Capítulo 51: Año Nuevo, los mismos problemas

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Esta historia ahora tiene una página de TV Tropes, cortesía de Marcus S. Lázaro! ¡Muchas gracias por ayudar a que ese sueño particular mío se vuelva real!

Capítulo cincuenta y uno: Año nuevo, los mismos problemas

Llegar a King's Cross para tomar el tren fue más una tarea de lo que había sido hasta ahora. El Sr. Weasley no había logrado obtener automóviles del Ministerio, ni tenían acceso al ahora salvaje Ford Anglia, por lo que viajarían a la estación en los taxis de Muggle, quienes decididamente no se divirtieron al necesitar transportar siete troncos pesados, dos búhos y dos gatos. Eso ciertamente no ayudó que todos esos animales y sus dueños quisieran estar en el mismo taxi, lo que significa que Daphne fue aplastada contra la puerta, con un molesto Nyx en su regazo, junto a Harry llevando la jaula de Hedwig, luego Ron con Pigwidgeon — que estaba increíblemente emocionado y no dejaba de ulular — y finalmente Hermione con Crookshanks, que estaba aún más molesto que Nyx.

A Daphne no le importaba estar tan cerca de Harry, especialmente ahora que ella misma había admitido — pero aún no a él — que le gustaba, pero todavía estaba contenta una vez que llegaron a la estación y ella pudo salir. Nyx y Crookshanks habían disgustado por estar encerrados en los autos bastante despejados al rascar a todos, y ninguno fue mucho más feliz cuando tuvieron que cruzar la calle bajo la lluvia torrencial. Abordar el tren nunca había sido tan aliviado como lo fue ese día.

Después de agradecer a la Sra. Weasley por invitarla, Daphne, Harry, Hermione, Ron y Ginny regresaron al compartimento en el que habían escondido su equipaje. Pigwidgeon todavía estaba ululando como un loco, y Ron sacó una túnica marrón horrible y con volantes y la arrojó sobre su jaula para amortiguarla un poco.

"Que es eso?" Daphne preguntó.

"Ladrón de batas", dijo Ron irritablemente.

"Sí, te compro nuevos cuando lleguemos a Hogsmeade", dijo Daphne con una mirada repugnante a la túnica. "Eso ni siquiera es lástima, es un alivio de desastres, o algo así."

Ella se volvió hacia Harry. "Son los tuyos igual de malos?"

Harry sacudió la cabeza. "No. Se parecen a mis túnicas escolares, solo verdes ", dijo.

"Buen color", dijo Daphne con una sonrisa.

Harry le devolvió la sonrisa.

"Hablas en serio acerca de conseguirme nuevos?" Ron preguntó con suerte.

"Mamá te matará si no te pones esto", dijo Ginny con una sonrisa.

"La Sra. Weasley tiene exactamente el mismo color de cabello que usted. ¿Por qué demonios escogió granate?" Daphne preguntó.

"De segunda mano", fue todo lo que Ron tuvo que decir sobre ese tema.

"Derecha. Entonces sí, te voy a comprar túnicas nuevas. Solo ... dile a tu mamá que usaste estos, si es necesario."

El clima empeoró a medida que avanzaba el día, y Daphne esperaba que entrara un Dementor, como el año pasado, pero al principio solo eran algunos de los otros Gryffindors, quien entabló una conversación entusiasta sobre el partido de la Copa Mundial. Los disturbios, afortunadamente, no fueron mencionados en absoluto.

Ron le estaba diciendo a Neville que habían estado en el Top Box y que habían visto a Krum de cerca cuando algo peor que un Dementor entró en el compartimento.

"Por primera y última vez en tu vida, Weasley", dijo Malfoy. Estaba vigilado, como siempre, por Crabbe y Goyle.

"No recuerdo haberte pedido que te unas a nosotros, Malfoy", dijo Harry con frialdad.

Daphne Greengrass y el niño que vivió -COMPLETO-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora