Obsesiones a la antigua

Talvez un adiós

Creo que sería un monstruo horrible si la obligó a quedarse aquí... Debería dejarla ir sola? Ir con ella?
Sentí su ligero movimiento, había despertado me miró con aquellos ojos tan lindos, la abrace aún más al igual que ella a mi. Al mirarla sabía que esperaba mi respuesta pero sus ojitos estaban tristes seguramente pensaba que la mantendría aquí por siempre o que la dejaría ir sin mi... Ambos nos habíamos obsesionado uno del otro.
Solo respire fue todo, me levanté y le tome la mano.
-Hoy preparo el desayuno... Te parece- al verme así ví la sonrisa en su rostro...

-2 semanas después-

Su asistente estaba afuera con el auto, el pánico estaba en mi garganta pero solo respiraba, miraba mi rostro en el espejo recordando las llamas muy próximas a mi.

-Brahms- le hablaré gentilmente, ví que lo había sacado de sus pensamientos- todo estará bien incluso tuvimos una idea- le sonríe felizmente, me acerque a el a colocarle un cubrebocas y unas gafas, sujeto mi mano gentilmente al ponerle las gafas, sabía que apreciaba el tratar de ocultar su rostro

-Los vidrios están polarizados no te van a ver, y creeme ... A veces es fácil evadir muchas cosas- me rei ligeramente ambos nos dirigimos abajo, pasamos por la sala, me llegó el amargo recuerdo Greta pero no era un problema y de la rubia oxigenada no podríamos matarla sería muy sospechoso, talvez en su momento...
Salí por la puerta frontal.

Volte a ver mi casa... Nuestra casa, volveríamos en invierno por las nevadas, respire para cerrar la puerta detrás de mi y mirar felizmente a Archer... Tiempo que no mencionaba su apellido, me extendió su mano para ir al auto, su asistente...amigo nos vio con una cálida sonrisa para después subirse al auto, mire atrás para ver por última vez la casa donde encontraría mi obsesión pero talvez también mi salvación.

-Fin-