𝐹𝑎𝑙𝑙𝑖𝑛𝑔 𝐹𝑜𝑟 𝑌𝑜𝑢 || Meredith Grey × Reader [ᵍʳᵉʸ'ˢ ᵃⁿᵃᵗᵒᵐʸ]

LI

__________ Watson

Mis manos temblaban y sudaban.

Ahora, en estos momentos, tenía en mis manos dos jodidos sobres que me hacían sentir tremendamente mal.

En uno estaban los resultados de mi examen, los cuales definirían si pase el internado o no.

En el otro estaba una jodida invitación a una maldita boda.

¿De verdad ya había pasado tanto tiempo como para que ya hubiera llegado la hora de la boda de Meredith y el imbécil de Riggs?

Mis preocupación por ambas cosas había sido opacada en mi vida o, por lo menos, de mis pensamientos por Edgar. Él ocupaba mis pensamientos todo el tiempo. Había más cosas que ocupaban como mi tiempo como mis pensamientos.

Ahora, que tenía ambas cosas en mis manos, me pude dar cuenta de cuántas cosas habían pasado a mi alrededor y que yo no había tomado en cuenta o, simplemente, no les había dado muchas importancia y las dejaba como «dato equis» en mi vida.

Solté el aire que, sin darme cuenta, había comenzado a retener en mis pulmones. Me senté en la banca que estaba entre los casilleros y me puse a pensar en todas esas cosas. En esas pequeñas cosas que estuve evadiendo por convertirme en un maldito fantasma. En una persona muerta en vida.

Ya iba a ser la boda de Meredith.

«Esa sí que es una jodida boda express» dijo la voz de mi cabeza.

Y una punzada horrible llegó a mi pecho. Se sentía como si alguien estuviera apuñalando muy lentamente en mi pecho, logrando que el apuñalamiento llegará hasta mi corazón.

Y una lágrima salió de mí.

Que hermosa forma de terminar mi jornada de trabajo y que hermoso regalo de cumpleaños.

Y algo se prendió dentro de mí. Hice a un lado la tristeza y la melancolía y le di paso al enojo. Esto ya era algo que había pasado los límites.

Así que con toda esta furia que sentía ahora salí de los vestidores y di camino a la sala de titulares. Esperaba que aún siguieran ahí.

Sentía que todos me veían por como iba yo caminando. De verdad que iba enojada.

En cuanto llegue a la sala de titulares ni siquiera me tomé el tiempo de tocar la puerta, yo simplemente la abrí y está por la fuerza que utilice pegó contra la pared.

-__________, ¿qué te pasa?-pregunto Mark que estaba ahí pero lo ignore.

Aún estaban aquí Riggs y Grey. Bien, era momento de soltar.

-Pude haber aguantado cualquier cosa-dije ahora caminando hacia ellos-, pero esto ya es una jodida patada en el trasero-dije mostrándoles la invitación.

-Vaya, veo que sí te llegó nuestra invitación. ¿Qué te pareció?-pregunto sin descaro Riggs, lo que hizo que me enojara aún más.

-Usted es un imbécil. Ya me tiene harta con este maldito juego suyo. Ya tiene a Meredith atada a usted todo por unos estupidos chantajes, si eso era lo que tanto quería qué jodidos me sigue fregando a mí la vida.

-No me has dado tu opinión sobre la invitación-hablo nuevamente Riggs.

-Su invitación es una mierda, así que agarre cada una de las invitaciones que hizo hagalas rollito todas y metaselas por dónde le quepan-le grite-. Ah, y que no le falte está-dije aventandole la invitación que tenía yo y con eso me di la vuelta y comencé a caminar para salir de la sala de titulares.

Pero tal parece que Riggs se ardió por lo que le dije y me siguió para pelear.

-¿Qué acaso no te atreves a ir a ver cómo Meredith se casa conmigo? Mira que en lugar de enojarte por esto, deberías de estar eternamente agradecida con ella. Está sacrificando su vida todo para que tu carrera mediocre como cirujana no se hunda. Aunque yo creo que tú sola te vas a hundir.