7. ᴄᴏɴꜰᴜꜱɪᴏɴ

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Alcé mi mirada y me incorporé levantándome con ayuda de Elia.
Entre la multitud que había rondado aquella casa me encontré con la mirada imponente y desafiante de mi padre.

Estaba apartado de toda la gente que había, el solo se encontraba en un esquina observando todo.

— Será mejor que vayamos a casa.— comentó Elia agarrándome del brazo— Ya sabes cómo es el.

Deje de ver a Elia y volví a buscar con la mirada a mi padre pero no lo encontré.

¿Tan rápido se fue?

Elia me agarró del brazo más fuerte haciéndome saber que debíamos irnos ya a casa. Antes de irme le di un último vistazo a la casa de mi mejor amiga, vi como los policías intentaban sacar cualquier tipo de pruebas de que confirmen si había alguien más con ella.

— ¿Dónde dormiste?— preguntó mi hermana mientras caminábamos hacia la casa.

La miré y observé que no tenia muy buena cara, tenía la mirada perdida parecía que algo había sucedido ayer en la noche.

— Por ahí.— fue lo único que respondí

— A mi papá podrás mentirle pero a mi no Leah.— habló ella mientras abría la puerta de la entrada.

La miré y antes de volver a hablar y escuchar como se cierra la puerta de la casa recibí una bofetada en la mejilla izquierda haciendo caer al suelo.

— ¡Que sea la última puta vez que no duermas en casa!— gritó el

Me lleve la mano en mi mejilla por el dolor y ardor que sentía, asimismo, me intenté levantar con ayuda de Elia ya que había corrido a ayudarme.

— Desde muy pequeñas os enseñe a no escaparse de casa, les dije que la calle es demasiado peligrosa.— comentó el mirándonos a las dos— Dime, ¿dónde mierda estabas?— se dirigió a mi

Pensé en una buena respuesta, en una respuesta creíble y rápida en buscar pero fue inútil. No podía decirle que había estado durmiendo en una cabaña con un chico que había conocido hace una semana.

— Leah responde de una maldita vez.

Vi a Elia y ella me miraba con una mirada de miedo, tanto ella y yo conocíamos muy bien como era papá, un maldito violento que no controla ni su ira ni sus palabras.

— No me lo quieres decir por las buenas...bien.

Sin dejarme ningún Segundo para poder safarme de su agarré, el me agarró fuertemente del cuello y me acorraló con la pared haciéndome ser imposible tener un escape.

— ¿Donde mierda te habías metido?, ¿estabas con alguien?

Negué rápidamente, intentaba inhalar oxígeno pero era casi imposible, cada vez me apretaba más el cuello, sentía ya mis mejillas rojas.

— Papá suéltala, ¡la vas a matar!— Gritó Elia intentando apartar a mi padre

— ¡Tu cállate!— Espetó enfadado.— Quieres sufrir más, ¿no?—habló con un tono cínico yo negué e intenté balbucear y suplicando que me soltara.

Me soltó y antes de dejarme tirada en el suelo me dio otro golpe pero esta vez en la otra mejilla sintiendo sangre en mi labio inferior.

— ¡No!— gritó Elia esta vez poniéndose entre mi padre y yo.
Mientras Elia agarraba a mi padre de los hombros e intentando hacer toda la fuerza posible para apartarlo de mi, me hizo una seña de que me váyase.

Negué con la cabeza, no la iba a dejar sola, no aquí con el imbecil, Narcista de padre que nos había tocado.

Me llene de valor y de fuerzas y me levante del suelo para luego apartar a Elia de ahí .

𝐬𝐞𝐜𝐫𝐞𝐭𝐬 || (Tom Kaulitz)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora