minutos más tarde, y creo que está de más decir obviamente, dejé que soobin escapara. y digo escapar porque apenas le dije que podía marcharse él sólo tomó su mochila y salió corriendo como si su vida dependiera de ello. y mientras lo veía dar zancadas por el asfalto caliente de mediodía, pensé que soobin era un imbécil.
— ¿yeonjun? — cuando escucho su voz llamándome a mis espaldas, siento muchas ganas de seguir a soobin por donde había desaparecido corriendo como un gato gordo. pero no lo hago. cierro la puerta frente a mí y me quedo un momento mirándola, pensando. haciendo tiempo, en realidad. — ¿puedes mirarme?
— no creo. — admito en voz baja, y estoy siendo plenamente sincero con él. creo que si me volvía a ver a beomgyu en este instante, lo más seguro es que mi cabeza explotara o comenzara a llorar frente a él. y, objetivamente, prefería lo primero.
— no seas...— detiene lo que sea que fuera a decir, supongo que no quería insultarme en este momento. siento que su voz se vuelve más suave cuando habla de nuevo. — ven. siéntate conmigo.
tomo mucho aire, mucho aire, y suelto la perilla de la puerta. cuando me doy vuelta y le veo sentado en el sillón, siento un cosquilleo en la cabeza... pero probablemente sean piojos o el pensamiento y el miedo de estar solos picando en mi cerebro.
me siento, no a su lado, sino al otro extremo del sofá. él está al lado de uno de los reposabrazos y yo estoy al lado del contrario, aun así, siento como si estuviera justo al lado mío. a centímetros de mí. probablemente sea el peso de su presencia recayendo en mí.
— faltaste al insti.
— tú también. — cuando le miro, él no me mira de vuelta. seguramente porque sabía que soobin habría sido lo suficientemente informativo (por no usar la palabra correcta, que es chismoso) como para decirme aquello que no quería que yo supiera. — te escapaste con minjeong de nuevo.
— ¿y piensas regañarme de nuevo? — el tono de su voz no me gusta. altanero. no se supone que beomgyu me hable así. sacudo un poco la cabeza, y quizás se ha dado cuenta que me ha hecho sentir mal.
— estás lo suficientemente grande para ser regañado— me remuevo sobre el sofá, como alejándome de él aunque esto es lo más lejos que podemos estar por ahora. —, mucho menos por mí.
— te he hablado mal, ¿verdad? — no le miro y mucho menos le respondo, porque él lo sabe, no necesita que se lo diga. escucho cómo suspira. — perdóname.
— mhm. — él no lo ve, pero yo estoy apretando entre mis dedos el borde de la manta que antes teníamos soobin y yo. porque estoy muerto de nervios. sé que ni siquiera hemos llegado a la mitad de nuestra conversación y eso es lo que más me frustra.
— bien, entonces. — siento cómo se remueve un poco sobre el sofá, acercándose a mí, pero cuando me vuelvo a mirarle deja de moverse. y ahí está esa comunicación telepática que tenemos él y yo. — sólo quería disculparme contigo.
— está bien. — y aunque no está bien, no sé qué más decirle. ¿qué más le puedo decir? de todas formas. sí, beomgyu, en realidad está bien porque, ¿sabes qué? estoy psicóticamente enamorado de ti y me encantaría que me besaras como me besaste todo el día todos los días.
sí, no le diría eso.
— no, no está bien. — veo de reojo cómo oculta su rostro entre sus manos y se queja en voz alta. muy alto. — lo siento.
— ¿por qué te estás disculpando? — parece que mi pregunta le toma por sorpresa, y está bien porque yo tampoco he premeditado mis propias palabras.
— ¿cómo que por qué? — trago seco.
— ¿vamos a ponernos así ahora? — por cómo me mira puedo saber que no sabe a qué me refiero. y yo tal vez he comenzado a hablar sinsentidos, quizás ya mi cabeza haya estallado en el salón y esté imaginándome todo esto. — quiero decir... ¿vamos a tratarnos como si fuéramos desconocidos?
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𝗹𝗼𝘃𝗲 𝘆𝗼𝘂 𝘁𝘄𝗶𝗰𝗲. yeongyu
Random❛ 'cause deep inside I wanna be her. ❜ o donde yeonjun repentinamente comienza a tener sentimientos desconocidos hacia su mejor amigo, choi beomgyu. 𝗠𝗔𝗥𝟮𝟴𝟮𝟯 © 𝗸𝗸𝘂𝗹𝗯𝗲𝗼𝗿𝗮