🌸MI PRINCESA DE FLORES🌸 <<SATZU>>

cap 30

...

Tzuyu estaba parada en la fila del aeropuerto, era apenas las cinco de la madrugada y no ignoro el sueño que tenia, su hermano la boto de la cama a las cuatro y media sin oportunidad de poder desayunar o lavarse el rostro salieron rápidamente de la casa. Esperaba a que Yoongi llegué con el cafe prometido como desayuno, la mujer del escritorio ya estaba empezando a llamar a la gente y como una niña pequeña en la fila del mercado esperando a su madre que buscaba algo que le falto, entro en panico mientras mas avanzaba el montón de gente.

De verdad odiaba cuando su hermano se tomaba las cosas importantes como tanta ligereza, tres personas faltaban para que ella llegara al frente, busco entre su bolso su pasaporte y el boleto hasta escuchar la voz del chico a lo lejos, caminando tan tranquilo miro a su hermanita con una sonrisa.

-lo prometido, este es tu cafe y te compre un pastel- se percato de la fila y sin entender, pregunto -ya es nuestro turno?-

-solo saca tu pasaporte y el boleto- suspiro, guardo el pedaso de pastel envuelto en una bolsa dentro de su cartera.

Entregaron los boletos, DNI y pasaportes a la señorita del mostrados quien los hizo pasar, mientras buscaban sus asientos Yoongi se dio cuenta que las azafatas del lugar estaban ofreciendo desayunos a los pasajeros.

-quieres algo más que el pastel?- pregunto a la chica al lado suyo.

-no, ya no puedes salir- respondió, acomodo sus cosas en el asiento y por curiosidad miro al lugar donde su hermano estaba viendo -eres un estúpido-

El pelinegro mayor pidio una pequeña porción de tarta, la menor no queria nada haci que la azafata se fue a preparar su pedido, en quince minutos volvio a entregarle su plato, Tzuyu abía terminado lo que su hermano le entrego antes de subir al avión. El viaje seria relativamente largo por lo que sólo queria dormir, los dos hermanos tenian muchas diferencias incluso podian llegar a chocar con los diferentes gustos pero una cosa compartían ellos dos, les gustaba dormir y era algo que hacian siempre juntos, como ahora.

...

Como esperaba, el viaje fue largo o almenos para los demas lo fue haci, bajando del avión junto a Yoongi buscaron un taxi que los llevara, no sabian donde se ivan a quedar lo unico que si sabian era a donde estaban por ir; respirando el aire que tocaba su rostro, Tzuyu miro mejor el paisaje de la ciudad, extrañaba este lugar, subio al taxi con su bolso y empezaron el viaje.

Las casas, los edificio, las personas y lugares donde ella solia estar en su pequeña juventud abían cambiado por completo, todo menos uno, pagando el viaje se bajaron en la esquina de donde antes era su casa, no queria esperar más tiempo y se apresuro a dirigirse al lugar, Yoongi con las cosas aun en manos corrio atras suyo pidiendo que bajara la velocidad. De pronto estaba ahí, frente a ese lugar lleno de flores con las mismas puertas, los mismos colores y el mismo letrero solo que ahora con diferentes palabras.

<<EL PALACIO DE LAS FLORES>>

en letras grandes, negras, estaba la tienda de flores donde ya vivia su gran amor.

-sigue teniendo el mismo nombre- dijo el pelinegro.

-estoy segura de que, como tiene el mismo nombre tiene a la misma princesa- sonrió, esas palabras provocaron una pequeña risa en su hermano.

El timbre sono anunciando la llegada de un cliente, una joven chica de unos catorce años se levanto detras del escritorio limpiando su boca, parecian aver interrumpió su almuerzo, Tzuyu la miro de lo que podia ser visible en ella, la chica era de rasgos mestizos, parecia ser coreana pero sus ojos eran japoneses, su pelo largo de color castaño, un lunar debajo del ojo derecho.

Antes de sacar alguna cosa fuera de lo común pregunto por la chica que vivia en el mismo lugar arriba de la tienda, la joven parecia desconfiada pero respondió que la señorita abía salido. Recibiendo esa respuesta se quedo adentro del lugar con intenciones de esperarla, eso no fue del agrado de la pequeña recepcionista.

-disculpa pero si no piensa comprar nada le pido que se retire-

-yo estoy esperando a la señorita de la casa- dijo Tzuyu

-es usted alguna conocida de Sana?- pregunto la niña.

-claro, podria decirse que soy una persona muy cercana a ella- sonrió respondiendo su pregunta

Sin mas que adjuntar la niña le dijo que llegaría en quince minutos aproximadamente, asintió en señal de gracias y se volvio a quedar afuera centada, a todo esto Yoongi no estaba con humores de esperar haci que mientras buscaba un lugar donde poder quedarse, abandono a Tzuyu en la tienda, entendio las razones de su hermano pero se sentia angustiada por el momento, estaria por ver de nuevo a Sana, su gran amor y su oficial novia.

Parecia querer desmayarse por la tención y presión del momento.

Ya pasado los minutos empezo a ver por todos lados, no abía señales de la chica lo que la desánimo un poco pero, seria posible que en este tiempo ella no cambiara; seguramente lucirá diferente, se pregunto si en la posibilidad de que llegara a cambiar su aspecto, como luciria su amada. No importaba ya que, aunque cambiara todo de ella solo bastaría con una mirada para poder reconocer el calor de su corazón y el amor mutuo de ellas dos.

Haci fue que cuando vio a una chica, pelo corto con un fleco partido en la mitad semi largo, vestía un traje negro combinando con un maletín en sus manos; era la misma sonrisa, eran los mismos ojos, boca, rostro, todo era igual a lo que ella recordaba, era su amada. Era Sana...

Levantándose de las maderas donde estaban apolladas las flores se paro frente a la puerta, espero a que ella se hacercara y sucedió.

Sana quedó confundida con aquella silueta que estaba al frente de la tienda, era una chica de pelo largo medio ondulado, con una camiza blanca de manga corta y una falda azul marina asta los tobillos; mientras más se acercaba era mas visible su rostro, de repente quedo frente a frente a aquella mujer la cual la dejo perpleja, pensando si estaria en ese momento en un sueño o si alucinaba por el calor.

Estaban juntas, en aquella calle donde vivieron una adolescencia llena de diversión y dónde sin darse cuenta se declararon amor, Tzuyu y Sana seguían siendo las mismas apesar de los años.