1. ᴀ ᴍʏꜱᴛᴇʀɪᴏᴜꜱ ʙᴏʏ

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19:35 pm en casa de Los Ryson.

Salí del despacho de mi padre dando un portazo por la inmadura y mierda de conversación que había tenido con el.
¿Quién se creía el para decirme todas esas cosas?

El nunca ejerció como padre, lo que hacía era darnos su maldito dinero para después desaparecer de nuestra puta vista, lo único que pedíamos mi hermana y yo era un poco de afecto paterno por parte de el, pero desde que nuestra madre murió nada volvió a ser lo mismo.

— Leah, tranquila — dijo Elia mientras llegaba a mi corriendo al escuchar el portazo que había dado.— ¿Que te ha dicho papá?

— No te preocupes, todo está bien— hablé mientras me calmaba y le sonreía

— No soy ya la niña estúpida de 13 años— dijo ella cruzándose los brazos esperando mi respuesta

¡Y como no! Las veces que discutía con mi padre intentaba que no se diera cuenta Elia, ya que no quería que todo lo que realmente sucedía en esta casa  le afectará pero supongo que ahora no es así, desde que Elia cumplió 16 años piensa que todo lo que ha vivido aquí no es nada de lo que ella se imaginaba años atrás.

Para Elia he sido como su padre y madre aparte de ser su hermana mayor ya que cuando Elia tenía 6 años y yo 9 años nuestra madre falleció misteriosamente en su habitación, no había signos de sangre ni de estrangulamiento o violación simplemente ella había fellecido en su cama.

Desde ese día supe que el término "familia" había terminado.

— Mira Elia ahora no me molestes, ¿si?

— Joder,¿pero te crees que sigo siendo la puta niñata de años anteriores de que no me daba cuenta de lo que pasaba en esta maldita casa?— alterada y siguiéndome por los pasillos de la inmensa casa donde vivíamos ella seguía insistiéndome.

La ignoré y le cerré la puerta de mi habitación en su cara, dejándola a fuera sola y enfadada.

Elia y yo nos llevábamos bien aunque últimamente está siendo muy cotilla en todo, quiere saber absolutamente todo y eso a mi me cansa y me incomoda.

Me tiré en mi cama y me puse algo de música para relajarme.

Aunque realmente me apetecía un montón salir a dar un paseo por las calles de la pequeña ciudad.

Miré la hora y eran las 19:50 pm.

No es tan tarde pensé.

Después de cinco minutos en mi habitación salí de allí y me dirigí directamente a la puerta de la entrada de la casa.

— ¿A donde crees que vas?— preguntó una voz gruesa detrás de mí mientras abría la puerta.

Me quede quieta por unos segundos para luego ignorarlo y salir de casa.

— ¡Leah te estoy hablando!— gritó esta vez mi padre haciéndome girar y mirarle directamente a los ojos.

— No me vengas ahora mismo hacerte el papel de "un padre preocupado por su hija" o algo así.— contesté seca — Por que nunca lo fuistes.

Vi en sus ojos irá y vi como poco a poco cerraba sus puños de cada mano controlando la molestia que tenía en ese momento por mi respuesta.

— ¡Entra ahora mismo aquí!

Ignoré sus gritos y seguí caminando a paso rápido hasta llegar al portal grande que protegía aquella mansión donde vivíamos.

El clima estaba bien aunque hacía un poco de fresco, no podía ir tampoco tan lejos, solo podía llegar a una pequeña ciudad que había a unos minutos caminando desde mi casa ya que la casa donde vivíamos estaba alejado de la gran ciudad del país donde ahí habían más cosas habitadas aunque mi padre nunca nos llevó ahí, por lo tanto,solamente me permitía llegar a una pequeña ciudad caminando.

𝐬𝐞𝐜𝐫𝐞𝐭𝐬 || (Tom Kaulitz)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora