Capítulo 5

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(Narra ___)


Al llegar al comedor, casi ni se podía hablar por todo el ruido. Sin embargo, eso no fue lo que más me importó.

-Puta madre ¡hamburguesas! -grité y empecé a correr hacia el lugar donde las servían. No tengo ni idea donde quedaron Gonza y Rubén, pero no me importaba, quería hamburguesas. Cuando encontré una mesa libre, me senté a comer, sola. Total ya tenía a mi compañía en frente mío, en un plato.

Al rato Rubius llegó y se sentó a mi lado, con un plato rebosante de hamburguesas e inmediatamente empezó a comer.

-Che, nadie te corre, no te preocupes -reí. Me miró unos segundos y volvió a morder su hamburguesa.

-¿Y Gonzalo? -pregunté, pues no lo veía por ningún lado.

-¿Tiene novia? -preguntó Rubius, y negué con la cabeza - Ah, pues entonces está consiguiéndose una.

Me atraganté con el jugo y miré hacia donde Rubius me señaló. Y ahí estaba, mi hermoso hermanito, besándose con una chica de pelo rojo y lacio. Luego me reí, mientras Rubius me miraba confundido.

-Qué raro, él prefiere a las rubias -sonreí mientras comía mi segunda hamburguesa.

-¿No te importa? -preguntó Rubius.

-Nah, esa no le dura ni una semana -comenté mientras miraba a mi hermano, que se iba con la chica de pelo rojo de la mano -Te apuesto lo que quieras a que terminan garchando. No te aconsejaría ir a la habitación -dije sonriendo. Rubius soltó una carcajada.

-Bien ¿qué quieres apostar? -preguntó mientras terminaba su hamburguesa.

-Bueno... ¿qué tal un frasco de Nutella? -pregunté mientras adoptaba una pose pensativa. Rubius sonrió.

-Okey, si terminan "garchando" como vos decís, te compro un frasco de Nutella, si no, me tienes que besar -sonrió.

-Okey. -Sonreí. Nos estrechamos las manos y salimos del comedor. Cuando llegamos a nuestra habitación, nos dedicamos a escuchar detrás de la puerta.

Pasaron unos minutos y sólo se oyeron risas y voces. Definitivamente estaban charlando de algo. Comencé a preocuparme. Unos minutos después, oímos pasos y corrimos a escondernos. Los vimos salir, iguales a como estaban antes. No había indicios de que hubieran echo algo.

-Mierda -murmuré enojada. Rubius me miraba sonriente.

-Te gané.



Me tenté con el gif de arriba, qué te digo.

Ella (youtubers y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora