Danger, I'm falling in love

Envidia

Hoseok estaba tumbado en la cama mientras Taehyung mordía sus muslos, subió por abdomen hasta llegar a sus tetillas, las pellizcó y luego lamió al rededor de estas hasta que se pusieron erectas, luego succionó y mordió. Hoseok jamás se había sentido tan excitado. Taehyung le tocaba como si su cuerpo fuese divino y le besaba con una delicadeza que le erizaba la piel. Sintió  los brazos de Taehyung colarse por debajo de sus piernas acomodándose para engullir su miembro, Hoseok gimió alto cuando la calidez  de aquella boca devoraba su miembro.

Taehyung estaba sobre estimulado escuchando los gemidos de Hoseok, necesitaba tomarlo con fuerza, pero primero debía hacerlo sentir bien. Deseaba borrar aquellos recuerdos de otros con los que había estado. Sentía las manos de Hoseok revolviendo su cabello y su cuerpo temblaba mientras él empujaba sus caderas contra el rostro de Taehyung corriéndose dentro. 

Sintió el semen de Hoseok empapar sus papilas gustativas, se lamió los labios y luego se puso de rodillas frente a Hoseok, este al verlo se excitó pues masturbaba su miembro. ─ Te follaré muy fuerte.

─ Sí. 

Respondió Hoseok sin poder articular más palabras, luego Taehyung le dio vuelta y empezó a dar palmadas en sus glúteos. Cuando los vio enrojecidos y su novio gemía por aquella sensación, abrió sus glúteos y metió su miembro, abrió sus piernas levantando un poco sus caderas y lo penetró con furia.  Hoseok se aferró a las sábanas sonriendo por la sensación tan deliciosa que le provocaba el miembro de Taehyung dentro de él. Taehyung lo embestía una y otra vez, veía como su miembro abría quel orificio que le llenaba de placer, se inclinó más sosteniendo a Hoseok por el abdomen y mordió su espalda besando luego su cuello.

— ¿Esto te gusta?— preguntó empujando con fuerza, Hoseok gimió al escuchar su voz en su oído.

— ¡Ahhh mierda! ¡Sí me encanta!

— Entonces lo haré más fuerte.

Se alejó observando como su presemen humedecida aquel lugar que le fascinaba. Luego colocó a Hoseok boca arriba, levantó sus piernas felxionando su cuerpo, se puso en pie sobre la cama y se alineó empujando con fuerza. Hoseok no supo más de él al sentir la profundidad con que era tocado. Sus cuerpos parecían conectarse tan bien que durante toda la noche no dejaron de hacer el amor.

En el penthouse de al lado, Jungkook veía dormir a Jimin, era toda una belleza. Amaba sus labios apetitosos, sus caderas y glúteos que parecían el origen del pecado de la lujuria. Llevó su mano a las mejillas de Jimin y sonrió ante su color producto de horas de placer. Esa noche se había entregado por segunda vez y había Sido maravilloso, parecía que cada vez que lo hacían descubrían más puntos de placer. Lo abrazó y durmió junto a él sintiéndolo en sus brazos. — Hermana, esto es peligroso... He caído completamente enamorado de él.

Al amanecer, Jimin había aceptado ir a correr al parque que se encontraba frente al edificio donde vivía Jungkook y después irían a desayunar. Para que al finalizar Taehyung y Jimin regresaran a la granja. Jimin observó a su ahora novio terminando de atarse los cordones del zapato, él se había levantado primero y ahora esperaba a que este estuviera listo.

— ¿Estás listo, kook?

— Sí, hoy será un gran día.

Jimin asintió y salieron del penthouse, la mayoría de los empleados veían curiosos a la pareja pues  Jungkook jamás había tenido novio o novia, además recordaban que ellos habían negado algún tipo de relación y ahora se veían enamorados.  Al llegar al parque ambos hicieron ejercicios de estiramiento, Jungkook se acercó a Jimin y le hizo masajes en los hombros y en la nuca, pero los sonidos que salían de la boca de Jimin lo estaban poniendo muy listo para otro tipo de ejercicios.