Después de horas de búsqueda en internet y de revisar algunos periódicos que recogió de camino a casa, Daniel comenzó a atar cabos sueltos, llegando a varias conclusiones importantes sobre el mundo en el que ahora vivía.
Primero: Este no era el Universo Cinematográfico de Marvel (UCM). ¿Cómo lo sabía? Fácil. La Fundación Baxter existía aquí, y que él supiera, ese lugar nunca había aparecido en las películas de Marvel. Este mundo parecía una mezcla entre diferentes versiones del universo Marvel que conocía, lo cual complicaba las cosas.
Segundo: Tony Stark, aunque similar al de las películas, no era exactamente el mismo. Este Tony tenía unos 30 años, más joven y posiblemente menos experimentado que la versión de las películas. Era un Stark diferente, con un futuro aún incierto.
Tercero: No había noticias de Spider-Man. Esto lo dejaba con dos opciones: 1. Peter Parker aún no había sido mordido por la araña, o 2. Peter Parker no existía en este mundo. Para resolver esto, tendría que investigar más a fondo, tal vez visitando la escuela de Midtown en Queens para ver si Peter Parker estaba inscrito.
Cuarto: El Capitán América sí había existido. Esto le daba un poco de esperanza, al menos una figura central del universo Marvel estaba presente. Era un punto a favor.
Quinto: No tenía poderes. Daniel, un ciudadano normal sin habilidades sobrehumanas.
- Qué decepción - pensó, como si fuera una broma del destino. Sin embargo, se negó a aceptar esta realidad. ¿Cómo era posible que alguien que había recuperado sus recuerdos de una vida pasada fuera simplemente... ¿normal? Tendría que seguir investigando, poniendo a prueba su cuerpo y su mente para ver si había algún poder oculto esperando ser descubierto.
Por otro lado, Daniel comenzó a notar algo extraño, su inteligencia parecía haber aumentado. No estaba ni cerca del nivel de las grandes mentes de este mundo, pero definitivamente se sentía más agudo, más rápido. Mientras buscaba información en internet, se dio cuenta de que su capacidad para memorizar y comprender conceptos había mejorado significativamente. Al principio, apenas sabía cómo navegar en la web, pero conforme pasaban las horas, lo hacía con una fluidez natural. Su capacidad de lectura y comprensión se había incrementado a un nivel sorprendente.
- Quizás - pensó, - aquella experiencia cuando desperté mis recuerdos hizo que mis capacidades cognitivas aumentaran, tal vez como una forma de ayudar a mi cerebro a procesar toda mi vida anterior. - Al fin y al cabo, acababa de adquirir 35 años de información en un corto período de tiempo, y, sin embargo, estaba completamente bien. Esto le hizo darse cuenta de que debía seguir alimentando su inteligencia con más conocimiento si no quería que su cerebro se oxidara.
Volviendo al tema principal, Daniel se dio cuenta de que estaba justo al inicio de la era dorada de los héroes. Sabía que en los próximos años, personas con habilidades extraordinarias comenzarían a aparecer. Sin embargo, él no estaba dispuesto a quedarse atrás. Decidió que, si bien no tenía poderes, bien podría acumular un gran poder económico. Al fin y al cabo, el dinero es poder, y en un mundo como este, sería un recurso invaluable.
- Ahora que lo pienso, el conocimiento también es poder - se dijo a sí mismo, sonriendo. - Parece que solo tendré el poder de ser alguien inteligente y con dinero. No está nada mal, considerando las alternativas.
Con esta nueva perspectiva, Daniel comenzó a trazar un plan. Necesitaba conseguir alguna habilidad sobrehumana si quería sobrevivir en este peligroso mundo. Aunque el universo Marvel le fascinaba, también era extremadamente peligroso. Alienígenas, dioses, mutantes, entidades cósmicas y celestiales eran solo algunas de las amenazas a las que tendría que enfrentarse. Y luego estaban las incursiones, eventos que pondrían en peligro no solo la Tierra, sino toda la realidad.
- Algo está claro - pensó Daniel. - No me agradaría que este mundo fuera reiniciado, y con ello mi existencia borrada. Nadie asegura que si el mundo se reinicia, volveré a despertar los recuerdos de mi vida pasada. Quizás nunca lo haga, y la persona que soy ahora nunca exista. Definitivamente no me gustaría eso.
Después de mucho pensar, Daniel decidió que la mejor opción era obtener los poderes de uno de los seres capaces de viajar entre realidades sin causar incursiones. Su objetivo, el centro de la red de la vida y el destino, conocido comúnmente como nuestro amigable vecino, Spider-Man.
- Si hay alguien que debe proteger nuestra realidad, prefiero ser yo y no dejarlo en manos de un adolescente con problemas de confianza que no está dispuesto a cruzar la línea cuando es necesario - reflexionó. Además, creía que Peter Parker sería de mucha más ayuda usando su inteligencia que sus puños. Daniel se encargaría de los golpes. A cambio, se aseguraría de que Peter tuviera todo lo que siempre deseó: fama, fortuna y amor. Convertiría al joven en su protegido y lo mantendría alejado de la vida complicada de los héroes.
Con un plan en mente, Daniel sabía que era hora de comenzar su nueva vida. No sería fácil, pero estaba decidido a aprovechar esta segunda oportunidad. La vida de alguien reencarnado en el universo Marvel estaba a punto de comenzar.
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Fin del capitulo