𝑺𝒐𝒖𝒍 & 𝑺𝒑𝒆𝒍𝒍 - 𝑆𝑡𝑖𝑙𝑒𝑠 𝑆𝑡𝑖𝑙𝑖𝑛𝑠𝑘𝑖

𝙲𝚊𝚙𝚒𝚝𝚞𝚕𝚘 𝙸𝙸𝙸

𝐹𝑢𝑙𝑙 𝑀𝑜𝑜𝑛 𝑁𝑖𝑔ℎ𝑡.

Tomé otro examen de la pila y comencé a revisar las claves para compararlas con la hoja de respuestas que mi padre me había entregado.

Llevaba cerca de hora y media revisando exámenes de otros cursos y ya me dolía la espalda por estar tanto tiempo sentada en las incómodas sillas de la escuela. Y aunque odiaba en serio calificar exámenes, agradecía que mi padre no me haya marcado como ausente en su clase a cambio de esto.

Una de las ventajas de que tu padre fuera tu maestro.

Calculé la nota del examen que estaba revisando y chasqueé la lengua mientras escribía la calificación con marcador rojo. Quien quiera que fuera Michael Roberts, había reprobado matemáticas.

Moví mi pierna de arriba a abajo repetida, e inevitablemente, en un gesto nervioso y tomé otro examen.

Mi cabeza no dejaba de imaginar distintos escenarios en los que el plan de Derek, cualquiera que fuera, fallaba. Isaac escapaba de su celda y mataba a todos en la estación. Mi madre incluída.

Y aunque ese escenario no dejaba de repetirse en mi cabeza, también me preguntaba qué pasaría conmigo durante la luna llena. Me transformaría, es un hecho, pero, ¿Qué iba a hacer Derek al respecto? ¿Me encerraría como un perro hasta que pasara la luna llena? ¿O me enseñaría algún método para poder controlarme e ir a salvar a Isaac?

Mordí la uña de mi dedo pulgar aún más nerviosa; llenándome la cabeza con pensamientos negativos.

—Ya puedes irte.

Levanté mi vista para ver a mi padre.

—¿Qué cosa?

—Que ya puedes irte —repitió sonriendo. Sus hoyuelos marcando sus mejillas —. A menos que no quieras.

—No, no. Me voy —dije levantándome rápidamente y colgando mi mochila en un hombro. Harry rió —. Nos vemos luego —me despedí dejando un beso en su mejilla.

—Avísame cuando llegues.

—Lo haré.

Caminé fuera de la sala de clases y me topé de frente con Stiles que salía apresurado de otro salón.

—Woah. Lo siento.

—Sí, sí. Adiós —respondí, siguiendo mi camino apresuradamente. Sabía que si no escapaba de la vista de Stiles lo más pronto posible, intentaría atajarme para hablar sobre que ahora soy hombre lobo o algo así y no podía permitírmelo. Debía encontrarme con Derek para saber cuál era ese milagroso plan que nos sacaría de este problema.

—No. Espera —dijo él siguiendo mis pasos de todas formas hasta llegar a mi lado —. ¿Vas a ver a Isaac?

—Con Derek —corregí. Aunque es casi lo mismo.

—¿Quieres que te lleve?

Alcé una ceja y abrí la puerta de la entrada principal de la escuela. Stiles me imitó.

—¿En serio?

—Llegarás más rápido que con tu bicicleta —respondió alzando los hombros antes de apuntar a la bicicleta que tenía desde los trece años.

La pintura estaba algo gastada, pero aún seguía andando. Y eso bastaba para mí.

—No insultes a mi bicicleta —le regañé frunciendo el ceño —. Respétala. Me costó mucho conseguirla.

—Sí, como sea —dijo él avanzando hacia su auto y yo lo seguí deprisa. Pues, de todos modos, sí iba a llegar más rápido en auto.

—Lo digo en serio —señalé —. Yo no he hecho ningún comentario sobre la chatarra con ruedas que llamas auto.