La Boda de mi Mejor Amigo

Capítulo 12

Harry estaba midiéndose su túnica siendo atendido por un sastre mago y cuando se giró, vio a Draco con Theo en el vestíbulo de la tienda conversando en voz baja. Este le estaba acariciando la mejilla con una mano, luego le arregló las solapas del saco. Harry frunció el ceño. Cuando Theo se inclinó y le dio un casto beso a Draco y se retiró a la entrada, Harry se bajó del escabel sin importar que el sastre no hubiera terminado.

Draco se acercó hacia donde estaban Harry y el sastre. Harry se detuvo y dejó al hombre trabajar mientras le esperaba impaciente.

"Buenos días", dijo Harry mirándole con las cejas alzadas.

"Harry, tengo que decirte algo", dijo Draco impetuoso.

"¿No te gusta el traje?", dijo Harry girándose para él y Draco lo miró.

"Eh... no, es horrendo... pero no, eso no es lo que vine a decirte".

"Okey...", dijo Harry titubeando, "pero antes, déjame decirte algo yo", se giró al sastre y le dijo, "¿nos podría dejar solos, por favor?"

Harry se acercó a un perchero y revisó los bolsillos de una chaqueta colgada. Sacó una pequeña cajita y se la entregó a Draco.

"Cuida esto como si de ello dependiera tu vida", Harry le miró serio. Draco miró el paquetico. Era una cajita de terciopelo negro. Draco arrugó el ceño.

"¿Qué es esto?", dijo sin entender.

"El anillo", dijo Harry señalando con un dedo la cajita.

"¿Por qué diablos me das esto?", dijo Draco aterrado.

"Oh, no confío en Ron con esto, Draco", y se encogió de hombros, "Está con la cabeza en las nubes por el embarazo de Hermione. No recuerda a veces ni su apellido" y le miró suplicante.

"Pero, yo no creo que sea lo apropiado... yo no soy tu Padrino", dijo Draco.

"Oh, por favor, Draco... vamos, no lo puedo guardar yo... ando por todos lados, entre el trabajo y las cosas de la boda estoy enloqueciendo... solo confío en ti para tenerle", y bajando la voz se le acercó diciendo, "Además, tú en cierta forma eres más el Padrino que Ron... él está tan ocupado que apenas si se ha aparecido esta semana en las celebraciones y demás... y no le gusta Astoria", dijo en voz más baja aún. "Aceptó por compromiso... jamás me haría un desprecio no siendo mi Padrino, pero yo estoy claro en dónde estoy parado aquí. Él no hará sino lo mínimo necesario en esta situación. No como tú", sus ojos verdes le miraban con tanto aprecio que Draco solo asintió y se guardó la cajita en su bolsillo interior.

"Okey, okey", y suspirando agregó, "Gracias por decirlo... eso...", y se encogió de hombros.

"¿No lo abrirás?", dijo Harry con las cejas alzadas.

Draco lo sacó de nuevo y abrió la cajita. Era hermoso. En ese momento, odió mucho a Astoria Greengrass.

"Es parte de mi legado Potter", dijo sonriendo Harry. "¿Crees que le guste?", Draco asintió atontado.

"Si", dijo simplemente, y luego miró a Harry con una sonrisa. Este lucía aliviado y radiante. Luego se regresó al escabel.

"¿Qué querías decirme?", dijo mientras Draco observaba un momento más el anillo y luego lo volvía a guardar en su saco.

"Eh... yo", dijo dudando. El anillo le había acobardado totalmente.

"Dijiste que querías decirme algo", dijo Harry mirándole con las cejas alzadas.

"Oh, si", Draco se aclaró la garganta, "Harry, eh... nosotros nos conocemos desde los once años... no sé, como veinte años... no, es menos, pero se siente como toda una vida, la verdad... y en ese tiempo... hemos madurado, hemos pasado por muchas cosas... nos hemos vuelto... cercanos". Harry asintió y sonrió un poco mientras el sastre seguía haciendo ajustes a su espalda. "¿Entiendes lo que quiero decir?"

"Creo que sí", dijo Harry y rió un poco.

"Qué bueno", dijo Draco y rio también nervioso. "Entonces... a veces... pasa que..." Draco miró al sastre. "Por favor, nos podría dejar solos un momento", el hombre le miró un poco malhumorado pero se retiró, "a veces, Harry, la gente piensa que sabe lo que siente por otro... sobre todo cuando se conocen mucho tiempo... pero no siempre es así... hasta que... por fin lo entienden...", como Harry le miró sin entender, siguió, "Ya voy a llegar al punto... lo que quiero decir es que..."

"Vamos, Draco... lo que sea que tengas que decir, estoy seguro que puedes hacerlo... no puede ser tan complicado, Dragón", dijo Harry y rió un poco.

"Oh, Harry", dijo Draco meneando la cabeza, "sabes... en realidad, algo importante, es un término relativo", dijo riendo un poco porque estaba bastante nervioso mientras Harry le miraba intrigado. En ese momento, oyeron un golpe. Ambos se giraron. Theo se había tropezado con un maniquí que estaba curioseando y lo había tumbado.

Draco rió nervioso de nuevo y Harry observó a Theo luchar con el maniquí para levantarlo y a Draco que meneaba la cabeza sin saber cómo seguir.

"Ese tipo... es Nott, ¿no es cierto?"

"Si... si, es Theo", dijo Draco mirando a Harry que sonreía. "Te he hablado de él... es mi Editor, mi Abogado, mi Asesor...", y se encogió de hombros.

"¿Y qué hace aquí?", dijo Harry intrigado. "¿Estás trabajando el fin de semana?"

"No", dijo Draco. "Él... vino a pasar tiempo conmigo", dijo con simpleza.

"¿Por qué?", dijo Harry confundido.

"Bueno... él es mi amigo...", dijo Draco dudando... "Un buen amigo, de hecho", y encogiéndose de hombros, agregó, "Es mi mejor amigo estos días, en realidad".

"Oh", dijo Harry, y dio un paso atrás como si le hubieran abofeteado.

"Tú te la pasas ocupado", dijo Draco tristemente.

"Entonces... lo que hablabas... ¿tiene que ver con Nott?" Draco le miró helado, y de repente pareció que se encendió una luz en su mente.

"Si", dijo simplemente. "Es que él... y yo... tú sabes", dijo y Harry sonrió.

"Oh, pero eso es grandioso", dijo Harry y le tomó del brazo y se encaminó hacia donde estaba Theodore intentando no mirarles pretendiendo no estar esperando a Draco.

Caminaron hacia Theo mientras Draco sonreía radiante y Harry lucía encantado con la noticia.

"Estoy impactado", dijo Harry sonriendo hacia Theo. Le extendió la mano y Theo sonrió pensando que Draco le había dicho la verdad y Harry estaba feliz por ello.

"Felicidades", dijeron ambos a la vez. Theo miró confundido a Draco.

"¿Qué?", dijo este mirando a Harry sin entender.

"Le conté, amor", dijo Draco mirándole y abriendo los ojos intentando captar su atención, "Ya Harry sabe que estamos comprometidos", dijo asintiendo repetidamente. "No debemos avergonzarnos de ello", Theo le miró con los ojos muy abiertos y Draco se apresuró a decir mirando a Harry, "Ya vuelve a Nueva York. Solo vino unas horas a.... Tú sabes", y dio a entender con la cabeza a qué. Harry le miró con los ojos muy abiertos. Luego rió como si no pudiera creerlo.

"Eh...", dijo Theo y luego sonrió hacia Harry. "Si... es un asunto que toma algunas horas", y se encogió de hombros, rio un poco y luego miró a Draco como si quisiera matarlo.