-Primita linda, ¿no te alegras de verme?- dijo Felipe, mi primito hermoso, que me cae tan bien, nótese mi sarcasmo.
-¿Feli?- dijo mi mamá sorprendida, luego de reconocer que era el, lo abrazó fuerte- eres tú, pero...cambiaste mucho...estas más...guapo.
-Ay tía, no hable más que me sonrojo- dijo imitando un tono femenino. Luego me miro-¿Y tú, estúpida? ¿Acaso no me abrazas?- fui donde él y lo abrase con toda la fuerza que tenía- ay...me...dejas...sin...aire- lo solté, ya que se estaba ahogando.
-Feli, no te reconocí, estas tan...diferente, ya no pareces ese primo todo desordenado, además, parece que has visitado un gimnasio y te dejaste el pelo largo y te pintaste las puntas de un ¿azul eléctrico?
-Tan detallista como siempre, Maki- él era el único que me decía Maki, no le gustaba decirme por mi primer nombre.
-¿Que haces aquí, Feli? ¿no estabas en una universidad de Europa?
-Como usted dijo: estaba. Me salí de la carrera que estaba estudiando, descubrí que ya no me gustaba eso de ser abogado, de un momento a otro lo encuentre demasiado aburrido. Y esto de mi cambio de look es una larga historia- sonrió estúpidamente, como sí recordará a alguien.
-Bueno yo los dejó, porque tengo que volver al trabajo, ya que tuve que venir a hablar con alguien que se portó muy mal- mi mamá me fulmino con la mirada- vuelvo más o menos en dos horas, no se desórdenen, Feli, cuida a la Coni, chao- y salio por la puerta. Felipe se sentó en el sofá y yo lo emite, y me quedé mirándolo.
-Me vas a contar que te pasó, porque no cualquiera se sale de su carrera y se cambia de look.
-Ay, Makita, yo diría: que no me pasó- sonrió.
-¿Y a que o a quién se debe esa sonrisa?
-Bueno te contaré la historia completa, no te aburras- y empezó a contar su historia, dijo que conoció una mujer y se enamoró; que de un momento a otro se aburrió estudiando y se salió; que se habían vuelto novios con Sofia, la mujer que conoció; que ella lo ayudó a verse más guapo; y toda esa historia de enamorados.
-¿Y como la conociste? A Sofia- le pregunté cuando término de contar su historia.
-En una fiesta, Eric, un amigo mío, me obligó a ir, hay la conocí, empezamos a hablar, y me enamoré de ella.
-Debe ser una persona increíble, ya que no cualquier persona te hace cambiar tanto.
-Sí y además vine por lo que pasó, me refiero a la abuela. Me imagino que no lo has pasado bien. Quería pasar un tiempo...-lo interrumpió el sonido de una llamada de celular, lo saqué de mi bolsillo, vi que era el idiota de Dan que me estaba llamando.
-¿Para que me llamas?- le dije cortante.
-¿Podrías ser un poco más simpática?
-Voy a cortar sí no me dices que quieres, Dawson.
-Sólo abre la puerta de tú casa y veras que quiero- y corto la llamada.
-¿Quién es Dawson?- preguntó Felipe. Pero lo ignoré y fui a abrir la puerta. Y como lo pensé, hay estaba.
-Hola, linda- dijo sonriendo.
-¿Que haces aquí?
-¿Acaso no puedo venir a ver a una compañera de instituto?
-Daniel, dime que quieres, no tengo mucho tiem...- me interrumpió la voz de Felipe.
-¿Que haces aquí...- se quedó callado cuando vio a Daniel- ahh, ahora entiendo- me sonrió. Daniel me miro con el ceño fruncido.
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Completamente Diferentes
RandomElla era una chica normal, bueno no tan normal, aprendió a disfrutar de la vida sin importar lo que dijeran de ella. Tenía un pasado triste, pero todos esos problemas la isieron fuerte, la isieron madurar a temprana edad. ¿Pero que pasa cuando llega...