Daphne Greengrass y el niño que vivió -COMPLETO-

Capítulo 56: Temperamentos en ascenso

Capítulo Cincuenta y Seis: Temperamentos en ascenso

Fue bastante interesante escuchar los rumores que circulaban por la escuela en los días posteriores a la nominación de Harry como campeón. El más ampliamente creído era simplemente que Harry había entrado de alguna manera, pero en muchas versiones de la historia había recibido ayuda de otros estudiantes o incluso maestros.

Daphne también había sido acusada de ingresar el nombre de Harry en la copa, ignorando por completo el hecho de que ella era solo unos meses mayor que él, y por lo tanto tan incapaz de cruzar la línea de edad como lo había sido el propio Harry. El rumor más ridículo que había escuchado era que Filch había entrado en el nombre de Harry, solo para molestarlo.

Sin embargo, en general, los estudiantes de Hogwarts no estaban particularmente contentos con Harry, y Daphne pudo ver que se estaba tomando todo el autocontrol de Harry para no explotar en las personas. Mientras que Hagrid —, que misericordiosamente había quitado la clase de los skrewts, y ahora les había estado enseñando sobre Nogtails, — estaba completamente del lado de Harry, Snape se deleitó en su miseria e hizo comentarios sarcásticos en cada oportunidad, para gran diversión de Malfoy.

En la segunda semana, sin embargo, las cosas llegaron a un punto crítico. Malfoy había estado actuando misteriosamente en la sala común toda la semana, saliendo con muchos de los otros Slytherins, y en ese viernes en particular había revelado la razón: insignias mágicas que decían 'APOYO A LA DIGGORIA CEDRICA — THE REAL CAMPEÓN DE HOGWARTS!' y podría ser alternado para mostrar otro mensaje, 'POTTER PIENSA'.

Por supuesto, Malfoy y sus matones los usaban, al igual que la mayoría de los otros Slytherins, e incluso muchos estudiantes de otras Casas. En su año, solo Daphne y Tracey no lo hicieron, aunque Pansy le había dicho a Daphne que su uso estaba más fuera de la política de Noble House que cualquier otra cosa.

Más allá de eso, sin embargo, el S.I.N. los miembros eran los únicos Slytherins que no usaban las insignias, lo que les valía un poco de ridículo de sus compañeros de casa, aunque a ninguno de ellos le importaba mucho; no habían sido populares de todos modos debido a sus intentos de disminuir toda la intimidación. El problema era que Daphne solo había visto las insignias por primera vez antes de Pociones ese día, y no había podido advertir a Harry de ellas de antemano.

"Oh, muy gracioso ", dijo Hermione sarcásticamente.

"Quieres uno, Granger?" Malfoy preguntó, tendiéndole una insignia a Hermione. "Tengo muchas. Pero no toques mi mano, ahora. Lo acabo de lavar, ya ves; no quiero que un Mudblood lo adelgace."

Daphne quería alcanzar su varita, pero Harry ya había dibujado la suya. La gente a su alrededor y Malfoy se apresuraron a salir del camino.

"Harry!" Hermione dijo con advertencia.

"Continúa entonces, Potter", dijo Malfoy en voz baja, sacando su propia varita. "Moody no está aquí para cuidarte ahora ... hazlo, si tienes las agallas..."

Harry y Malfoy se miraron el uno al otro por una fracción de segundo, luego atacaron exactamente al mismo tiempo.

"Furnunculus!" Harry gritó, mientras Malfoy gritaba, "Densaugeo!"

Chorros de luz disparados desde las varitas, chocaron en el aire y rebotaron en ángulos. La maldición de Harry golpeó a Goyle en la cara y Malfoy golpeó a Hermione.

"Hermione!" Ron gritó, saltando hacia adelante para ver qué le pasaba.

La cara de Goyle estaba estallando en terribles forúnculos, y los dientes frontales de Hermione parecían estar creciendo a un ritmo alarmante.