Capítulo 14

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Singapur 21/09/2014


Siempre fui de las niñas que querían casarse, de las que bailaban en su habitación y veían vestidos para el gran día.

Yo siempre soñé con un príncipe azul.

Un vals bajo las estrellas.

Miles de fotos en un álbum.

Había oído a Vic decir que los principes azules no existían, que ella se había cruzado con un rey villano.

Pero mi príncipe azul existe y se ve animado viendo las doscientas fotos que nos han dado de nuestra boda y decidiendo minuciosamente como ubicarlas en nuestro album.

Uno para nosotros, una copia para sus padres y una referencia de amor para nuestros hijos futuros.

Las que irán en la pared y las que va a hacer en pequeño para tener siempre.

Su mano izquierda no suelta mi tobillo pasando foto tras foto y acaricio sus mechones castaños amando su cercanía.

Kimi pasa foto tras foto a Sebastian, que sin mirarla a los ojos, le da las fotos a Vic que de la misma manera lo ignora.

Lewis escuchado música a mi costado revisa un puñado de fotos que alcanzó a tomar al llegar y cada tanto hace pucheros señalando lo lindo que fue todo.

— Es lindo — dice Kimi, aburrido.

Las unicas fotos de boda que le gustaron fueron las suyas y ni a esas les dió suficiente atención.

— Obvio que es lindo, estoy en cada foto — se mofa mi esposo y Sebastian rie enfocandose en una en específico.

— Cuando me case solo usaré polaroids.

Sebastian levantó la cabeza hacia la piloto, atento y curioso.

— ¿Polaroids?

— Si — le respondió a Kimi — que todos los invitados hagan fotos, una perspectiva de todos, como cada uno ve mi universo.

Jules me lanzó una mirada cómplice cuando Sebastian dijo que aún así debía de haber fotografos profesionales.

Una discusión nueva entre ellos.

Que sorpresa.

Admito fue buena idea acompañar a Jules a Singapur, me gusta estar cerca suyo.

Y sentada en el piso del motorhome de Marussia con las personas que conocí en estos años me sentí cómoda.

Feliz.

Segura.

《Jules.

Me gusta nuestra familia.

Me gusta que siempre estemos juntos. 》

Dear diary, I met a boy | Jules BianchiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora