Los Wei llegaron a la campiña canadiense, vieron la casa de los Wang, caminaron al interior de la propiedad, sobre un auto estacionado en el patio se veian los cuerpos de los patriarcas de la familia, Zixuan corrió a auxiliar a su esposa.
Ella gritaba dentro del auto con varias heridas en su cuerpo, como pudo la saco del vehículo, la cargo hasta una de las camionetas en las que llegaron hasta la casa, lo siento señores Wei, amigos debo llevarla a donde puedan atenderla, declaró el Jin a los que iban con el.
Los Wei corrían por toda la casa buscando a su hijo, Hausiang con algunos empleados buscaban en los alrededores por si el Wei hubiera querido escapar y estubiera herido, todos acompañaban a los hombres estaban enfocados en encontar al esposo de sus jefes solo de verlos tan desesperados, por encontrarlo les hacía entender el profundo amor hacia ese doncel.
Lan Wangji caminaba por los alrededores de la gran casa, observaba todo el destrozó que había en el camino, estaba preocupado por la cantidad de partes de cuerpo que se veían por todo el camino hacia el granero, cada que veia una pierna, un brazo un trozo de carne o viceras se preocupaba más pero conservaba la esperanza de que no fuera su amado quien estubiera desmembrado por ahí.
Subió por las escaleras llenas de sangre se sostenía de los barandales para no resbalar por el suelo, oía voces en el techo, su Wei Ying estaba hablando con alguien, pero no oía otra vos, subió más rápido, el chico sostenía una conversación muy dolorosa con lo que quedaba de ese hombre que lo robó durante tantos años de su lado.
Después de terminar de maldecir los restos de ese hombre, se acercó al bordo del tejado, Wei Ying lloraba , gritaba y maldecia, hablaba de acabar con el producto de su dolor, el quería deaaserse de un rastro de su dolor durante todos estos años de cautiverio...
Wei Ying por favor no lo hagas te lo pido, déjame llevarte al hospital, mi amor saldremos de esto juntos por favor, ven baja de ahí, cariño !!! te hemos extrañado tanto, tus hijos preguntan por ti, mira allá están tus padres que aún no te han abrazado, están ansiosos por hacerlo, alejate del bordo corazón, por favor!!!!
El doncel quería acabar con todo lo que le hacía daño, aunque terminara con su propia vida, de todas maneras de que servía la vida lejos de su familia, de sus hijos y sus esposos, que lo amaban tanto, pero no podía hacerlo, pues en su cabeza resonaban las palabras de su Lan Zhan.
Su amado esposo que sacrificó tanto por ellos, que siempre los amo tal como eran , para el no había hombres más perfectos que ellos, pero solo eran jugadas de su cerebro por que obviamente el no estaba ahí detrás de el, rogándole que se bajara del granero para ir a un hospital, más sabiendo que en su vientre tenía el fruto de la traición.
Ese maldito hombre que lo tomo sin su consentimiento, que abuso de su poder para preñarlo, como era posible que su amorosos esposos lo perdonarán después de haber entregado su cuerpo a otro hombre eso era inaudito....deja de jugar con mi mente,gritaba Wei Ying, alejate.
Mi amor no estas soñando, estamos aquí por ti, ven baja de ahí,decía Lan zhan de manera firmé, yo no puedo seguir con esto, perdí a mi familia ellos, ya son felices sin mi, mis hijos tienen una nueva madre, mis esposos me olvidaron ellos... Ellos...confrontaba Wei Ying.
Sintió los brazos de ese hombre, su respiración y calor, era real , su esposo estaba ahí y lo amaba, lo esperaba, de verdad lo quería devuelta a pesar de estar cargado de otro hombre, de haber sido tomado todos estos años por el, a pesar de ser tan inmundo como para tener en su vientre a un bebé que no eran de sus esposos.
Se sintió tan bien que dejó que su conciencia se apagará, por fin había acabado todo ahora le dejaría a la vida tomar su camino de nuevo....
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En el hospital los Wei vigilaban a su hijo, los bebés que llevaba en su vientre milagrosamente fueron salvados, por poco mueren dentro de el, pero gracias a su esposo el hombre que lo cargo en brazos y lo llevo hasta una clínica donde lo atendieron a tiempo, ahora estaba ahí descansando después de la operación para sacar a sus bebés de su vientre, los esposos del joven hablaban con la única sobreviviente de los jiang.
Yanli lloraba la muerte de su familia pero también sabía que no podría culpar al doncel de la masacre, pues fue su inconsciente el que hizo todo ese desastre, por eso cuando reaccionó en el cuarto de hospital, pregunto a su madre por sus hijos recién nacidos.
Pensado que venía de regreso de donde su amigo jiang Cheng lo sito para festejar su compromiso con ese doncel del que estaba enamorado, osea su mente regreso al día en que lo dieron por muerto, eso era lo mejor, para Wei Ying para sus esposos y para los que ya no están...
