I-El duelo (Crowley)

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Y ahí estaba Crowley, conduciendo sin rumbo y con mil pensamientos pasando a cada segundo delante suyo.
Sus ojos se mantenían fijos a la carretera, pero su mente sólo podía recordar como se sentía.
Al parecer ese sentimiento también lo tenía su Bentley, o eso daba a entender porque ya llevaba un buen rato la canción "Love of my life" de Queen sonando una y otra vez en la radio.

Aún no podía creer que Aziraphale, su ángel, eligiera ese camino antes que el suyo
¿Que debía hacer ahora? ¿A donde debía ir? su mente estaba fuera de si, aún recordaba los labios del ángel en los suyos y ese olor a dulce que sus cabellos y ropa dejaban salir.
No sabía a dónde ir, solo le apetecía conducir y conducir hasta que el propio coche pidiera un descanso, pero esa "meta" se vio interrumpida por un bar que hacía esquina a una de las calles donde nadie solia pasar (y menos a esas horas)
Crowley bajo del coche y se dirigió al interior de mala gana, se sentó en una de las muchas mesas y espero hasta que una joven rubia se acerco a él.

-Hola! Es raro ver gente a estás horas por aquí ¿que desea?

-5 botellas de vino y...quizas 2 de algún licor que nadie quiera porque sabe a rayos.

La camarera miró desconcertada a Crowley, cosa que es normal.

-¿Está usted bien? Me parec-

-Me da igual lo que te parezca, solo haz tu trabajo y dame lo que le pido -exclamó crowley claramente exaltado-

La joven miró al suelo al instante y solo se precipitó a afirmar con la cabeza.
En menos de 5 minutos Crowley ya tenía todo lo que había pedido encima de la mesa.

-Ahí tiene señor, disculpe las molestias, es obvio que ha tenido un mal día

La mirada del demonio se paró en la joven.

-Sé lo que es un mal día, quizás debería hablar con alguien cercano...
La camarera como sabiendo que le contestaría decidió irse y dejar con la palabra en la boca al demonio.

Al cabo de un rato Crowley ya había bebido todo lo que había pedido y se había marchado directo al coche, donde se encontraba hablando con una de sus plantas sobre viejos recuerdos (recalcando que se encontraba con la mayor borrachera de su vida encima)

-Y, y te acuerdas de ese día donde invité al ángel a comer en el Ritz porque habíamos acabado de preparar su biblioteca? Se veía tan...tan...majestuoso comiendo ese postre...

Tardó un buen rato en darse cuenta de que todo eso probablemente había terminado para siempre, al recapacitar esa idea colocó sus manos en su cara y se apoyó en el asiento.

-Oh ángel, porque me has hecho esto
¿solo me hice ideas erróneas todo este tiempo?

Crowley sintió sus ojos acuosos, y eso solo lo hizo enfadar por sentirse tan "debil"
Acto seguido empezó a golpear el volante mientras sin darse cuenta, el clima había cambiado bruscamente y había comenzado a llover.

Después de un largo rato, sintió como sus ojos le pesaban y se quedó dormido en el propio coche, deseando desaparecer para calmar ese sentimiento de vacío que tenía.
Solo deseaba poder calmar sus sueños, ya que en cada uno de ellos, Aziraphale era el protagonista.

El día se hizo, y los primeros rayos de la mañana despertaron al demonio, que se encontraba recostado en su coche.
Al abrir los ojos, notó un dolor de cabeza muy potente.

-Arg...me olvidé de vaciar mi estómago anoche -pegó un suspiro y salió a estirar las piernas- me siento como si mil bisontes hubieran pasado por encima mío...

Allí se encontraba, en un sitio que no conocía muy bien, solo, y sin remota idea de que haría ahora.
Se metió en el coche cuando notó la presencia de alguien más a su lado.

-No es un buen momento para que te presentes a mi lado ahora Shax.

-No me hables así Crowley, soy la nueva jefa recuerdas? He echado a más de un demonio que me había molestado en mis tiempos bajos.

-Que quieres.

-Alegra esa cara, he venido porque quería darte las nuevas, pero por el olor a alcohol de tu coche puedo predecir que ya las sabes...puaj

-Bien.

-No estás feliz por "tu Ange-"

-No te atrevas a nombrarlo -la mirada de crowley fulminó automáticamente a Shax.

-Uhh...ya veo lo que pasa, será gracioso ver como todo esto se desenvuelve.
Verás he estado pensando y he llegado a una conclusión...debido a que hemos encontrado a Gabriel...

-Belcebú lo encontró, tu solo hiciste el ridículo.

-Bueno, como sea, quería darte las llaves de tu antiguo apartamento, las pedías el otro dia no? Seguro que tu coche lo celebra.

Crowley miró directamente a Shax

-A que viene todo esto?sin buscas ayuda en el infierno déjame decirte que no pienso volver a trabajar para el, dejé claro mi lugar y eso no ha cambiado.

-No busco nada por ahora, solo lo hago para librarme de tus cartas, estoy harta de ver facturas.
Ahora cogelas quieres?

De un suspiro, el demonio tomó las llaves y miró hacia ellas.

-No sé qué diablos te pasa, pero espero que te pase rápido, estas demasiado aburrido.

-Largo, tengo cosas que hacer.

-Has hablado ya con Aziraphale o también te vas a ir con el?

-He dicho...largo.

-Por satán...volveré cuando estés más simpático, adiós traidor

Cuando Shax se fue Crowley se quedó un rato más mirando a las llaves, hasta que decidió conducir en dirección a su antiguo piso, todos merecían un descanso adecuado.

Old times- Aziraphale x CrowleyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora