𝘼𝙯𝙪𝙡 𝘾𝙞𝙚𝙡𝙤

Squad Kamado

Me coloque de cunclillas con una rodilla pisando el suelo, mi respiración era agitada, mis pulmones ardían y me costaba respirar, pero al fin habia llegado.

La montaña se alzaba de manera perturbadora frente a mí,  inhale profundo y me levante comenzando a correr, al adentrarme comenze a ver montones de telarañas, pare en seco al comenzar a escuchar un sonido... parecia, como si miles de pisadas se escucharan... alguna araña. Con la mano en mi katana comenze a ver hacia mi al rededor.

Un cosquilleo en mi muñeca llamo mi atención, baje la vista solo para ver a una pequeña araña rodeandola, segundos después mi brazo fue jalado, di una vuelta en el aire y con mi katana corte el hilo aterrizando en una rama.

Segui saltando de rama en rama, algunos cuerpos sin vida estaban colgados en los árboles, algunos eran de rango mizunoto, otros eran de rango Mizunoe...

De un salto llege al suelo cuando escuche serca los gritos de al parecer una chica, comenze a correr hacia esa dirección, viendo a lo lejos a Kamado y al chico con cabeza de Jabali, habian varios cazadores colgando a su al rededor, podia ver como sus cabezas giraban  terminando con sus vidas.

Pero a mi solo me importaba alguien; Hiromi, estaba colgando justo en frente de Kamado, era la ultima que estaba con vida... aumente mi velocidad saldando para que justo a tiempo llegara y cortara los hilos que la ataban a ella, la tome en brazos para saltar lejos de las arañas que la tenian atada.

Por unos minutos todo quedo en silencio, Hiromi estaba con la mirada perdida en el cielo, luego los poso en mí, la mire sonriendole.

– Pudiste aguantar hasta que yo llegara... lo hiciste bien.- La deje boca arriba en el suelo, mire detras mío,  hambos me miraban sorprendidos.

– ¿¡Y tu quien eres!?.- Me grito el Jabali.

– Yukiko Satō, vine a ayudar... escuche que muchos cazadores han desaparecido en esta montaña, ¿Saben algo?.- Pregunte fingiendo desinterés.

– No sabemos mucho, Murata solo nos dijo que comenzaron a atacarse entre ellos, pero... las arañas que hay aqui, los atan y después los usan como marionetas.- Explico Kamado.

– ¿Murata?.- Pregunte confundida, un ruido detras mío llamo mi atencion, Hiromi estaba siendo jalada por un hilo, tome mi katana para cortarlo, pero ella ya los habia cortado con la suya.

– ¡Ya sueltenme!, ¡Me duele todo mi cuepo, tengo hambre y por su fuera poco me campturaron apenas pise esta montaña!.- Grito mi aprendiz.

– Tenemos que continuar... hay que encontrar al demonio que los controla.

– Sera más facil si nos separamos.- Sin esperar respuesta comenze a correr en dirección contraria. Unas pisadas detras mío se escucharon, me gire solo para toparme con Hiromi, corria detras mío,  fácilmente podia seguir mi ritmo.

– ¿Todos los de cuerpo de cazadores estan muertos?.- Pregunte regresando la vista al frente.

– Al parecer si, por lo que escuche, fueron dos grupos los que fueron enviados aqui, pero a fin de cuentas terminaron  muertos. - Explico mientras nos deteniamos.– ¿Usted, vino como apoyo?.

Baje la mirada al escuchar su pregunta.

– Giyuu fue herido, asi que fue a la SEDE para informarlo... las hijas menores de Ubuyashiki-Sama fueron quienes me dijeron, por el Bijon pude ver que estaban en problemas.- El tintineo de éste  sonó,  el copo floto hasta estar frente a mí, lo aplaste con mi mano desapareciendolo.– Vine lo mas rapido que me permiti.

– Osea... ¿que vino aqui... por su propia cuenta?.

– Vine aqui por ti, no solo porque prometi cuidarte, si no porque te quiero mucho..- Ella se quedo mirandome sorprendida por unos minutos, sus ojos tenian brillo por lo que parece ser lagrimas retenidas.