玉:CATORCE(十四)

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Gyuvin cerró una poderosa mordida en piel suave.

Ricky cerró los ojos, soltando un lastimero sollozo desesperado cuando la sangre de la mordida salpicó su mejilla.

Gyuvin inhaló con dificultad a la vez que cerraba la mandíbula con más fuerza en el dorso de su propia mano, protegiendo el cuello de Ricky antes de que pudiera cometer una locura.

La mordida de un Alfa no era un asunto trivial, Gyuvin pudo sentir cada tendón desgarrándose y cada vena siendo rasgada, y aunque se detuvo antes de llegar al hueso, el daño no era insignificante.

La respiración del castaño fue brusca y desigual, y supo que estaba aún más jodido cuando Ricky se estremeció debajo de él debido a otra ola de calor y seguido dejó de moverse.

Y es que podía intentar reprimir sus feromonas y su olor para no afectar más el celo del Omega, pero era imposible anular el olor de la sangre. Ahora mismo acababa de empujar a Ricky más profundo en su celo.

Aunque, ¡¿No se suponía que Ricky no podía oler nada?! ¡¿Entonces qué demonios estaba pasando?! ¿Quizás era una reacción biológica? ¿Ricky no podía olerlo, pero su cuerpo aún reaccionaba debido a alguna reacción química o algo así?

Gyuvin estaba cubierto en sudor frío. El dolor que le recorria desde el dorso de la mano hasta el resto del brazo era insoportable. Estaba temblando de dolor y su cabeza se volvió más caótica a la vez que soltaba respiraciones fuertes.

Sin embargo, este dolor era lo único que mantenía su consciencia despierta. No podía perderse en el calor y morder a Ricky como recién intentó hacerlo.

Ahora mismo no confiaba en poder refrenar su deseo si soltaba su propia carne de entre sus dientes.

Gyuvin gruñó y se repitió a sí mismo como una mantra:

"No voy a aprovecharme de un Omega en celo. No lo haré. No soy esa clase de hombre. No lo haré."

Dejó ir lentamente su carne y retrocedió con gran dificultad, la sangre manchó la cama mientras Gyuvin se sostenía la mano herida contra el pecho.

No podía quedarse aquí, era un peligro para Ricky.

Incluso a través del dolor punzante, todavía estaba siendo tentado por el aroma de Ricky y era casi imposible de resistirse.

Mientras pensaba en ello, miró al rubio, y sus ojos se abrieron en conmoción y preocupación.

Las lágrimas fisiológicas que anteriormente se habían acumulado en los ojos del Capitán Shen, finalmente corrieron hacia abajo por la esquina de sus ojos.

Fueron líneas y líneas de gruesas gotas de agua cayendo una tras otras.

Ricky estaba viendo un punto infinito en el techo, sus pupilas se habían extendido hasta hacer que lucieran como un par de ojos negros. Él estaba teniendo constantes espasmos que lo hacían retorcerse levemente sobre la cama y su boca estaba abierta como si estuviera luchando por respirar.

Se veía absolutamente perdido y fuera de sí.

—Mierda. Mierda. Mierda. —Gyuvin estaba desesperado.

Gyuvin ni siquiera era un experto en percibir las auras de otras personas, y actualmente todo su cerebro estaba descompuesto, pero incluso él pudo percibir que la energía de Ricky se estaba volviendo loca y que sus venas espirituales debían estar ardiendo como el infierno.

Era incapaz de pensar en una solución, y el aroma de Ricky se estaba intensificando a la par que perdía el último hilo de consciencia que aún le quedaba en medio del celo.

JADE (RYUVIN/GYUBRIK)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora