"BELLEZA MARINA" - GeminiFourth (ADAPTACIÓN)

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Gemini terminaba de abotonar su camisa, tomó su saco perfectamente liso y hecho a su medida, para abrochar los pequeños botones las mangas y como último paso ajustarse el saco y el cuello de su camisa, todo esto frente al espejo, mientras esperaba a su hermoso novio que dentro del baño se encargaba de terminar de arreglarse. Las hermanas de Gemini, habían convivido mucho tiempo con él y ahora ya sabía un poco más sobre arreglo personal y cosméticos, algo que en su mundo no existía, pero allí sí y debía de acoplarse, aunque Gemini siempre le decía que no lo necesitaba; Fourth era hermoso por naturaleza, no requería agregar nada a su rostro, pero el chico de cabello lila deseaba verse más como humano.

Iban a una importante cena con otros miembros del gobierno, aunque también estarían empresarios poderosos que estaban metidos en la política; Fourth no entendía la mayoría de cosas que hablaban, pero se enfocaba en la comida, la estética del restaurante, la música hermosa que tocaban y sonreía cuando Gemini lo hacía, no era tan difícil acostumbrarse a las tradiciones humanas, igual ya había aprendido a no hablar sobre su mundo o decir de dónde venía y lo que había, ya que podía poner en riesgo su mundo, y siempre lo miraban como si estuviera mintiendo, y Gemini nervioso tenía que explicar que habían ambos naufragado en el mar, y que él sufrió de amnesia.

Quería ser la pareja ideal, alguien de quien Gemini Norawit se sintiera orgulloso, que todos los miraran con alegría y no avergonzarlo, aunque Gemini siempre lo trataba como a un príncipe y lo presumía, él quería que siempre se sintiera así y no fallarle.

Fourth salió del cuarto de baño luciendo un hermoso traje de color beige que lo hacía ver hermoso y que inevitablemente provocó una sonrisa en el embajador.

- Dios... - Gemini lo miraba embelesado.

- ¿T-te gusta? - Tímido y sonrojado preguntó el chico y el mayor se acercó a él, para tomarlo de la cintura y pegarlo a su cuerpo, delineando sus labios con uno de sus dedos y mirándolo fijamente.

- Me gustas tú. Me encantas. Me fascinas. - Ambos reían y Gemini besaba sus mejillas rosadas y labios cálidos.

Estaban en su momento de repartirse amor, cuando llamaron a la puerta, informando que el auto ya estaba afuera esperándolos. Gemini tuvo que abandonar los labios de su amado y ambos salieron del cuarto, donde Winny ya los esperaba firmes para seguirlos y acompañarlos como la seguridad de ambos. En esas semanas, Winny Thanawin se había vuelto muy cercano a Fourth, era un chico maravilloso que por algún motivo inexplicable enternecía su corazón y lo hacía reflexionar sobre muchos aspectos de su vida para mejorarlos o cambiarlos.

Por ejemplo; Winny ya había comenzado a dejar de beber con tanta constancia, se había decidido meter a un grupo de alcohólicos anónimos que desde hacía tiempo su primo Ohm le había sugerido, le daba vergüenza y le costaba un poco contar su historia, pero ese chico merecía que él lo cuidara bien y estuviera cuerdo cuando lo necesitara.

Subieron al auto y como casi siempre ocurría, Fourth se elevó para sacar su cabeza por el quemacocos y un rato observar la ciudad y que el viento chocara con su rostro; algo que le encantaba. No tardaron mucho en llegar al restaurante de lujo. Los hombres se levantaron y les ofrecieron la mano a ambos para después sentarse. Hablaban nuevamente de temas que no comprendía Fourth, por lo que se centró en el grupo en vivo que tocaba al fondo y la comida que les habían servido.

Uno de aquellos millonarios empresarios observaba a Fourth y de vez en cuando le sonreía. Fourth, era alguien muy social y amable, por lo que naturalmente correspondió y siguió comiendo, hasta que el hombre en cuestión detuvo la charla de política y se dirigió a Gemini con otros fines en mente.

- ¿Sabes, Gemini? Tu joven amigo es realmente una joya. - Ambos se miraron y luego a él.

- Muchas gracias, Arthit.