LIGHT
Es pasada la hora de cenar y hace ya un buen rato que ha oscurecido aquí. Empieza a refrescar, así que hemos vuelto a la tienda para algo de abrigo.
- ¿Qué plan tienes para la cena? -le pregunto al ver que no hay muchos lugares abiertos.
-Tengo una idea. ¡Vamos! -responde entusiasmado.
Me agarra de la mano y empezamos a correr para no notar tanto el frío que hace en Escocia por la noche.
Seguimos corriendo como si alguien nos estuviera persiguiendo cuando, lo único que nos puede atrapar, son las ganas y el deseo que nos tenemos.
Hemos acabado en una tienda 24 horas cerca del Kelvingrove Park.
Entramos y sigo a Lennon, que tiene muy claro lo que está buscando.
- ¿Len?
No hay respuesta.
- ¡Len! -al final he chillado. Me pongo un poco nervioso cuando van tan deprisa y no sé nada de lo que vamos a hacer.
Ahora estamos uno delante del otro en la zona de congelados. Len me mira un poco asustado.
-Perdón -me disculpo al fin.
- ¿Estás bien? -responde con un calmado todo.
-Sí, perdona. Me pongo un poco nervioso hacia tanta prisa e incerteza -aclaro. -No era mi intención gritar. Perdóname.
-Perdóname tú a mí. Quería que hiciéramos un pícnic -me guiña el ojo. - ¿Qué te parece la idea?
-Estupenda -y lo abrazo.
LENNON
Conmigo cargo una bolsa con un par de sándwiches con lechuga, mayonesa y jamón dulce; patatas chips; Sprite y helado de menta y chocolate.
Sí. Menta y chocolate. Nunca pensé que fuéramos a tener el mismo gusto en helados también.
-Aunque cuando lo combinas con helado de canela, tocas el cielo -suelta riendo por debajo de la nariz.
Se lo ve feliz.
-Lo prefiero con coco acompañándolo -digo yo riendo al ver su mirada de lado que me indica que retire lo que acabo de decir.
-Deberemos probar coco y canela pues -finaliza la conversación a la vez que me ayuda a tender en el suelo el pareo que llevaba en la mochila.
LIGHT
Estamos tumbados viendo las estrellas. Mi cuerpo está situado de tal manera que mis pies tocan el árbol donde reposa la mochila y las bolsas donde cargábamos la cena ahora ya terminada.
Len está situado al revés que yo, haciendo que nuestras cabezas estén a pocos centímetros de distancia.
-Me gusta mucho mirar las estrellas -rompo nuestro agradable silencio. -de pequeño mis padres me llevaban a la montaña, donde se apreciaba su brillo a la perfección.
-Es una lástima que la contaminación nos impida ver tal arte natural -se indigna Len.
Y es cierto, aunque desde aquí no se aprecia tan mal. Glasgow está haciendo que me enamore. Y no solo de ella.
LENNON
-¿Sabes por qué se llama "Via Láctea? -pregunto para intentar impresionarle.
-Por el derrame de leche que dejó el dios al separarse bruscamente del pecho de su madre, ¿no? -responde y me mira.
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Luna
Romance¿Qué harías si el amor de tu vida resultara ser el músico que, escapando de tu pasado, encontraste en el tren camino a la incerteza?