CATORCE

2.1K 183 6
                                    

Mariela

—¿Dónde has pasado la noche?

Tadeo se congela, no hemos hablado nada de lo que le contó a Mario anoche. Él abre la boca para hablar, pero su hermano levanta una mano callándolo al momento.

—Tú cállate— le dice Mario a Tadeo— Mariela contesta.

—¿Desde cuándo tengo que darte explicaciones de lo que hago o dejo de hacer?

—No tienes que hacerlo, pero quiero comprobar cuán mentiroso es mi hermano y hasta dónde estaría dispuesto a llegar para protegerte.

—Mario, hijo, he pasado la noche en el otro apartamento, necesitaba dormir allí una vez más.

Mario nos mira a Tadeo y a mí con los ojos entrecerrados, luego se da la vuelta y vuelve por donde ha venido sin decir nada más. Tadeo suspira.

—¿Le dijiste que estaba ahí?— le pregunto.

—Sí. Má, ¿por qué sigues ocultando tu relación con James si ya hay mucha gente enterada?

—Porque no sé cómo va a reaccionar Mario.

—Que sigáis siendo felices a escondidas— contesta sonriendo.

Le quito mi bolso de ropa del hombro, luego subo las escaleras en dirección a mi habitación, necesito darme una ducha y pensar, pensar mucho. Todo lo que James dijo anoche sobre nosotros, se quiere casar conmigo. No sé si estoy preparada para eso, nunca me ha importado lo que la gente diga sobre mí, pero sí me importa lo que dirán sobre él. Lo juzgarán por estar con una mujer más mayor que él, quizás a él no le importe, pero a mí sí, no quiero que digan nada sobre él. Me siento en el borde de mi cama, la puerta de mi habitación se abre, Carmen, Gala y Sandra entran sonriendo.

—¿Cómo ha ido?— me pregunta Sandra.

Sonrío débilmente.

—Bien— contesto.

Se miran entre ellas, luego me miran a mí, Sandra se sienta a mi derecha y Carmen a mi izquierda, Gala se pone de rodillas en el suelo con sus manos en mis rodillas.

—¿Qué ha pasado?— pregunta Carmen— ¿James te ha rechazado?

—No, ha sido una noche genial, en serio.

—¿Entonces qué pasa?— me pregunta Sandra.

Me encojo de hombros.

—Mariela, ¿qué pasa?— pregunta Gala.

Las lágrimas pican en mis ojos.

—Dijo que quería casarse conmigo.

Jadean las tres a la vez.

—¿Y eso es malo mi niña?— me pregunta Carmen.

—Sí.

—No estoy entendiendo nada— dice Sandra.

—Tengo casi treinta y nueve años, él va a cumplir los treinta y tres.

—¿Otra vez con eso?— me pregunta Sandra enfadada— A James no le importa tu edad.

—Cariño, no le importa ahora, ¿qué pasará cuando quiera tener un hijo? Yo no puedo dárselo.

—¿Por qué?— me pregunta Gala— No eres estéril.

—Tengo casi cuarenta años, un trasplante de riñón y ninguna gana de volver a ser madre, mi corazón no ha sanado.

Gala agacha la cabeza.

—Es por Sofía— dice.

—Perderla ha sido lo más duro que me ha pasado nunca— mi voz se rompe— No soy capaz de verme criando a otro niño, pensaré en ella constantemente y eso no es justo para nadie.

FRÁGIL #1.3 [Disponible en físico]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora