1 Depresión

381 25 11
                                    

Era una tarde tranquila, el viento soplaba fuertemente, pero las paredes de la casa lo protegían y a pesar del frio que hacia no sintió la necesidad de abrigarse.

la familia salió de casa debido a una presentación de teatro que tendría Heavy esta tarde, pero Dee se negó rotundamente a ir ya que tenía una 'tarea' muy complicada y larga, sus padres no insistieron mucho así que lo dejaron quedarse solo en casa con la condición de que no lleve a nadie a esta y que según victoria "no provoque un incendio " después de esto se despidieron y partieron hacia la preparatoria no sin antes decirle a Dee que el evento seria largo así que no los esperar y que preparara su cena.

Dee los despidió en la puerta y cuando vio que ya se perdían en el horizonte la cerro , solo eso, se quedó allí parado por unos segundos, minutos o tal vez hasta horas viendo a la puerta cerrada, su mente ya tan frágil y endeble, tan sobrecargada de información no podía procesarlo, su cara inexpresiva ahora, con los músculos total mente relajados poco a poco se fueron tensionando y plasmaron una mueca de dolor y desesperación en su rostro, el ya no podía más, la presión lentamente lo fue aplastando hasta el punto en que sus rodillas flaquearon y callo sobre estas al suelo esbozando un grito desgarrador mientras que sus manos se aferraban fuerte mente a su cabello, las lágrimas salieron como cascadas por sus ojos, y de forma casi consecutiva cayeron al piso aquellas saladas gotas de desesperación que gritaban todo aquello que el callaba.

Pasaron unos minutos y Dee volvió a levantarse, paso una de sus manos por su rostro tratando de limpiarlo un poco, podía sentir como el maquillaje de sus ojos se corrió y ahora este se encontraba desparramado por sus mejillas, a paso lento se dirigió al baño, se miró al espejo y vio el desastre que era ahora mismo, abrió el grifo y junto sus manos para recoger algo de la helada agua que caía de aquel artefacto metálico, después paso el cristalino liquido por su rostro soltando un pequeño quejido de incomodidad cuando el agua acaricio su cálido rostro, luego se peinó adecuadamente y se dirigió hacia su habitación, más específicamente a aquella pequeña mesita de noche en la que guardaba un bisturí el cual lo ayudaba a lidiar con todo.

Lentamente abrió el cajón, escarbo un poco hasta que por fin encontró aquel objeto afilado que tan desesperadamente buscaba, se quitó las manillas de cuero que cubrían sus destrozadas muñecas y sin pensarlo mucho deslizo la afilada hoja de acero por su pálida y delgada piel logrando dibujar delgadas rallas de las cuales fluía un carmesí y cálido líquido, durante esos cortos segundos por los que el bisturí bailaba sobre su piel por fin podía dejar de sentir aquel horrible vacío en su pecho y esas desesperantes ganas de llorar, por fin dejaba de sentirse tan jodidamente mal por no poder ser aquel "chico perfecto" del que absolutamente nadie hablaba, por fin se sentía libre, pero después de tanto deslizar la navaja del bisturí sobre sus muñecas las heridas se empezaron a encontrar y la sangre empezó a escurrir hasta caer al suelo, Dee al notar esto dejo de herir su carne y busco en el mismo cajón aquel trapo negro manchado de incontables glóbulos rojos ya muertos por todo el tiempo que llevaban en este y limpio las gotas de sangre derramadas en el suelo, después de esto lo volvió a guardar en el cajón junto con el bisturí, fue al baño y limpio sus demacradas muñecas.

con atención observaba como la transparente agua se teñía de un apasionado color rojo y luego huía por el desagüe, después de unos segundos las heridas dejaron de sangrar así que fue a busca un botiquín para desinfectarlas y colocar una venda alrededor de estas, salió del baño y volvió a su habitación en busca de sus manillas de cuero las cuales disfrazaban aquellas vendas blancas que abrazaban sus muñecas.

ya por fin se había desahogado, estaba tan tranquilo y extrañamente feliz así que decidió no saltarse la cena de hoy.

Bajo al primer piso y se dirigió a la cocina, busco en la nevera y la alacena algo para cenar, entre todo lo que había se decidió por unas salchichas enlatadas y un paquete de frituras, su padre probablemente lo regañaría si lo viera comiendo esto a la hora de la cena, es más, tal vez lo regañaría si lo viera comiendo esto a cualquier hora del día, pero él no estaba en casa y como dice aquel viejo dicho "cuando el gato no esta los ratones hacen fiesta"

Dee solo se rio ante este pensamiento el cual solo lo hacía ver más viejo a pesar de solo contar con 15 años, pero bueno que se le podía hacer.

Coloco su cena en un plato hondo y le agrego un poco de salsa tártara para acompañar, se dirigió hacia el sillón alargado que había en frente de la tv en la sala y tomo el control remoto que reposaba en una pequeña mesa al lado de este, prendió la tele y reviso superficialmente que programas estaban dando en cada canal de la tv hasta que encontró uno que llamo su atención

(sonido de la tv)

Hola a todos y bienvenidos a un nuevo programa de "gustos o enfermedad mental " hoy les presentamos un nuevo capítulo titulado incesto

Fin del capítulo 1

Cuerdas de violín Dee x HeavyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora