcajadas ante su acción.  En las pocas horas que estuve con ellos ya me sentía que los conocía de muchos años, eran muy agradables y me daban un sentimiento de seguridad.

Shoko -No sé de qué hablan, ustedes no pueden negar que no han visto con otros ojos a la profe Mei Mei.- Satoru se sonrojó un poco, Suguru solo reía.